“Se hizo con amor y con voluntad de compartir. Estamos aislados, pero no estamos solos”, plantea Alejandro Lerner, que convirtió la ilusión en servicio y transformó la que iba a ser su primera gira por Europa y tercera por Israel en un ciclo on line gratuito para acompañar la cuarentena desde casa.
“Fue una experiencia increíble. Tenía planificados muchísimos shows, y un show mío es trabajo para un montón de gente. Se cayó todo eso, pero no se fueron las ganas de hacer algo”. Así nació Entre todos, un concierto virtual con amigos y profesionales de la salud que duró tres horas.
“No sabía ni cómo hacerlo. No tengo los conocimientos tecnológicos para desarrollar eso como si fuera un estudio de grabación -explica Lerner-. Pero lo hice. Formé un equipo, cada uno desde su casa, que me ayudaba. Fue todo a pulmón, con Marcela (García Ibáñez, su esposa) ayudándome".
—Con mucha gente con ganas de participar: se sumaron muchos amigos.
—Sí, muchos. La lista fue increíble, y quedaron para la semana que viene artistas como Los Tipitos, Los Tekis, Bahiano. El domingo estuvieron Nito Mestre, Sandra Mihanovich, Nahuel Pennisi, Víctor Heredia, Manuel Wirtz, Rolo, de La Berisso, Lito Vitale con Baglietto y el doctor José Abadi, que dio un punto de vista terapéutico. También un infectólogo, que es el doctor Fernando Polack, y le pudimos hacer algunas preguntas científicas.
—¿Cómo te estás llevando con la cuarentena?
—Tratando de ser proactivo. Lo comparto con mi familia, somos cuatro en casa: mis dos hijos, Marcela y yo. Tenemos una casa con jardín, que los chicos pueden correr, saltar, nadar. Se empiezan a organizar actividades escolares y los ayudamos. Marcela también tiene sus proyectos: estamos haciendo todo lo de la fábrica de ropa acá, en el living de casa. Y yo, estudiando, componiendo, preparando estas cosas que son absolutamente gratuitas para compartir con la gente. El domingo que viene voy a tratar de hacerlo más temprano para que sea un horario más accesible para Europa, para Israel. Quiero que sea internacional. Terminé las tres horas de programación y recibo un mensaje de Gino Vanelli, que es amigo mío. Así que voy a tratar que el fin de semana sea internacional.
—¿Los chicos miran cuando hacés estas experiencias?
—A veces están en sus cosas, y cuando tienen ganas o nos extrañan entran al estudio, que tengo acá, en casa, y lo que saben es que tienen que hacer poco lío. Se portaron muy bien. Fue muy lindo porque terminamos los cuatro cantando “Volver a empezar”, que se dio de manera absolutamente natural. Fue muy lindo. Con errores, con algunas bajadas de la velocidad de Internet, pero fue mágico.
—Surgieron versiones de algunos artistas que estaban contratados y cobraban dinero del Gobierno por las acciones por streaming, invitando a quedarse en casa.
—Al contrario. Esto se me ocurrió hace una semana, y tuve varios días para tratar de entender cómo lo iba a hacer. Acá no hay ningún tipo de dinero que aporte. No lo necesito, y tampoco lo quiero. Hay gente que es maliciosa, que aún ante actos de profundo amor y solidaridad lo ensucian con una frase que lamentablemente nos hace perder tiempo. A mí no me importa. Yo sé lo que hago, lo que estoy haciendo, por qué lo hago y cómo lo hago.
—¿Cómo se llevan ustedes en familia?
—Por ahora la sensación es buena. Tenemos momentos en los que, por supuesto, se nos hace difícil, pero los chicos se están portando bastante bien. Tengo que reconocer que son adaptables, que si llega un momento que les tenés que pegar una frenada, responden. Por otro lado, tenemos la idea de que cuanto más energía gasten en la pileta o jugando en el jardín, después se nos va a hacer un poquito más fácil. Somos una familia y nos escuchamos; Marcela y yo los escuchamos a ellos y ellos nos escuchan a nosotros. Si se hace más larga, no sé qué va a pasar.
—Bueno, ese es un temor: que se extienda.
—Y... yo creo que va a suceder, que va a ser así.
—¿Qué te pasa cuando ves a la gente que, pese a los pedidos reiterados de los medios, del Gobierno y demás, no cumple con la cuarentena y eso nos compromete a todos?
—Hay boludos en todos lados. Hoy día realmente todas las fuerzas tienen que estar para protegernos o para ayudar. Esta gente dispersa una gran energía en esas fuerzas, que quizás tendrían que estar repartiendo alimentos. Tiene que haber leyes que hagan cumplir a los que rompen las leyes. Rompés las leyes, tenés que ir preso.
—Ojalá esto termine cuanto antes y podamos volver a la normalidad.
—Sí, lo vamos a hacer entre todos. Es una gran oportunidad para un ejemplo como comunidad. Si yo hago las cosas mal lo más probable es que enferme a mis seres queridos, y así sucesivamente. Es un gran ejercicio de sensibilidad, de responsabilidad y compromiso.
—¿Podemos adelantar algo del próximo encuentro?
—Seguro que van a estar Los Tekis. Van a estar Los Tipitos, el Bahiano y no lo quiero comprometer, pero me encantaría poder hablar con Alan Parsons, hablar con los Air Supply, con uno de ellos por lo menos, y con Gino Vanelli. Y por supuesto repetir a todos los que tengan ganas de volver a participar de esto que se llama Entre todos.
Agenda: el próximo encuentro Entre todos será este domingo 29, a las 17
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