Escenas de alto voltaje, sexo en camarines y una ducha “hot”: 9 secretos de Baywatch, la serie que calentó la pantalla en los ’90

“Estábamos semidesnudos en la playa todo el tiempo. Había algo en el sol y el mar que despertaba muchas cosas”, confesó el actor David Chokachi en una entrevista para el canal británico ITV en 2016. En la ficción él fue Cody Madison, uno de los guardavidas que corrían en cámara lenta enfundados en sus emblemáticos trajes de baño rojos –¿existe un ícono de la televisión de los ‘90 más representativo que esos títulos de apertura, entre el sol y las playas californianas?– durante la presentación de Baywatch o Los guardianes de la bahía, tal como se conoció en algunos países de habla hispana. Fue tal el impacto de ese programa que llegó para calentar las pantallas de todo el mundo y tuvo entre sus protagonistas a David Hasselhoff, Pamela Anderson, Yasmine Bleeth, Stephanie Holden y Carmen Electra, entre otros, que los comentarios sobre lo que se vivió por aquellos años se multiplican hasta hoy.

Sin ir más lejos, la propia Anderson se refirió a Baywatch esta semana. Al ser consultada en por la prensa sobre una posible reunión del elenco, tal como ocurrió con programas de la misma época como Will & Grace y el próximo encuentro en un especial de Friends que podría estrenarse antes de fin de año, la actriz aseguró: “Uf, todo el mundo quiere hacer reuniones”.

“Los echo de menos a todos, estábamos muy unidos. Éramos un equipo de verdad, pero no sé… Yo prefiero hacer cosas nuevas”, dijo Anderson en el portal Entertainment Tonight.

Baywatch llegó a las pantallas de Estados Unidos en 1989. El programa, que luego se extendió por 11 temporadas y se convirtió en un suceso global, contaba la vida de un grupo de socorristas sexies de una playa californiana encabezado por Mitch Buchannon, el personaje que encarnaba el inefable Hasselhoff.

En cada episodio se mezclaba algún tipo de misión que debían encarar –en las aguas cercanas a Los Ángeles no faltaban ataques de tiburones, personas que se ahogaban de manera abrupta, crímenes y todo tipo de fenómenos naturales inesperados– con sus vínculos interpersonales. Se sumaban, entonces, escenas de alto voltaje entre los protagonistas –estratégicamente, según los productores, ocurrían en los vestuarios del balneario en el que trabajaban–, discusiones y enredos amorosos.

Entre las escenas más destacadas está la que protagoniza Pamela Anderson, en la piel de su personaje CJ Parker, con Cody Madison.

Pese a todos estos condimentos, al comienzo el programa no tuvo el rating esperado y la cadena NBC decidió cancelarlo. Fue entonces cuando el propio Hasselhoff tomó las riendas de la producción ejecutiva y logró mantener a flote –ejem– a los guardavidas más populares de la historia de la televisión.

Con el tiempo, se llegaron a hacer especiales nocturnos (una suerte de spin-off que se llamó Baywatch Nights) y algunos largometrajes estrenados directamente en video: Baywatch, la película: paraíso prohibido, Baywatch: trueno blanco en la bahía y Baywatch: la boda hawaiana.

El programa fue tan popular que llegó hasta ser parodiado y homenajeado por otras ficciones. De Los Simpson hasta Bob Esponja, la película (donde el propio Hasselhoff hace una aparición) o Friends –los personajes de Chandler y Joey son tan fanáticos que se sientan religiosamente a ver el programa en sus sillones– , hay referencias a los guardianes de la bahía por su enorme impacto en la llamada “cultura pop”.

LOS SECRETOS DE UN EMBLEMA

En 2019, cuando se cumplieron 30 años del estreno de Baywatch, fueron varios los secretos del programa que mostraba aquellos cuerpos deslumbrantes de los rescatistas que salieron a la luz.

Algo similar había ocurrido en 2017, cuando llegó al cine una nueva versión de aquellos rescatistas, protagonizada por por Dwayne The Rock Johnson, Zac Efron, Alexandra Daddario y Kelly Rohrbach. En esa ocasión, tanto Hasselhoff como Anderson participaron con breves cameos, pero más adelante criticaron al largometraje por su “baja calidad”.

Entre los detalles más sorprendentes, se revelaron numerosas anécdotas de las grabaciones y curiosidades de la trastienda de Baywatch.

1. El creador. Baywatch fue una idea del guardavidas estadounidense Gregory J. Bonann, quien se desempeñó en esa tarea durante más de treinta años. Interesado en la producción audiovisual y siempre vinculado con distintos realizadores de programas deportivos, a mediados de los ‘70 el hombre tuvo la intención de llevar a la pantalla una serie que contara las aventuras de un grupo de socorristas en una playa. Sin embargo, ninguno de los productores a los que les contó la idea se mostró interesado. Durante más de 10 años, Bonann insistió con su proyecto, hasta que llegó a oídos del guionista de TV Doug Schwartz, que se comprometió por ese tiempo con la hermana del guardavidas. Schwartz junto a su primo Michael Berk convencieron a un ejecutivo de NBC en hacer un telefilm que sirviera como piloto de una posible serie de bañeros en 1988. Los dos hombres con el propio Bonann lo escribieron en tres meses y se pusieron a buscar locaciones de inmediato.

2. Camarines “hot”. Tal como revelaron los protagonistas a la cadena británica ITV en 2016, durante las grabaciones varios de ellos tuvieron encuentros íntimos en el set. Gena Lee Nolin, quien encarnaba a Neely Capshaw en la ficción y recién comenzaba su carrera, confirmó los rumores que circularon durante años entre camarines: “Aprendí rápido, porque ese fue mi primer papel en una serie de televisión. Si el tráiler se movía, no debías tocar la puerta”, reveló la actriz. Coincidió su compañero David Chokachi, quien dijo que largas jornadas de rodaje entre el sol y el mar “despertaban muchas cosas”. Estas declaraciones coincidieron con las de Pamela Anderson, que tiempo atrás había manifestado: “Todo el mundo mantenía relaciones sexuales en todas partes. En los tráilers, detrás y alrededor de ellos. Creo que pasé una noche con todos al menos una vez”.

3. Un piloto sin censuras. Los productores de Baywatch llegaron a grabar un piloto del programa que contenía escenas de desnudos. Lo hicieron, tal como reveló Michael Berk en 2012, “para el mercado europeo”. Según contó el productor a la revista Esquire, llegaron a tomarle una audición a una joven que hizo un topless. Además luego grabaron una escena en la que varios guardavidas usaban sus binoculares para mirar a la distancia una sesión de fotos en la playa donde la mujer posaba desnuda. Sin embargo, ninguna de esas tomas terminó siendo usada en la serie.

4. Playas sucias. Según reveló al programa E! True Hollywood Story el actor Billy Warlock, quien en la primera temporada de la serie interpretó a Eddie Kramer, los lugares elegidos para las grabaciones solían estar llenos de basura y no eran para nada idílicos como se veían en pantalla. Warlock reveló que cada vez que salían del agua y terminaban las escenas, los artistas debían ser limpiados por la producción. Era tal la suciedad que, según contó, los actores eran rociados en todo su cuerpo con productos desinfectantes.

5. Un rescate real. En una ocasión, mientras el creador de la serie y un grupo de productores se encontraba buscando locaciones en Venice Beach, Los Ángeles, un joven se les acercó desesperado y les dijo que su hermano se estaba ahogando. De inmediato, el veterano Bonann corrió hacia el agua y pudo rescatarlo. Debió practicarle respiración boca a boca y lo salvó.

6. El hijo que no fue. Según reveló el sitio de E! Entertainment a 30 años del estreno de la serie, un actor que estuvo a punto de quedar elegido para integrar el elenco fue Leonardo Di Caprio. Los productores revelaron que el artista casi queda en el elenco, pero que Hasselhoff le bajó el pulgar. El rol era el de Hobie, el hijo del jefe de los guardavidas. Pero Hasselhoff, según se conoció, quería “un hijo más pequeño” y descartó a Di Caprio, quien por entonces tenía 15 años.

7. Operación y cambio de planes. Según contó a The Hollywood Reporter uno de los productores, durante una exitosa temporada la actriz Nicole Eggert sorprendió a todos con un impactante cambio en su imagen. Luego de informar que se había enfermado y ausentarse a algunas grabaciones, reapareció con una noticia sorprendente: un implante en su busto que la hizo lucir completamente distinta. Ante este nuevo escenario, debieron volver a grabar escenas que ya habían sido rodadas y recrear otras para que, con su nueva apariencia, hubiera continuidad sin que se notara tanto el cambio.

8. Escándalo y rating. En 1995, Pamela Anderson y su entonces pareja, el músico Tommy Lee, se grabaron teniendo sexo en un yate durante su luna de miel. Las imágenes íntimas se filtraron y el caso se convirtió en uno de los grandes escándalos de los ’90. Por la gran repercusión mundial de este hecho, fueron varias las emisoras internacionales que pidieron que Baywatch fuera cancelado. Sin embargo, eso no ocurrió y, por el contrario, a medida que escándalo del video sexual más popular de todos los tiempos se incrementaba, los ratings del programa subían.

9. Los particulares trajes de baño. Según señalaron los creadores del programa en diversas entrevistas, el atuendo rojo de los protagonistas “nunca fue pensado para que se viera sexy intencionalmente”. Los productores pidieron asesoramiento a una conocida marca de ropa deportiva para natación y diseñaron los trajes de baño “especialmente para el cuerpo de cada uno de los protagonistas”.

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