Entre juegos y dibujitos para Salvador y “sin tiempo” para ella: la cuarentena de Vicky Xipolitakis con su hijo

“Estamos encerrados, pero lo importante es cuidar la vida de mi hijo, la mía, para no contagiarlo a él, porque soy la única que lo cría”, afirma Vicky Xipolitakis a Teleshow. La artista pasa la cuarentena en su departamento de Barrio Norte con su hijo Salvador, de dos años, y la ayuda de una niñera.

La artista cuenta que el nene -"ya no es más un bebé", dice sobre Salvador, que lo repite de fondo- duerme con ella. Pero que de día hace sus siestas en la cuna que está en su cuarto. “Jugamos, vemos dibujitos, bailamos”, continúa sobre los casi dos meses que la Argentina lleva de aislamiento social preventivo y obligatorio por la pandemia del coronavirus.

“Por ahora paseamos por casa. No podemos salir a ningún lado”, indica.

—¿Cómo estás llevando la cuarentena?

—Le trato de poner energía muy positiva porque amo ser feliz, pero lo más duro de esta cuarentena es estar lejos de mi familia, que es el motor de mi vida.

—¿Cómo te organizás con las compras?

—Cuando pido delivery, comida o alimentos, o supermercado es todo online y me lo entregan en la puerta de casa. Pasan unas horas, abro la puerta, desinfecto todo e ingreso los alimentos. No tengo contacto con nadie.

—¿Estás sola con Salvador?

—Me dieron el permiso para la niñera, porque estoy sola yo es muy fundamental que alguien me pueda ayudar. No tengo marido.

—¿Javier Naselli, el padre de Salvador, se comunicó en todo este tiempo?

Del padre prefiero no opinar. Me encantaría decir que es un buen padre, pero no es así. No puedo mentir. No se está haciendo cargo de nada. Lo que más me dolió es que no mande ni un mensaje para ver cómo estaba su hijo. Porque no es mi hijo, es de los dos. Para ver cómo está en plena pandemia, que la gente muere: ‘¿Necesitan algo?’. Pero no lo hizo ni cuando estaba acá en la casa en pareja, cuando nació Salvador. Y menos ahora. Lamentablemente lo ve como un gasto, no como un hijo. El tiempo acomoda las cosas en su lugar, lástima que el tiempo no vuelve atrás, y yo creo que en algún momento se va arrepentir este hombre.

—¿Cómo se entretienen con Salvador?

—Paseamos en casa, porque no podemos salir a ningún lado. Lo que hacemos mucho es ver tele, dibujitos, canciones infantiles. Bailamos, jugamos. Nos entretenemos. Acá pasamos mucho tiempo del día.

—¿Y vos, con qué te entretenés?

—Tiempo para mamá no hay. Los tiempos son cuando Salvador duerme. Me baño, hago algún que otro video, esos son los tiempos para mí.

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