A lo largo de sus 34 años de vida, Karina La Princesita Tejeda ha tenido que sortear obstáculos de todo tipo. Y ha sabido sobreponerse a las situaciones más adversas que se le presentaron. Sin embargo, aún hoy, que es una mujer plena y una verdadera estrella en el mundo de la música, la cantante se angustia al recordar las agresiones que recibió de sus pares cuando era apenas una niña.
Hace poco más de un mes, Sol, la hija que la intérprete de “Con la misma moneda” tuvo con Ezequiel El Polaco Cwirkaluk, escribió una conmovedora carta en la que aseguró: “Constantemente sufro ciberbullying y es horrible, por suerte ya no me afectan esos comentarios, pero antes cuando era más vulnerable sobre lo que la gente pensaba de mí la pasaba re mal”. El texto tenía que ver con un trabajo que la jovencita había hecho para el colegio, pero su padre emocionado decidió compartirlo. Y su madre, en diálogo con Catalina Dlugi para Agarrate Catalina, por La Once Diez, reconoció que sabía muy bien de lo que hablaba la niña.
“¿Vos también alguna vez contaste que tus compañeritas te encerraban en el baño y te pegaban?”, le preguntó la periodista a la flamante jurado del Cantando 2020. “Sí, me han hecho de todo en realidad”, confirmó entonces Karina. La cantante contó que todo había comenzado cuando cumplió los 12 años y dejó de sentirse identificada con su grupo del colegio.
“Antes habían sido mis mejores amigas, eso es lo raro. Pero en esa época fue como que empezó a cambiar la generación. Estaba de moda que las chicas se juntaran en la esquina, fumaran, se chaparan a un pibe... Y para mí era como: ‘¡Ay!’. Yo era más aniñada”, empezó relatando La Princesita. Y dijo que, seguramente, como ella huía de todo eso por no sentirse parte, la empezaron a agredir.
¿Qué era lo que le molestaba a las otras niñas de Karina? “Yo participaba mucho en el colegio, calculo que era eso. No sé cómo decirlo para que no quede mal, pero yo no decía malas palabras y era más ‘señorita', como se decía en ese momento”, explicó la cantante. La Princesita recordó que la insultaban y le decían “cosas gravísimas” y “de la peor forma” que se pueda imaginar. Pero que a las agresiones verbales se le sumaban también las físicas.
“A veces iba al baño y, cuando me veían, empezaban a venir de a seis o siete atrás mío. Yo decía: ‘Uh, Dios, no puedo ni ir a hacer pipí tranquila...‘ Me empezaban a golpear las puertas hasta que yo salía. Me gritaban: ‘¡Dale salí, salí!‘. Y, cuando yo salía, mandaban a la más chiquitita a que me pegara un cachetazo. Entonces, yo me defendía y venía la más grandota, que me agarraba del cuello y me ponía contra la pared”, relató la cantante.
En ese momento, Catalina quiso saber si había llegado lastimada a su casa mucha veces. Pero Karina explicó: “No, no me quedaban marcas. Pero la verdad, yo soy muy reservada y en casa había tantos líos que no decía nada. Hasta que no soporté más, porque la venía pasando bastante mal. Tan mal que, de hecho, me acuerdo y me sigue haciendo daño”.
La cantante agregó que, en aquellos años, no recibió ningún tipo de ayuda por parte del colegio. “La preceptora, habiendo golpes de por medio, decía eran cosas de chicos. Se lavaba las manos sin tener en cuenta que ese tipo de cosas te dejan marcas de por vida”, concluyó La Princesita.
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