La cuarentena obligatoria impidió que los fanáticos se reúnan para vivir la segunda temporada de Bake Off Argentina. La “juntada” quedó relegada a las redes sociales, cita obligatoria por la noche, cuando comienza una nueva emisión del reality gastronómico de Telefe. El teléfono en una mano y un postre en la otra, para disfrutar de la mejor manera el “programa más dulce de la televisión”, como lo llama Paula Chaves, su conductora.
El rating ha acompañado a Bake Off -que se grabó el año pasado- a lo largo de toda la temporada, imponiéndose como el programa más visto del día en casi todas sus emisiones. En Twitter ha llegado a tener los diez primeros TT (trending topics) en una noche, e incluso ha impuesto hashtags a nivel mundial. Los creativos memes y los comentarios de los fanáticos ya forman parte de la actual temporada de Bake Off, que a las 22:30, cuando arranque la gran final entre Samanta Casais y Damián Pier Basile, definirá al mejor pastelero amateur de la Argentina. O, al menos, eso dicen los papeles.
En las últimas semanas comenzaron a circular fotos en las redes sociales que dejarían en evidencia que Samanta no es una pastelera amateur, requisito indispensable para participar del programa. Al escándalo se sumó una publicación que recientemente hizo la joven en su cuenta en Instagram, mostrando las remodelaciones que realizó en su cocina: muchos los interpretaron como un indicio de lo que habría hecho con los 600 mil pesos de premio que entrega el ciclo.
Los comentarios en las redes sociales se hicieron cada vez más duros y muchas “bromas” en contra de Samanta definitivamente cruzaron un límite. Sus propios compañeros de programa y hasta Christophe Krywonis, integrante del jurado, salieron a pedir mesura a la hora de opinar.
Como si esto fuese poco, se filtró un audio de Agustina Guz (participante eliminada el domingo pasado), quien entabló una gran amistad con Damián durante su participación en el reality, en el que se refiere en muy duros términos a Samanta: “Nos hizo una videollamada diciéndonos que ella en Café San Juan solo sacaba las entradas, llorando, diciendo que no era pastelera, haciéndose la no sé qué, y yo ‘pobre, la está pasando re mal’”. Sin embargo, luego contó: “A la tarde me llegó que (Samanta) tuvo su propia pastelería. Me llegaron las fotos y el video en el que lo nombra y dice ‘vayan a comprar mis postres’. O sea, yo digo, ¿puedo ser tan estúpida de seguir defendiendo a alguien que es indefendible?”
Ante esta situación, la productora del programa, Turner, emitió un comunicado en el que aseguraron que se “están llevando a cabo las averiguaciones tendientes a la verificación, como así también cualquier posible inobservancia a las reglas de participación”. En ese sentido, señalaron que “en caso de verificarse cualquier irregularidad, la eventual decisión será comunicada en la emisión del capítulo final”.
Los seguidores del programa ya están proyectando sus propias teorías sobre lo que podría suceder al final de la emisión del capítulo de esta noche, con un particular ensañamiento contra Samanta, el centro de las despiadadas críticas de los haters.
Lo único cierto hasta el momento es que ella y Damián son los dos grandes finalistas del programa. A continuación, el camino, entre sorprendentes tortas, la llegada a la fama y las acusaciones de fraude, hasta llegar a la instancia definitoria.
Damián Pier Basile
Nació en Rosario hace 31 años, es empleado de comercio y su interés por la pastelería lo ha acompañado a lo largo de casi toda su vida. Contó que a veces llevaba una cheesecake a su trabajo y sus compañeros le insistían en que debía dedicarse a eso. “Mi pasión por la cocina empezó de muy chico, pero para mí era un desastre”, confesó al diario La Capital. Después de probar en diferentes carreras, como arquitectura y publicidad, se animó a viajar a Buenos Aires y participar del casting del programa de Telefe.
Con su creatividad tuvo un camino ascendente que le permitió imponerse en los diferentes desafíos semana tras semana hasta llegar a la final. En una ocasión, los participantes debieron elaborar postres con “sabores no tradicionales” y Damián sorprendió con una tarta a base de chocolate y lentejas, rellena de crema a base de chocolate blanco y fernet y diplomata de lima, limón y albahaca.
No solo el jurado se sorprendió ante su creación, ¡hasta Marcelo Tinelli habló al respecto! “Me tienta la tarta, ¿le puso fernet? -le preguntó a Paula Chaves- Quiero hacerla en casa. Pasame la receta, ahora que tengo varios cercanos que le entran al fernet. ¿O me lo hace Pedro Alfonso?”.
Es uno de los participantes más populares de Bake Off -tiene casi 280 mil seguidores en su cuenta en Instagram-, y en su paso por el programa ha demostrado que es un gran compañero, ya que en diferentes oportunidades se tomó el tiempo de ayudar a sus colegas en medio de los desafíos. Con Agustina Guz entabló una sólida amistad. Ambos suelen subir publicaciones en donde expresan el amor que se tienen y las salidas y los viajes que comparten. Hasta el inicio de la cuarentena, por supuesto.
En una reciente publicación, Agustina subió una foto con Damián y recordó las veces que lo fue a visitar a su ciudad natal: “Levantarnos a las 12 del mediodía, hacer mate, cocinar, ir de compras, mirar la tele sin mirar nada, hablar de tus recuerdos y los míos, ver 800 videos, pasear por Rosario, imaginar pavadas, arreglarse para ir a Pichincha y terminar tomando cerveza y haciendo karaoke de Luis Miguel hasta las 3 AM. Sé que odiás esta foto pero no hay muchas normales. Gracias por estar conmigo siempre, amigo, sos lo más del mundo”.
Con la popularidad y el reconocimiento del público también habría llegado el amor para Damián. El instagramer Martín Cirio, más conocido como La Faraona, sumó a una de sus transmisiones en vivo al pastelero, y entablaron una muy buena relación. Unos días después tuvieron un segundo encuentro virtual, al que ellos mismos catalogaron como “la primera cita oficial”.
Al ser consultado por la revista Paparazzi sobre esta relación, Martín Cirio contó: “Nos vimos tres veces en vivo y hablamos por privado, pero él es de Rosario y yo soy de acá (por Buenos Aires)... No sé si va a funcionar, ni siquiera nos conocemos. Pero nos divertimos mucho y eso está buenísimo. Seguramente, cuando termine todo esto, nos conoceremos. Obvio que tengo ganas de conocerlo pero no tengo el pensamiento de cuando tenía 15 años que conocía a alguien y estaba re enamorado. Cuando nos conozcamos, se verá qué pasa”.
Samanta Casais
Su historia es más conocida, a raíz del escándalo mencionado. Nacida hace 29 años en la Ciudad de Buenos Aires, también mostró interés en la pastelería desde muy chica. Ella misma lo contó durante su visita al programa de C5N Tarde XTRA -que ahora es usado como prueba en su contra para demostrar que no sería una pastelera amateur-, cuando contó: “Desde que tenía 12 años vendía tortas. En realidad, mi mamá engañaba a los clientes y decía que las hacía ella para que se las compren. Siempre me gustó cocinar y la pastelería”.
Según registros previsionales consultados por Teleshow, entre 2011 y 2016 fue empleada en distintas empresas de catering, restaurantes y comidas rápidas. Trabajó en Mark’s Deli & Coffee House, un tradicional local de Palermo Soho; Don Hacha, empresa de comidas y bebidas, Buenos Aires Eventos Gastronómicos, del mismo rubro; Open Kitchen, de comida rápida gourmet saludable; y el mencionado Café San Juan, donde se desempeñó entre el 2013 y el 2016.
Desde su ingreso al reality demostró una habilidad sobresaliente en la decoración para destacarse por encima de los demás. Fue distinguida con el delantal del pastelero estrella en tres oportunidades. Pero desde el comienzo de la temporada -antes de que surgieran las versiones de fraude- se convirtió en el blanco de las críticas. En las redes, los seguidores del programa hacían referencia a una supuesta actitud engreída de su parte.
El repudio escaló a niveles impensados cuando se supo que ya había trabajado en la repostería previamente, y más aún cuando subió el video mostrando las remodelaciones en su cocina. Pero eso no fue todo: fue acusada de homicidio culposo por la muerte de Edmundo Olguín, un jubilado de 74 años, en un accidente de tránsito ocurrido el 16 de noviembre de 2017 en el kilómetro 1.5 de la General Paz.
Ese día, en un Volkswagen Fox prestado, Samanta repartía sus tortas. Olguín impactó de lleno contra el vehículo cuando iba a bordo de su moto Zanella. Fue trasladado al hospital Santojanni, donde murió dos meses después. La hija de la víctima recordó el expediente en los medios, y se difundieron fotos policiales e incluso tomas del accidente en la autopista a plena luz del día. El caso está casi cerrado: el 3 de octubre de 2018, tras un pedido de la defensa particular de la pastelera, el magistrado firmó la suspensión del juicio a prueba de Samanta por el período de dos años, según la resolución a la que accedió Infobae en forma completa.
La joven no suele exponerse en las redes sociales y en ningún momento se ha manifestado en referencia al escándalo que la tiene como principal protagonista. Suele publicar las demostraciones de apoyo de sus fans y las destacadas preparaciones que la han llevado a la final del programa. “Gracias por todo el apoyo, por todo el amor, por todas las cosas hermosas que me mandan que me mantienen en pie”, escribió después de que se emitiera el capítulo que la dejó en la gran final.
Y agregó, sin hacer mención directa a las acusaciones de fraude: “Lo más importante es que cuento con mi familia, que me ama, me apoya y me ayuda a no bajar los brazos. Se viene la final y este camino parece terminar pero no… ¡Estoy segura que de todo esto voy a aprender un montón!”.
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