Fuerte cruce al aire entre Yanina Latorre y Julia Mengolini

Yanina Latorre y Julia Mengolini mantuvieron un fuerte cruce al aire en Los ángeles de la mañana. Y sin que nadie lo hubiera previsto: ”Vos sacaste el tema...”, le remarcó Ángel de Brito a la periodista, en uno de los momentos más álgidos del debate.

Todo surgió cuando Mengolini –que fue convocada al móvil del ciclo de El Trece para dar su impresión sobre la extensión de la cuarentena– mencionó la opinión de María Virginia Godoy –conocida como Señorita Bimbo– sobre el paso de Lola Latorre por PH. “No te podés quejar si tu papá se cogió a alguien, pelotuda de mierda”, fue el insulto de la humorista destinado a la hija de Yanina. Reparando en esa circunstancia, la periodista le pidió a todo el equipo del programa que se cuidara del coronavirus: “No me gustaría que le pasara nada a Yanina, por favor, que estuve leyendo que está muy sensible. Te enojaste con Señorita Bimbo”, dijo.

La panelista de LAM, que hasta ese momento no había participado en las consultas de todo el panel a Mengolini, no dejó pasar la ironía. Así, se dio inicio a un debate que fue subiendo de tono con el correr de los minutos, y en el que ambas visibilizaron sus distintas posturas sobre feminismo, política y marginalidad.

Yanina: —Sí, claro que me enojé. Vos tenés una bebita; yo tengo una hija de 19 años que no es mediática, no es maleducada, no le falta el respeto a nadie, no va a llorar a la tele: ojalá me puedas dar la razón en algo y no que siempre haya una grieta política porque vos les das la razón a los que piensan políticamente como vos. Mi hija abrió su corazón y contó lo que le pasó con su papá. Y la Señorita Bimbo que tiene 40 años, con quien hemos tenido un vínculo de amistad, por eso me jodió más, le dijo “pelotuda de mierda”. Tiene que entender que Lola a los 19 puede reaccionar como quiere. El dolor se transita como se puede. No está bien que ustedes, que son sororas, feministas y defienden a la mujer, (digan) que una chica tenga educación privada, vaya a una universidad y no le haya faltado de comer, no tenga derecho a sentirse dolida o traicionada por su padre. No estoy sensible. Soy madre, y la voy a defender hasta que me muera, igual que vas a hacer vos con tu bebita.

Mengolini: —Yo entiendo la reacción de Yanina. El programa (de Señorita Bimbo) lo escuché en vivo. Y me pareció que las chicas se reían más de vos que de Lola. Se reían de cómo la habías criado.

Yanina: —Che, te hago una pregunta, ya que sos madre: ¿qué tiene de graciosa la forma en la que la crié a Lola? ¿Que fue a un buen colegio, que va al Di Tella y estudia Derecho?

Mengolini: —No, se reían de que te había salido una nena a imagen y semejanza tuya. Que estaba muy contenta, que había salido flaca y linda igual que vos.

Yanina: —Contame, porque es muy feo lo que estás diciendo. ¿Qué es una nena a imagen y semejanza mía? ¿Que le di todo? ¿Que le doy amor? ¿Que mi hija esté orgullosa de mí? ¿Que es educada? ¿Que no es como vos que le decís “terrorista” a un colega porque piensa diferente a vos? ¿Hasta cuándo me van a dar? ¿Vos te pensás que porque soy rubia, flaca, estoy teñida y manejo una camioneta, soy tarada mental? ¿En serio te lo creíste? ¿O ustedes son las taradas mentales, que son feministas selectivas?

Mengolini: —Yanina, vos te vivís riendo de todo el mundo. Te tocó a vos. Bancátela una vez. Te vivís riendo de todo el mundo.

Yanina: —Contame de quién me río. No me río de nadie. Tu problema conmigo es que pensamos distinto y te molestó un día que te dije de una florcita marginal. No me río de nadie. Laburo y me va bien.

Mengolini: —No, Yanina. ¿Sabés cuál es el problema? Que vos…

Yanina: —La Señorita Bimbo intentó ser panelista y no pudo. Duró dos minutos con (Roberto) Pettinato. Ustedes se creen seres elevados y terminan en radio online. No las llama nadie. Por favor, pónganse a pensar. A vos te molestan (Jorge) Lanata, (Marcelo) Longobardi, y están en la mejor radio del país. Y vos estás en una radio que se escucha por Internet. Les mando un beso a las dos. Estoy podrida. (Para) ustedes, si no sos kirchnerista, las matás. Cuando sos rubia, te bañás, te depilás y sos linda, las matan. Parece que para ser feminista hay que ser un carancho. Estoy podrida de estas minas.

Mengolini: —No, no tenés idea.

Yanina: —Y no se metan más con mi hija. Porque no se reían de mí: le decían “pelotuda de mierda”, la mandaron a terapia, se rieron de los canjes, y la Señorita Bimbo sube canje de helado y de piedra para perros. Y es tan viva que lo bloqueó a Diego, me bloqueó a mí, bloqueó a Lola y a Dieguito (su hijo). Cuando vos hablás, bancate la respuesta.

Mengolini: —Yanina, ¿sabés cuál es la diferencia entre vos y yo? No es el kirchnerismo. Es que vos te reís de los humildes y nosotros nos reímos de los privilegiados. Y eso es lo que no te bancás: nosotros nos reímos de los privilegiados y por eso nos reímos de vos.

Yanina: —Estás loca, no me conocés. Ayudo a todos los que puedo: yo no me río de ningún humilde. Tuve (en Twitter) una sección durante años que se llama “La foto marginal”. Y no es de pobres, es la parte más marginal que tenemos todos los seremos humanos. Tu problema es que para vos la marginalidad es la pobreza. Sos tu espejo, reina. Yo no me río de los pobres.

Mengolini: —Yo misma fui víctima de tu foto marginal cuando me casé. Cuando entro al hashtag #lafotomarginal vi, y sé perfectamente de lo que estoy hablando: vos te reís de los humildes.

Yanina: —Fijate: me río de mí, de Paula Chaves, de todas las personas que tenemos algo marginal. Jamás me reí de un pobre. Mostrame una foto marginal que yo haya subido de un pobre. Te desafío a que la subas a Twitter.

Mengolini: —Hace poco vi la foto de una señora gorda en calzas en el colectivo, en donde se le veía la tanga.

Yanina: —¿La subí yo o la subió alguien y le puso “foto marginal”?

Mengolini: —La retuiteabas vos porque vos con eso generás un sentido común en la gente, que te la manda y vos la retuiteás.

Yanina: —Mirá, ser gorda y tener una calza que se te ve el culo no es ser pobre, querida. Yo también me río de mí. Una vez “la foto marginal” era Nequi Galotti, acá, agachada, y se le veía la tanga igual que a la señora. Tu problema es que si subo la e Nequi Galotti, como es una señora rica, está bien, y si subo la de la señora del colectivo, está mal. El problema sos vos, que la discriminás. La foto marginal es cuando a una se le ve la tanga. No importa si es en colectivo o en un estudio de televisión. Contame de qué otro pobre me reí.

Mengolini: —Yanina, la gente sabe de lo que estoy hablando. Es muy claro tu sentido del humor. La diferencia del tuyo con el nuestro es que nosotros nos reímos de los privilegiados y que esa radio online de la que vos te reís tiene mucho éxito porque tiene un sentido del humor que no le importa...

Yanina: —Ustedes discriminan, se ríen de los privilegiados. Sos selectiva. Para vos, ser feminista es defender a la que le va mal. Sos patética.

Mengolini: —Para nada. No tenés idea, Yanina.

Yanina: —¿Por qué hay que reírse del privilegiado? ¿Por qué hay que decirle pelotuda de mierda a una niña educada que sufrió? ¿Qué pasa? ¿Mi hija no puede sufrir y la tuya sí?

Mengolini: —Yanina, te tocó a vos. Te cagás de risa de todo el mundo. Bancátela. Te tocó por una vez a vos, bancátela.

Yanina: —No me cago de risa de nadie. Vos me odiás porque no pienso como vos.

Mengolini: —No, yo no te odio. Me importa una mierda…

Yanina: —Por una florcita… fuiste al colegio más caro de Bariloche, Mengolini. Me está llegando todo tu pasado y le decís pelotuda de mierda a Lola. Y ustedes no se reían de mí. Yo escuché todo el audio. Son patéticas. Hasta creo que Malena Pichot la defendió a Lola, que me detesta más que vos, porque es un horror que mujeres en el 2020, que se van a tirar al Obelisco todo el tiempo a hacer marchas por la violencia de género, le digan pelotuda de mierda a una chica que está sufriendo por el padre y la madre. ¿O hay una ley para sufrir?

Mengolini: —Yanina, te falta sentido del humor. Nadie se estaba riendo…

Yanina: —¿Porque Lola es rica no puede llorar? ¿Porque Lola es rica no le va a contestar a Andy Kusnetzoff? ¿Porque a la Señorita Bimbo le parece pelotuda…?

Mengolini: —No, Lola puede llorar… Yanina, yo entiendo que vos hayas salido a defender a tu hija. Posiblemente yo haga lo mismo con (mi hija) Rita. Sea Bimbo o sea quien sea. Entonces, te entiendo perfectamente eso. Ahora, lo que quiero decir es que no fue tan grave. Se rieron de que tenías una hija igual a vos, y de que tu hija estaba muy enojada con su papá, pero igual hacía canjes. Ese fue todo el chiste.

Yanina: —No, no fue ese solo el chiste.

Luego de este cruce, Ángel de Brito pidió que se pasara al aire el audio de Señorita Bimbo hablando de Lola Latorre (ver video: El insulto de Señorita Bimbo a Lola Latorre y la reacción de Yanina). Al regresar al piso, se dio un nuevo cruce entre la panelista y la periodista.

Mengolini: —Dale, Yanina. No fue tan grave.

Yanina: —¿Que no fue tan grave que le digan “pelotuda de mierda” porque “tu papá se co… a otra mina? Nosotros tenemos otro tipo de vida seguramente.

Mengolini: —Pero si a vos te encantan las puteadas también, Yanina, te la pasás puteando a la gente.

Yanina: —Yo te hago una pregunta. ¿Vos te reís de Cristina Kirchner, que es mega millonaria y una privilegiada? ¿También te reís de las carteras Hermès y los Rolex de oro y de brillantes de Cristina Kirchner? ¿O eso no los tiene?

Mengolini: —Si sucediera algo gracioso con una cartera Hermès me reiría de una cartera Hermès . Si hubiera algo gracioso alrededor de esa cartera.

Yanina: —Y si no sucedió nada gracioso en la vida millonaria de mi hija. Lo único que sucedió es que la vieron llorar en un programa de televisión y que a la Señorita Bimbo se le ocurrió decirle “pelotuda de mierda”. Y vos, tenés tan poca cabeza, y ahí te das cuenta que ustedes no sirven para nada porque ustedes opinan selectivamente. Si sos peroncha o kirchnerista le das la razón aunque mate a alguien. Y si no, no. Un día en la vida ustedes tienen que asumir cuando se equivocan. La Señorita Bimbo le erró. No se reían de mí. Y si (Lola) es la reina de la casa, ¿a vos qué te importa? ¿Tu hija no es la reina de la casa o la hacés barrer? ¿No le das todo lo que podés?

Mengolini: —Yanina, cuando se meten con vos no tenés sentido del humor.

Yanina: —Yo a mi hija le di todo y estoy orgullosa de que se parezca a mí porque somos seres de bien. Yo no soy oficialista como vos, no le debo guita a nadie. Mi marido y yo somos dos laburantes. La mandé al mejor colegio que pude pagar. Se va a recibir de abogada. Y es cien veces mejor que ustedes. Me gustaría saber un logro de la Señorita Bimbo. Está todo el día con canje de helado y de piedra para perro. Nada más que a mi hija el canje es un poco más elevado.

Mengolini: —Bueno, Yanina, me parece que ya la discusión ha bajado a un nivel al que yo no puedo bajar.

Yanina: —Ustedes bajan un nivel. El nivel lo llevan ustedes que en una radio, que no escucha nadie, le dicen “pelotuda” a una nena.

Mengolini: —Voy a abandonar acá el móvil.

Yanina: —Abandoná el móvil y andá, porque no tenés razón. Y decile “terrorista” a mi compañero y “anti peronista” a Lanata. Estoy podrida de las peronchas.

Mengolini: —Es que ya no tengo más nada que decir. Yanina, estás llegando a un nivel de violencia…

Yanina: —Violencia que me generó la Señorita Bimbo al decirle “pelotuda de mierda” a una chica de 19 años que no le hizo nada. Y vos decís que se ríen porque se parece a mí. ¿Eso no es peor?

Mengolini: —Pero estás llegando a un nivel de violencia al que yo no puedo.

Yanina: —No tenés respuesta.

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