El jueves pasado Laurita Fernández rompió la cuarentena total para trasladarse a la casa de Nicolás Cabré. Según explicó la bailarina a Teleshow, lo hizo porque en su departamento le habían cortado el agua hacía tres días y no podía higienizarse.
Luego de consultar al 107, le sugirieron que una vez que pasaran los 14 días de la cuarentena que ella comenzó cuando regresó desde los Estados Unidos (había estado de vacaciones en Nueva York) solicitara el permiso para trasladarse. “Vine acá porque no tengo otro domicilio si no era este. A lo de mi mamá no me iba a ir porque es mayor de 60 años y quiero que esté sola”, explicó la bailarina que permanece en la casa del actor, que está solo ya que su hija Rufina pasa la cuarentena con su madre, la China Suárez.
Al llegar al barrio privado de Pilar en el que vive Cabré, los vecinos la denunciaron y llamaron a la policía. Entonces, la actriz presentó los permisos que había solicitado, junto con material audiovisual del estado de su departamento y de los vecinos luego de la inundación, y le pidieron que se quedara dentro de la casa de Cabré y no vuelva a salir.
Este lunes, Ángel de Brito mostró en su programa las pruebas del caño roto en el departamento del vecino de la bailarina, por el cual le cortaron el agua a ella.
Luego de que le realizaran la denuncia, la bailarina escribió en su cuenta de Instagram un texto detallando lo que había sucedido. “Quiero contarles qué pasó para despejar dudas, ya que entiendo es un tema sensible".
El descargo completo de Laurita Fernández
"Tuve que abandonar mi departamento por motivo de fuerza mayor. Cortaron el agua en casa, se rompió un caño del edificio justo debajo de mi cocina, e inundó a varios departamentos vecinos causándoles serios problemas y empezó a inundar el mío. Hacía tres días que estaba sin agua y realmente se me hacía muy difícil todo, especialmente poder mantener la higiene que se requiere en estos momentos. Llamé al 107 y me pidieron que espere al día 14 de mi cuarentena por viaje, y si no tenía síntomas, que me mude. Y eso hice.
Antes de irme, llamé al 911, vino la policía, les expliqué lo que pasaba, y les pedí que me digan qué medidas debía tomar antes de retirarme. Me dijeron que solicite el permiso para poder circular en la página del Gobierno, lo hice, me lo aprobaron, y además la administración del edificio hizo una carta dejando todo por escrito también. Con los recaudos necesarios y sin tener contacto con nadie, me trasladé a la casa que especifiqué en el permiso solicitado.
En resumen, tramité los papeles que se necesitaban, y se lo comuniqué a las autoridades para que mi traslado sea lo más responsable posible.
Cuando llegué al barrio, la policía vino y volví a presentar los papeles (videos del estado de la casa, permisos, etc.), chequearon y vieron todo, por lo cual me pidieron que finalice ese día sin salir de casa, como obviamente lo hice.
Comprendo el miedo y la preocupación de todos en un momento así y me incluyo. Y si alarmé o molesté a alguien, pido perdón.
Insisto, entiendo la preocupación de todos por todos. Por eso quiero que sepan que mi cuarentena por viaje está terminada, que estoy bien, sin síntomas, gracias a Dios y siguiendo esta cuarentena que nos toca a todos en casa".
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