Este martes por la mañana, después de seis días de internación (cinco en terapia, de los cuales tres estuvo con asistencia respiratoria), Samuel Chiche Gelblung dejó el Sanatorio de los Arcos, en Palermo, y regresó a su casa acompañado por su esposa, Cristina Seoane. Allí continuará su recuperación por el cuadro de sepsis y neumonía que le fue diagnosticado en el hospital.
Sin presentar ningún malestar previo, al punto que había desarrollado distintos compromisos laborales con total normalidad hasta el mismo martes, el periodista de 76 años se desvaneció en su domicilio y debió ser trasladado de urgencia. Comenzaron entonces horas de incertidumbre.
Por la fiebre alta se especuló con la posibilidad de que tuviera coronavirus, aun cuando no presentaba ningún otro síntoma, pero fue descartado luego de un hisopado. A modo preventivo Crónica HD había ordenado el aislamiento de todo el equipo de Chiche 2020, poniendo al aire una programación de emergencia. Al conocerse que el periodista no tenía COVID-19, se volvió a la rutina. También circuló la versión de un ACV, pronto desmentida.
Al día siguiente los médicos informaron que Chiche tenía una infección en una pierna. Si bien el electrocardiograma y una resonancia magnética habían arrojado resultados favorables, fueron prudentes: el conductor se encontraba “estable, dentro del cuadro de salud delicado”, y era asistido por un respirador.
Al mismo tiempo Maggie Gelblung, su hija menor, daba cuenta de la angustia de la familia: en días en los que rige el protocolo sanitario por COVID-19, Samuel solo podía ser acompañado por su esposa, con quien venía cumpliendo la cuarentena. “No podemos estar ahí (en referencia a la clínica) por la situación que está pasando por el coronavirus. Así que estamos esperando a que nos digan qué pasó. Es terrible”, decía la modelo, en diálogo con Teleshow.
La llegada del fin de semana trajo consigo buenas noticias, con una marcada mejoría en el cuadro del panelista de Polémica en el bar, el histórico ciclo de América. Esa evolución derivó en su traslado a una sala común, ya el día lunes. “Salió de la terapia y continúa su recuperación en el Sanatorio de los Arcos. La familia agradece la preocupación de todos por la salud de Chiche”, precisaron.
El alta recibida hoy aporta la tranquilidad esperada, luego de casi una semana. A su lado, como siempre, Cristina; y a la distancia sus tres hijos –Federico, Mary y Maggie–, pendientes del bienestar del ex Memoria.
La semana anterior a su internación, Gelblung había participado de la mesa que comanda Mariano Iúdica. A modo de evitar la propagación del virus, el canal viene programando la rotación de todo el staff del ciclo que produce Gustavo Sofovich; por esa razón, el periodista no asistía todos los días.
Un tanto en broma pero bastante en serio, Chiche le había propuesto un pacto al Gobierno: “Compro y firmo la cuarentena hasta el 12 de julio si liberan en Día del Padre”, dijo, provocando entre sus compañeros voces a favor y otras en contra. Y es que Gelblung insiste, desde el propio inicio del confinamiento –el 20 de marzo, a través del decreto de Alberto Fernández–, sobre las consecuencias que el encierro genera en “la salud mental y el bienestar anímico” de la población.
No obstante, aclaró que cumple a rajatabla con todo lo estipulado, desde una cuarentena que solo interrumpe como trabajador esencial –al ser periodista– a los cuidados higiénicos recomendados, como el recurrente lavado de manos.
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