Yanina Latorre contó este miércoles en Los Ángeles de la Mañana un episodio que sucedió en el edificio en donde vive su madre, Dora Caamaño, luego de que a una vecina le diera positivo el estudio del COVID-19. “El problema es que nadie avisó y el marido de ella, en lugar de cumplir con una cuarentena obligatoria, como indica el protocolo, siguió saliendo y fue poco solidario”, indicó la panelista del ciclo de El Trece.
“Mamá se asustó mucho”, continuó la mujer de Diego Latorre, y agregó que los vecinos no habían comunicado el diagnóstico por “miedo a que los discriminen”. Además, enfatizó en que el administrador del edificio no le había dicho al encargado cuál era el protocolo que debía activar luego de enterarse de que la mujer había tenido coronavirus.
“La vecina estuvo internada y volvió a su casa cuando tenía el alta, el encargado la vio de casualidad. Si no, nadie decía nada. Ella estaba contagiada desde antes pero no habían avisado", continuó Yanina.
Entonces, la producción del programa que conduce Ángel de Brito se comunicó con Dora, quien salió en vivo a través de una videollamada desde su casa y contó la angustia que vivió en las últimas horas. “Yo salí a la tarde y el encargado estaba muy asustado. Esta señora se fue a operar la columna y ahí le dio positivo. Vive sola con el marido, y cuando volvió a su casa, él fue a buscar alimentos”.
Entonces, alertó al administrador y, según su relato, cuando advirtió que irían “las cámaras de El Trece, mandó a desinfectar el edificio”. Luego, sostuvo: “Yo no tengo miedo, pero la gente está asustada”.
Mientras hablaba, su hija les resaltó a sus compañeras que su madre tenía el ojo lastimado. “Me caí el viernes caminando por la calle. Me di la cara contra el piso, pero no me duele nada”, contó Dora. “No puedo con ella”, agregó Yanina en referencia a que no logra que su madre se quede en su casa, ya que, por su edad, pertenece al grupo de personas de riesgo.
“Yo pienso como (Marcelo) Longobardi: ‘Dejen a la gente tranquila. Que salga a la calle, que se ventile, que se airee’”, reprodujo las palabras del periodista y reafirmó su posición. “Yo tengo pánico”, admitió Yanina sobre la posibilidad de que su madre se contagie.
De todas formas, Dora aclaró que cuando va a caminar por El Rosedal lo hace con tapaboca y que mantiene todos los cuidados sanitarios. “Salgo con barbijo, me lavo las manos. Hago todos los deberes. Pero salgo. Confieso...”.
“Callate, mamá”, intervino Latorre al escuchar a su madre, que siguió: “Hago lo que quiero. ¿Qué me importa? No me voy a quedar encerrada, chicos, ¡déjense de joder! ¿Quién se puede quedar encerrada?”.
Y, otra vez, su hija aclaró que su madre “sale a pagar las cosas”. Y su madre reveló el comentario que les hizo a sus amigas, que tienen su misma edad y también integran el grupo de riesgo: “Chicas, ¿qué vamos a hacer? ¿Vamos a estar hasta septiembre adentro? Nos cuidamos, pero podemos salir a la calle".
Por último, Dora enfatizó que su pedido es por las salidas recreativas para las personas de su edad. “No quiero ir a un negocio, a la peluquería o a hacerme las manos. Quiero salir a la calle, con cuidado”.
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