La respuesta del médico infectólogo Pedro Cahn a Reina Reech: “En la Edad Media no nos vacunábamos, y la gente moría a los 45 años”

Reina Reech generó polémica al contar que no toma remedios de laboratorio y tampoco se da vacunas, en un contexto de gran temor a nivel mundial por el avance del coronavirus. Hubo un fuerte rechazo a sus dichos en las redes sociales, pero también de parte de especialistas, como el caso del médico infectólogo Pedro Cahn.

“Hubo una era en la que no nos vacunábamos, se llamó Edad Media y la gente moría a los 45 años”, afirmó el director científico de Fundación Huésped -durante una entrevista con Ahora dicen, el ciclo conducido por Florencia Halfon y Nicolás Fiorentino en Futurock-, en referencia al pensamiento arcaico de la actriz.

La coreógrafa había señalado que a sus dos hijos, Juana Repetto y Bautista Lena, solo les dio las vacunas obligatorias a los cinco años, porque el colegio la obligó a dárselas. “Después no los vacuné nunca más. Como estudiaron en una escuela antroposófica, para la fiebre les daba globulitos y no un antitérmico de marca. Salvo alguna vez que tuvieron 40° de fiebre, y me asusté porque temblaban. Sino, traté de curarlos con medicinas alopáticas”, había explicado Reech.

“Por pensamientos de este tipo -completó Cahn-, y desidia de la administración anterior en materia de la promoción, tenemos sarampión en el país, después de haber sido declarado un país libre de sarampión en el 2000”. De este modo el médico buscó advertir sobre las graves consecuencias que trae a la población el hecho de no respetar el calendario de vacunación obligatoria.

Además, Reina manifestó que tiene una buena alimentación para conservar un sistema inmunológico fuerte: “Yo trato de mantener mis defensas altas a través de la alimentación: como todos los días kiwi, frutillas, banana, tomo algunas vitaminas que tienen aceite de pescado para tener bien los valores de colesterol. Prefiero una vitamina que un remedio".

Al respecto, Pedro Cahn señaló con tono irónico: “El kiwi es muy rico, yo también como kiwi, pero estoy vacunado y toda mi familia también”. Y agregó con dureza: “Ojalá que no le toque ninguna enfermedad a la señora Reech que le haga pensar en una situación diferente”.

“A mí me parece que inventan cosas los laboratorios para vender -había dicho Reina Reech-. Hay hasta teorías en donde se dice que han inventado virus para vender medicamentos. Cada uno forja su vida como quiere. Yo me informo, averiguo qué cosas puedo ingerir para mejorar los achaques que uno puede tener…, pero de cosas naturales, sin químicos. Detesto los químicos”.

Nicolás Pauls es otro de los famosos que también se mostró a favor del movimiento antivacunas, que ya ha generado fuertes debates. “¿No es curioso que la misma empresa que te da un supuesto alimento que te va a alimentar, pero que en realidad te enferma, sea la misma que produzca los medicamentos que te van a curar?”, preguntó el hermano de Gastón Pauls, en una fuerte crítica contra los laboratorios.

Los argumentos de Reina Reech y otros famosos que livianamente hablan de vacunación se caen cuando se busca información de instituciones prestigiosas, como la Organización Mundial de la Salud (OMS) que señala la importancia de la vacunas porque previenen la muerte de hasta 3 millones de individuos por año. Además manifiesta que si más personas accedieran a ellas se podrían evitar 1,5 millón de muertes más.

Por otra parte, Alejandra Marcos, médica pediatra y coordinadora del Programa de Inmunizaciones del Ministerio de Salud de la Ciudad de Buenos Aires, habló con Teleshow sobre las consecuencias negativas de no darse las vacunas: “La vacunación es un acto de responsabilidad y también de solidaridad, ya que además de proteger a la persona en particular, protege a la comunidad. En especial hay personas que por edad o por alguna contraindicación médica no las pueden recibir o personas que se vacunan pero que generan una menor respuesta. La eficacia de la vacunación depende de lograr altas cobertura en la población y se funda en razones de interés colectivo que hacen al bienestar general. El efecto que se genera al tener un alto porcentaje de gente vacunada hace que gente que no esté vacunada no enferme”.

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