Telefe cumple 30 años en la televisión argentina y entre los festejos las autoridades del canal decidieron volver a emitir algunos de los programas que pasaron por la pantalla. Dejaron que sean los televidentes quienes decidieran qué ficciones querían volver a ver y la más votada fue Muñeca Brava, la tira que protagonizaron Facundo Arana y Natalia Oreiro en 1998.
De esta manera, este lunes a partir de las 23:15 se podrá disfrutar una vez más del primer capítulo de la historia de amor entre Ivo (Arana) y Mili/La Cholito (Oreiro) que se emitió el 16 de noviembre de 1998. Este especial forma parte de 30 Años juntos, iniciativa del canal que el martes pasará en su pantalla el primer capítulo de otra ficción.
“No hay alegría más linda y un reconocimiento tan hermoso como este, que haya sido el público el que nos eligió entre tantos éxitos y novelas de altísima calidad para que sea la primera en emitirse. Me da mucho orgullo que haya pasado esto”, cuenta Facundo Arana a Teleshow.
El actor imagina que debió haber sido una “una votación muy reñida” porque “hubo maravillosos programas en el canal en estos 30 años”. “Nos vamos a reír mucho. Lo más lindo de esto es recordar lo hermoso que fue hacer el programa, y volver a ver al grupo fantástico de personas con las que trabajamos", destaca y hace hincapié, sobre todo, en los que ya no están más, como Arturo Maly (el padre biológico de Mili), Lydia Lamaison (su abuela) y quien supo hacer de villano Noberto Díaz.
“Es precioso mirar para atrás y tener la certeza de que si me volvieran a proponer hacer Muñeca Brava iría corriendo, sin ninguna duda. ¡La pasaba tan bien!”, recuerda con una sonrisa que se puede imaginar en su rostro del otro lado del teléfono.
“Más cuento y más recuerdo. No tengo más que cosas lindas para hablar de la tira”, continúa sobre la ficción cuyo último capítulo se emitió el 17 de diciembre de 1999, poco más de un año después de su estreno.
Estos días son de pura emoción para el actor porque además de la gratificación que tuvo por los televidentes de Telefe, se enteró que en Israel -"del otro lado del mundo", bromea- comenzarán a emitir Sos Mi Vida, ficción que también protagonizó con Natalia Oreiro, años más tarde, en 2006 y por la pantalla de El Trece.
“Las dos ficciones pegaron muy fuerte y en los dos programas trabajamos con un grupo de gente maravillosa”, indica el actor.
Facundo y Natalia siguen en permanente contacto por la amistad que entablaron durante los años que trabajaron juntos, y si bien en el último tiempo no compartieron ningún proyecto laboral, los actores están apoyando la campaña para promover la donación de sangre que necesita el Hospital Posadas. “Sabemos que es difícil en medio de la cuarentena, pero hay pacientes oncológicos y otros que se tienen que operar y lo necesitan”.
Telefe, su segundo hogar
En 1998, además de la exitosa Muñeca Brava, Facundo Arana protagonizaba Chiquititas, junto a Romina Yan. Belén Fraga y Alejo es otra de las parejas inolvidables en la televisión argentina. “Los grababa en simultáneo. Una durante la mañana, paraba a almorzar y a la tarde seguía con la otra”, detalla sobre la dinámica de trabajo que tenía por aquel entonces.
Sus jornadas de grabación comenzaban a las 7 de la mañana y finalizaban a las 10 de la noche, motivo por el cual, revela, más de una vez ha pasado la noche en el canal. “Me quedaba a dormir ahí porque los estudios quedaban en Martínez y yo vivía en Recoleta, y no tenía tiempo para volver a mi casa, estudiar los guiones y regresar al día siguiente”.
Y aquí, hace una especial mención sobre Jorge, el hombre que por ese entonces se hacía cargo de la seguridad de los estudios de Telefe, y que más tarde terminó siendo el encargado de la casa de los padres del actor. “Era tal el desgaste que tenía, que un día llegué muy cansado y él me dijo: ‘Metete en el camarín y tirate a dormir’. A la mañana siguiente me venía a buscar con mate, y yo después hacía como que recién llegaba”.
Si bien duda en contar esta pequeña infidencia, Facundo agrega: “Yo creo que en el canal todos sabían que algunas noches dormía ahí, pero nadie me decía nada".
“Esa época la recuerdo con mucho amor. Hacía dos personajes muy importantes en distintos programas. Le iba muy bien a las dos ficciones. La pasé brutal, fue un laburo descomunal, aprendí y me divertí como loco”, recuerda sobre aquel momento en que pasaba de un set a otro, con la difícil tarea de cambiar de personaje en tan poco tiempo.
Por último, vuelve a emocionarse por el reconocimiento de Muñeca Brava y destaca: “Es lo más importante que le podes dar al artista. Es una linda palmada en la espalda”.
SEGUÍ LEYENDO