Una gran conmoción se generó en el mundo del espectáculo por la muerte de Fabián Peloc, más conocido como Floppy Cucu. Trabajaba como asistente y mano derecha de Lizy Tagliani, la conductora de El precio justo. A los 33 años, falleció en la clínica Suizo Argentina debido a unas complicaciones en su salud, consecuencia de una leucemia recientemente diagnosticada.
En las redes sociales, Floppy se mostraba siempre alegre y solía compartir con sus seguidores imágenes y videos sobre su trabajo en la pantalla chica con Tagliani, quien la consideraba como una “hermana”. Hace cinco semanas, celebró haberse recuperado del coronavirus, como también lo hizo su mejor amiga: “Les quiero contar que finalmente el test de COVID-19 me dio positivo. Quiero agradecerles los mensajes con tanto cariño. Estoy muy bien cumpliendo el protocolo como corresponde”.
Alejada de la televisión, focalizó sus energías en mejorar su cuadro de salud, afectado por la leucemia. La conductora de Telefe la acompañó en todo momento, aunque estaba muy preocupada. Floppy era una persona muy creyente y se apoyaba en su fe para tener esperanzas de que iba a poder recuperarse y seguir adelante con su vida. En Instagram, su último posteo fue a principios de julio. “Yo confío en ti, Señor”, escribió junto a una imagen de Jesús.
Antes de fallecer, retuiteó el 26 de julio un mensaje del papa Francisco que hacía referencia a la muerte: “El Reino de los Cielos es lo contrario de las cosas superfluas que ofrece el mundo, es lo contrario de una vida banal: es un tesoro que renueva la vida todos los días y la expande hacia horizontes más amplios”.
También, había retuiteado un mensaje de Mariano Cascallares, el intendente de Almirante Brown, sobre un reconocimiento que le hicieron a su gran amiga por su trabajo social: “Le entregamos a @lizytagliani una copia de la Ordenanza N° 11.749 que la declara Persona destacada de la Cultura de Almirante Brown, por su trayectoria y su permanente compromiso con nuestra gente”.
Tagliani y Peloc tenían un fuerte vínculo de amistad desde que se conocieron en 2013 en una disco de Adrogué. Con el paso del tiempo, Floppy dejó de vender celulares para convertirse en la asistente de la conductora y ganó una gran popularidad. El humor era el lazo que las unía y compartían mucho tiempo. La partida de su mano derecha dejó devastada a Lizy.
“Perdón, pero no tengo fuerzas para contar... solo la suficiente para acompañar a la mamá y hermanas de una hermana que me dio la vida. Te adoro hasta pronto @fabianpeloc2012″, escribió la humorista en su cuenta oficial de Twitter, muy dolida por la partida de quien fue una importante persona en su vida que la acompañó en buenos y malos momentos.
“Hace un tiempo conocí una persona maravillosa, ya les contaré más... solo quiero decirles que hoy partió”, publicó la conductora en Instagram. Todo ocurrió muy rápido y su círculo íntimo se encargó de que su delicado estado no trascendiera. De hecho, al despedirla, Lizy reveló: “Hemos ocultado su lucha para proteger a su mami que no iba a poder ir a visitarla por la pandemia, teníamos mucha fe en que saldría adelante y nos reíamos de todo esto... pero quién sabe por qué misterioso motivo de repente hoy tuvo que partir”.
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