Camila Manes se prepara para lanzar su primer disco: “Me espera un gran salto de calidad”

Camila Manes tiene 20 años, es oriunda de la ciudad de Quilmes y ya se muestra en el ambiente artístico como una prominente cantante del escenario local, que augura un gran futuro en la música internacional. Tuvo su gran explosión en Cuba, donde realizó una gira por La Habana durante el 2019, y este año -con el lanzamiento de su primer disco- promete liderar los rankings nacionales. El viernes 13 de marzo se presentará en la Fiesta Nacional de la Guitarra, junto a varios artistas de la talla de Abel Pintos, La Beriso, El Chaqueño Palavecino y Los Palmeras, entre otros.

Dulce y amable en su diálogo, la joven se prepara desde chica para pisar fuerte en la música y armarse un camino propio que la distinga y la afiance en el tiempo. Estudió canto, comedia musical y hip hop con diversos profesores. Incluso pasó por las academias de Valeria Lynch y Laura Fidalgo. Maneja varios idiomas; además del español, Camila habla inglés y tiene conocimientos del italiano y el francés. Toca la guitarra y sabe de danza; sus presentaciones incluye diversas coreografías.

Multifacética, la joven -además de canto- realiza dos carreras profesionales. “Estudio Derecho de manera virtual en la Universidad de Kennedy y Negocios Globales de manera presencial en la UADE (Universidad Argentina de la Empresa), que es una combinación entre Comercio Internacional y Administración de Empresas, y menos matemática todas las materias se dictan en inglés; es algo que me encanta y me ayuda mucho”, asegura. Y agrega: “Me gusta aprender cosas nuevas y siento que todo viene de la mano. Mi canto para mí también es como una empresa, donde invertís en vos misma, porque uno vende un producto que es el espectáculo y todo eso conlleva un trabajo. Negocios Globales me ayuda mucho en este sentido, y Derecho me da muchas herramientas para trabajar cotidianamente, como en los contratos”, afirma la joven que ya tiene claro que su futuro está ligado al ambiente artístico, aunque sabe que el aprendizaje la posiciona en un lugar con un mayor conocimiento de su entorno.

De igual manera, su pasión es la música. Camila estudia canto desde los 7 años, cuando le pidió a sus padres comenzar a estudiar. “El canto es una pasión que tengo desde chica, llegaba de la escuela, me sacaba el uniforme y en vez de ponerme en la computadora me ponía a cantar con el estéreo imaginándome que tenia un público; el espejo es mi mayor amigo”, asegura divertida, recordando sus inicios en el mundo artístico. “Mis padres siempre me acompañaron. Mi mamá corría de un lado para el otro conmigo, mi papá me venía a ver a las muestras anuales. Mis padres siempre están a mi lado, me acompañan muchísimo”, sostiene emocionada.

“Desde chica se que la música es algo que amo. Soy autora de mis temas, y también colaboro con otros artistas. Escribo cosas personales que pasan en el día a día o experiencias de otras personas que lo materializo en una canción. Me gustan muchísimo los idiomas. Estudié inglés desde chica, y aprendí francés e italiano con profesores o escuchando diversas canciones”, señala la joven, y afirma: “Escribo canciones en español y en inglés, y tengo una que es mitad español y mitad francés”.

Pero sabe que para lograr sus objetivos profesionales, debe esforzarse en el día a día: “Canto tiene un montón de responsabilidad detrás, tenes que estar los siete días de la semana ensayando”. Durante el 2019, Camila se presentó en diversos lugares públicos de La Habana: “De Cuba me llevo las mejores experiencias, la gente es muy amigable, te hacen sentir parte de la familia, son una fiesta. También estuvimos en Los Cayos, realizando diversos espectáculos privados”

Entre sus referentes musicales, Camila asegura que “mi mayor ídolo es Freddie Mercury, que para mí es un gran innovador dentro de la música. También me gusta mucho Whitney Houston, que es una de las grandes voces femeninas; Cristina Aguilera porque tiene su propia impronta y personalidad, y Carlos Santana, que mezcla lo latino con la guitarra eléctrica", señala Manes que, además, dice que “me gustaría hacer una colaboración” con el gran músico y guitarrista.

La cantante se siente cómoda con el Pop Latino porque “es lo que más me identifica”, aunque señala que “me encanta innovar y mezclar géneros”. Sus presentaciones incluyen la danza, en la que también se formó. El 13 de marzo próximo Camila se presenta en la Fiesta Nacional de la Guitarra, en la ciudad de Dolores, evento para el que ya se está preparando con toda su banda y en el que quiere dejar todo su potencial artístico: “Las coreografías las está armando Belén García, una artista que trabaja con Mati Napp. Me encanta bailar”, señala. La joven tiene a su lado un gran equipo de músicos, entre los que incluye guitarra criolla, bajo, guitarra eléctrica, órgano y coristas.

Camila está terminando de armar su primer álbum, que está a punto de lanzar para mediados de abril en las redes, y agrega que "seguramente hagamos una presentación” para oficializarlo. “Mi sueño es hacer una gira mundial donde las personas puedan disfrutar de nuestra música”.

La artista no está de novia, aunque señala que -a futuro- le gustaría tener hijos: “Estoy soltera. Soy joven y mi carrera es mi prioridad, pero en un futuro me encantaría formar una familia".

Camila se considera “cantante y empresaria”, aunque sabe que para triunfar y resaltar en el mundo artístico debe tener un plus. Se define como “una persona auténtica y muy sincera”, que le gusta “hacer sentir bien a los demás”. Señala que es “muy tímida afuera del escenario pero arriba me transformo en un personaje para dar lo mejor, mucho mas extrovertida”. Ella apuesta por brindar “un gran espectáculo, un show para que los demás puedan disfrutarlo”. No se queda en lo simple, sino que siempre va por más. Se esfuerza por estudiar y adquirir el mayor conocimiento posible, para obtener todas las herramientas necesarias que la distingan. La música es su pasión, pero no se conforma.

“Me veo como una mujer de negocios”, afirma, con una dulce voz que la caracteriza al hablar sin perder la firmeza y la confianza necesaria para fortalecerse en el camino en el que ya pisa fuerte.

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