Este martes en Bienvenidos a bordo se develó el misterio de una de las pruebas más difíciles del programa que conduce Gudio Kaczka en El Trece. El juego que se instauró hace unos días consiste en adivinar cuántas golosinas contiene un copón. Durante las últimas noches muchos taxistas que participaron en los diferentes juego como el lingote y las preguntas fueron arriesgando ciertas cantidades. Todas erróneas.
Sin embargo, un taxista dio la nota y acertó con el número exacto mientras saltaba de alegría en un momento memorable del ciclo. Después de que fue presentado, Pablo-el participante ganador-tuvo su oportunidad de arriesgar. Luego de pensar unos segundos estimó que en el recipiente había 3.803 dulces. Acto seguido, y ante un silencio generalizado en el estudio, Guido Kaczka fue en busca del sobre que contenía la respuesta correcta y que estaba firmado por un escribano. En ese momento, el taxista alcanzó a decir: “¡Dale Guido!. Y volvió a preguntar: “¿Cuánto dijiste?”. “3803″, repitió.
“¿Tu familia cómo es?”, quiso saber Guido. “Lorena, mi mujer, y Valentina, mi hija de 9 años, que quieren todos los chocolates. Es lo que más le gusta a la nena”, le comentó Pablo. Acto seguido, Kaczka abrió el sobre y mostró que 3.803 era la respuesta correcta. Esto desató un festejo alocado del participante, que incluyó saltos, bailes y gritos. “Se carga al taxi todas las golosinas”, disparó Guido.
En cada uno de los juegos de Bienvenidos a bordo, los participantes se abren a las preguntas de Guido Kaczka y cuentan detalles de su vida privada. Sin ir más lejos, el viernes pasado uno de ellos ganó un premio y decidió dedicárselo a la persona más importante de su vida: su esposa. El participante contó su historia entre lágrimas de emoción y terminó contagiando a varios de los presentes.
Fabián fue uno de los taxistas que se animaron a jugar, y luego de responder varias preguntas correctamente se ganó $10.000. El conductor se sorprendió al ver que el participante lloraba mientras festejaba: “Esto es para mi señora. Se llama Leticia. Leti, te amo. Es la mejor mujer que pude haber encontrado en mi vida. Es el amor de mi vida. Gracias, Guido, por todo lo que estás haciendo”.
Hace unos días, otro taxista fue un taxista el que le hizo un obsequio muy especial a Guido, cuando reveló que había conocido al abuelo de Kaczka y narró historias de la familia.
“¿La conocés a Felisa? ¿Quién es felisa? ¿Y Marcos”, fue la pregunta que le lanzó Salvador para dejar sin palabras a Guido. “Mis abuelos”, respondió el conductor de Bienvenidos a bordo, visiblemente movilizado por el comentario inesperado del participante.
“Mi papá y mi tió trabajaron en la fábrica de muebles de tu abuelo. yo iba siempre y me quería como a un nieto. Era divino tu abuelo”, comentó el taxista para generar un clima que Kaczka no se esperaba.
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