No atesora los mejores recuerdos. Por lo pronto, debido a una falta de tiempo: la ruptura es tan reciente (días antes del inicio de la cuarentena) que todavía no hay lugar para la melancolía y la nostalgia. Antes priman (y en ambos) sentimientos más cercanos a la bronca y el rencor. Pero además, en el caso de Malena Narvay, la ausencia de sentimientos más nobles hacia Julián Serrano parece estar vinculada con la manera en la cual atravesó el noviazgo. O la naturaleza de ese vínculo que construyeron a lo largo de dos años.
“Yo perdoné mucho durante esa relación”, dijo este sábado Malena, en una entrevista confesional con Teleshow. Contó además que la ruptura fue decisión de Serrano (para “experimentar otras cosas”), que para ella fue “desgarrador” (“Estuve muy triste”, contó), y que “prefiere” ya no mantener contacto con su ex, al menos “hasta que los sentimientos calmen”. “A él lo quiero mucho –agregó–, no me sale no quererlo. Fue la persona que más quise cuidar, que más amé y me enamoré”.
Pero la cantante también definió la relación –cuyos comienzos cuando eran compañeros en 100 días para enamorarse nunca quedaron claros: por entonces, ¿Julián todavía salía con Oriana Sabatini?– como nociva, en ciertos tramos. “Por momentos no fue sana, y a mí me costó mucho verlo. Pero cuando duele el pecho tan seguido y hay más lágrimas y perdones que risas y crecimiento juntos, es porque algo no está bien”, aseguró.
Narvay nunca había hablado sobre la separación. Y –lo dicho– lo hizo el fin de semana. Serrano se tomó dos días para responderle. Y lo hizo de manera más escueta, a través de las redes sociales. En Instagram, aceptó preguntas de sus fans (supera los tres millones de seguidores), pero filtró cualquier consulta sobre las declaraciones de su ex pareja. Prefirió responder sobre si prefería tener barba (le da pereza afeitarse en cuarentena), si realmente tomaba alcohol en las escenas de Aliados (sí, pedía especialmente que le preparan un fernet) y si escuchaba canciones en inglés (las elige en español). Pero, ¿y Malena? Ni una palabra.
La única reflexión al respecto la hizo en otra red social: Twitter. Y de manera tácita, apelando a una frase popular: “Los de afuera son de palo”, escribió, sin nombrar a Narvay, pero en obvia referencia a sus fuertes declaraciones.
Luces y sombras al margen de una relación que terminó de manera abrupta, Malena y Julián continúan sus vidas por separado. Cada uno en su respectiva cuarentena, claro. Ella, con su padres, su hermana y sus dos perros. Y presentando un nuevo videoclip en Youtube: el de la canción “Loca”, que forma parte del disco que lanzó el año pasado. Fines de 2019, una situación tan distinta a la actual. Cuando nadie preveía cómo estaría el mundo para esta época. Y cuando los miles de fans de Narvay y Serrano no sospechan que ese mundo ideal en el que parecían vivir los dos por momentos no eran sano. Y que concluiría. Claro que todo pasará. Incluso este presente.
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