Cinthia Fernández está pansando la cuarentena en su casa en un barrio privado con sus hijas Charis, Bella e Isabella. Desde que el Gobierno decretó el cierre de las escuelas, las mellizas y su hermanita menor mantienen un estricto aislamiento y no salen del hogar, ni siquiera para ir a lo de su papá, a pesar de que podrían tener permiso.
La ex panelista de Los ángeles de la mañana explicó en el ciclo por qué deja que su ex, Matías Defederico vea a sus hijas, pero no en la casa de él, dejando entrever que desconfía de los cuidados del futbolista en su hogar.
El tema surgió luego de que en el programa conducido por Ángel de Brito hicieran referencia a las ex parejas que convivieron durante la cuarentena, como fue el caso de Jimena Cyrulnik y Lucas Kirby que compartieron techo para poder estar ambos con sus hijos, o Jimena Barón y Daniel Osvaldo, que desde el sábado a pedido de Momo están juntos en la casa de él.
"Yo no vuelvo ni en pedo con mi ex. Antes salgo corriendo o le digo que me tosa en esta época”, dijo muy expresiva la bailarina y aclaró que aunque no estaría otra vez con él, hoy por hoy tienen buena relación y hasta incluso hablaron de la posibilidad, que de inmediato descartaron, de convivir durante la cuarentena.
Sobre cómo se están manejando por estos días, explicó: “Las nenas no se van a mover de casa hasta que todo esto pase y va para largo, y él no esta trabajando, la verdad no se la higiene que hay en su casa, si entra alguien o no. Vive en un barrio privado, yo sé que es re cagón así que creo que es estricto”.
Aclaró cómo limpia su hogar, sembrando dudas sobre si él tendría o no los mismos cuidados: “Yo paso lavandina en mi casa, además las nenas tienen sus cosas, es una cuestión de comodidad”.
Nada tiene que ver con la relación entre él y sus hijas: “Le dije ‘vení las veces que vos quieras, de hecho yo necesito ayuda así que trata de venir más'. Porque no venía y ahora día por medio viene” y confesó que para eso lo tuvo “que pinchar”.
Aunque él va a su casa periódicamente, ella fue contundente al aclarar que “no se queda a dormir”. ¿Lo dejaría? “Solo si se le revienta la casa, Igual mi casa tiene una habitación afuera”, celebró. Sin embargo, no sería extraño que él algún día se quedara ya que al jugar en le club Agropecuario en Carlos Casáres, vive a unos 300 kilómetros de la ciudad de Buenos Aires.
Desde hace varios días él sube a su cuenta de Instagram fotos jugando con las tres pequeñas, siempre en la casa de Fernández: dibujan, cocinan, hacen tareas de jardinería y hasta ellas juegan a maquillarse y maquillarlo.
Sin ir más lejos, esta tarde, el futbolista realizó a través de la red social un vivo con las chicas en el que ellas estaban con la cara pintada y jugaban con él, a la vez que comentaban que en un rato llegaría “mamá”.
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