Cuando Jesse & Joy empezaron a trabajar en la producción de Aire, su quinto álbum de estudio, no podían siquiera imaginar que el disco terminaría viendo la luz en plena pandemia del coronavirus. Sin embargo, tras el éxito de los primeros cortes de difusión que fueron Tanto, Mañana is too late, Te esperé y Lo nuestro vale más, los hermanos Huerta decidieron no posponer el lanzamiento previsto para este viernes. Y, cada uno desde su casa de México, dialogaron con Teleshow sobre el significado que cobró este álbum en un contexto tan especial como el que se está viviendo.
-¿Cómo llevan este lanzamiento teniendo en cuenta que no pueden hacer giras promocionales ni presentaciones?
Joy: Para Jesse y para mí es muy valioso el hecho de poder tener un trabajo en el cual, incluso a la distancia, podemos dar una nota. Somos muy conscientes de las distintas realidades que estamos viviendo. Y la verdad es que esperamos que, saliendo de esta situación tan loca, no se vuelva a la normalidad sino que la normalidad cambie. Porque, claramente, no es funcional para todos. Y hoy la desigualdad está frente a nuestras caras más que nunca.
-Sin duda...
Joy: Dicho esto, creo que independientemente de lo que está en nuestras manos y de lo que nosotros hemos podido hacer, tenemos que agradecer que nuestras familias estén bien y que nos encontremos en casa. Porque para Jesse y para mí es un refugio y no todos pueden decir eso. Es una bendición que nos ha dado la vida. Y, en medio de todo esto, también tenemos la posibilidad de compartir algo que es como un bebé para nosotros, que es nuestro disco Aire. ¡En la vida imaginamos que lo íbamos a sacar en un momento como este! Sobre todo por el nombre que tiene, que estaba planeado desde el año pasado.
-¿Sienten que hoy cobra otro significado?
Joy: Es que, irónicamente, lo que Jesse y yo queríamos lograr con este disco era compartir un aire fresco, una buena vibra, algo de positivismo...Y fue, justamente por eso, que decidimos que no íbamos a posponer la fecha de lanzamiento y que íbamos a seguir adelante con lo que teníamos previsto,
-¿A quién se le ocurrió hacer la serie con el Making Of del disco que fueron subiendo a YouTube a modo de adelanto?
Jesse: Llevamos varios años documentando algunas cosas de las que vamos haciendo para luego compartirlas. Este álbum es muy importante para nosotros. El anterior se llamaba Un besito más y, la canción que le daba título, la habíamos escrito en memoria de nuestro papá que había fallecido. El trasfondo es melancólico. Pero nos dimos cuenta de que la vida sigue y uno no sabe cuánto más va a estar acá. Así que dijimos: “Vamos a hacer un disco en el que estemos celebrando a los que todavía están”. De esta manera surgió el concepto de Aire. Y creímos que no podíamos perdernos la oportunidad de compartir con la gente cómo lo grabamos, desde una perspectiva más íntima. Como para que sientan que estaban sentados con nosotros, en el estudio.
-¿Y puedan ver si realmente se llevan tan bien o si a veces se pelean?
Jesse: Nos peleamos mucho (se ríe)
Joy: Por supuesto que nos peleamos, pero eso lo sacamos del documental para que la gente no se espante...¡Mentira!
Cuando los hermanos Huerta hablan de celebrar a los que están, se refieren a las familias que han formado cada uno de ellos y que hoy son la fuente de su felicidad. Jesse está casado con Mónica, con quien tuvo a sus hijas Hanna, de 16 años, y Abby , de 7. Y Joy es madre de Noah, de once meses, junto a su esposa Diana.
-Las tres niñas tienen presencia en el disco: la beba en la intro, la mayor en el tema Tanto y Abby en el cierre. ¿Cómo se dio esto?
Joy: Para Jesse y para mí el proceso creativo de este álbum fue completamente distinto al del disco anterior, que fue hecho bajo una carga emocional muy fuerte porque se dio cuando nuestro papi falleció. Y es que, a pesar de que las canciones no estaban escritas específicamente para él, no dejaba de estar presente en nosotros al momento de estar creando música. Pero parecería que parte de sanar, aunque una pérdida nunca sana del todo, tiene que ver con que cuando una puerta se va cerrando se va abriendo una nueva. Es la otra cara de la moneda.
-Entiendo.
Joy: Así fue cómo empezamos a celebrar la vida. Agradecemos el haber aprendido de la pérdida de alguien tan amado como es nuestro papá, simplemente, a apreciar el momento, a los que tenemos en el presente. Y con nuestras hijas en mente cambió la percepción a la hora de crear. De hecho, empezamos a sentir otro tipo de amor. No es que necesariamente estamos escribiendo cada canción para ellas, pero es inevitable que estén en nuestro subconsciente, en nuestro corazón, en nuestra alegría a la hora de componer. Y siendo que estaban tan presentes y que nuestras familias son el motor de nuestras vidas, era evidente que teníamos que hacerlas partes de nuestro disco. Porque este trabajo es muy importante para nosotros en términos de compartir buena onda y de invitar a la gente a preguntarse mucho más allá del afuera sino hacia adentro. Y dijimos: “Si son tan especiales, sólo hagámoslas parte del álbum”.
-Y así fue.
Joy: Claro. El disco, si lo escuchas en el orden en el que va, lo hicimos como una especie de viaje. Hay una introducción, una parte intermedia y un final, que viene casi como una historia contada. ¿Y qué mejor que empezar con los latidos de una bebita que viene en camino para que el viaje empiece por el origen de la vida y termine con una de las chiquitas de Jessy diciendo: “Buenas noches”?. Fue muy lindo para nosotros poder incorporar a nuestras nenas en el álbum.
-Jesse: Hanna es tu heredera musical, es compositora y ya la vimos cantando en el escenario con Joy. ¿Qué sensación te da ver a tu hija tan grande y convertida en una artista?
Jesse: Para mí es inconcebible cómo ha pasado el tiempo, porque siento que anteayer era una bebé de seis meses. Así que es una locura verla de este tamaño y de esta edad, por lo que le doy muchas gracias a Dios. Y, a su vez, me emociona. No que esté haciendo música, porque a mí y a su mami lo que más nos importa es que ellas descubran que es lo que aman y se dediquen a eso. Pero el ver que ella está encontrando algo que le apasiona, me llena de emoción. En algún momento de su infancia se acercó al piano y dije: “Que bonito, pero no la quiero forzar”. No quería influir para que ella se acercara por mí. Pero luego volvió a acercarse, volvió a acercarse, volvió a acercarse...Ella escribió una canción de la que tomamos un fragmento y la pusimos como intro de Tanto. Y al final del disco viene una nota de voz que mandó Abby durante la gira de Un besito más, en la que lloraba y decía: “Good Night”.
-¿Ella también se interesa por la música?
Jesse: Abby también es súper musical. Lo increíble es que, cuando ella está de buenas o está feliz, sea que esté jugando, pintando o lo que sea, está cantando. Aún viendo la tele, se pone a cantar los soundtrack de las películas desde que era bien chiquita. Pero me gusta que sea como natural que lo vaya haciendo. Y ahora viene también Noah. Son muy musicales las herencias.
-¿Decís que Noah ya es musical? Todos nos hemos conmovido al ver el video de ella caminando cuando todavía no llegó ni al año...
Joy: ¡Empezó a caminar antes de cumplir diez meses! Real. La chiquita va en una revolución muy avanzada. Y ama la música. En casa siempre ha habido música desde antes de que ella naciera. Yo respiro música. Mi mamá me dice que antes de hablar yo ya cantaba. Y no le creía hasta que lo vi con Noah. La chiquita tenía dos o tres meses y, mientras yo le cantaba cuando la tenía en mi pecho, la escuchaba que ella estaba emulando el sonido. Y mi esposa no me creía hasta que la vio...Ha sido fascinante ver como ella lo tiene desde que estaba en el vientre.
-Es que en verdad los chicos escuchan la música de la casa desde la panza.
Joy: Sabes que la música siempre estaba presente. Y ella tiene su gusto musical, que es muy selectivo. Ama la bachata de su tío Juan Luis Guerra. Se lo ponemos y deja lo que está haciendo para ponerse a bailar. Te lo juro, es increíble.
Jesse: El merengue le sale perfecto...
Joy: La chiquita es un torbellino de felicidad. Y tiene buen gusto.
-¿Cómo vas a hacer Joy, cuando tengas que volver a armar una maleta para salir de gira y dejar a tu hija?
Joy: No me lo digas....Con lo que estamos viviendo hoy en día, mi esposa y yo llevamos casi ocho semanas sin salir de casa. Pero yo trato de ver el vaso medio lleno. Creo que todos, dentro de esta situación, estamos tratando de sacar lo mejor que se puede. Y, verdaderamente, es maravilloso no perderme nada de su crecimiento. Día a día veo como su cerebro ya está en otra cosa, cómo está motivada hacia algo más.. Y el otro día le dije a Diana: “No sé cómo voy a hacer cuando esto termine, porque las voy a extrañar una locura”.
-¿Entonces?
Joy: Estoy tratando de pensar en el momento, en absorber el presente. Cuando llegue esa realidad, ya trataré con ella. Pero hoy no me quiero siquiera enganchar en esos pensamientos. Ahora prefiero disfrutar de todo lo bonito que estoy pudiendo ver de mi chiquita.
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