“Nadie en su sano juicio puede pensar que seguiría haciendo el mismo programa durante 52 temporadas. Cuando hice el primer programa pensé que iba a durar una semana, o un mes. Pero me llamó Alejandro Romay -histórico director de El Nueve- y me dijo que había hecho un rating fantástico. Así empezó todo. Así empezó la leyenda”.
Mirtha Legrand recuerda con mucho cariño la primera emisión del programa que en ese entonces se llamaba Almorzando con las estrellas. A horas de su regreso a la televisión (este domingo a las 13), la diva repasa en una entrevista exclusiva con Teleshow sus comienzos como actriz, los miedos que siente antes de volver a la pantalla, a sus 93 años, la conversación que mantuvo con Alberto Fernández y el temor al coronavirus. Además, cuenta que adelgazó cinco kilos.
Tuvo un verano atípico. Acostumbrada a realizar la temporada desde Mar del Plata, no logró llegar a un acuerdo con El Trece para hacer sus clásicos programas desde el mítico Costa Galana, frente a Playa Grande. “Ya pasó...”, desliza sobre el desencuentro que mantuvo con las autoridades del canal, cuando le explicaron que era muy costoso llevar a cabo las emisiones, aun cuando ella había asegurado que estaba dispuesta a “ir gratis”, sin cobrar su sueldo.
A pesar de no tener que cumplir con ningún compromiso laboral, la conductora igual decidió viajar a La Feliz para sentir de cerca el cariño que el público solía brindarle verano a verano. “¡Lo pasé tan bien! Fue como si hubiera estado al aire... -dice, a varias semanas de haber regresado a Buenos Aires-. La gente es muy amorosa: yo creí que solo me veían los grandes, pero es increíble la cantidad de chicos que me saludaban".
Según cuenta Mirtha, lo que más extrañaba de su rutina cuando hacía los ciclos eran las reuniones de producción a la hora del té: es el momento del día que más disfruta, sin importar adónde se encuentre. Su estadía en Mar del Plata duró poco más de un mes, y no se perdió de ningún plan: fue todas las noches al teatro y también organizó comidas con sus amigos en el hotel en el que se hospedó. “No sé si fueron vacaciones, pero sí unos días de descanso. Una vida muy placentera”, asegura Chiquita, quien algunos días recibió la visita de su hermana melliza, Goldie.
La diva vuelve a la televisión en lo que será su temporada número 52 -"Es un récord en el mundo", asegura, orgullosa-, Legrand confiesa que se mira al espejo y se dice a sí misma: “¡Sos un milagro, Chiqui!”. Aunque a esta altura ya no siente nervios, sí se pregunta cómo se desenvolverá frente a cámara: “¿Estaré bien? ¿Los invitados serán amorosos? ¿Mi cerebro estará rápido? Pensar cómo está uno y, gracias a Dios, estoy muy bien”, confía.
“Soy una afortunada y agradecida a la vida por todo lo que me ha dado, a pesar de que también me ha quitado. No me quejo de nada. La vida ha sido muy generosa conmigo. Yo soy muy católica y le agradezco al Señor por la buena salud que me ha dado”, continúa, y se compara con aquella Mirtha que debutó como actriz a sus 14 años en la película Los martes, orquídeas. “Era tan jovencita... Y ahora me veo a esta edad, que todavía estoy activa, recuerdo los nombres, sé quién es quién, y estudio a cada uno de mis invitados".
“Uno es artífice de su propio destino -advierte-. Todo está en uno. Yo soy un producto de mí misma, porque me he ido formando y me he aggiornado. Soy grande, pero soy una mujer moderna”. Una prueba de sus palabras: maneja a la perfección el WhastApp. Pero se lamenta: “Me doy cuenta que me absorbe mucho tiempo".
A sus 93 años, la conductora califica como un trabajo arduo el hecho de llevar a cabo un programa de televisión. Sobre todo porque ella se involucra en la producción y hasta en la elección de los invitados. “Estoy todo el tiempo informada, veo televisión, leo tres diarios. A veces, cuando sé que no voy a tener tiempo, empiezo a leerlos a las cuatro de la mañana. Pienso que tendría que estar durmiendo, pero es más fuerte que yo el querer saber y adquirir conocimientos. Soy muy curiosa, me gusta saber y estar instruida”, resalta quien se describe como una “estudiante frustrada”. “Me hubiera encantado estudiar y saber de todo: medicina, leyes, política, el ser humano, arte, cultura”.
Cada semana, en los días previos a cada emisión -La noche de Mirtha los sábados, y Almorzando con Mirtha Legrand los domingos-, la diva hará una prueba de vestuario para estar segura de lo que lucirá frente a la pantalla. “Mantenerse en línea”, según explica, le requiere un sacrificio: “Adelgacé cinco kilos. Estoy muy contenta”, dice, y celebra que se le notará por televisión: “Me cae mejor la ropa”.
La conductora revela que no tiene reparos con la comida, aunque sigue casi una máxima: “De todo, muy poco”. Por ejemplo, entre dos y cinco ravioles. ¿Si no tiene hambre después? “No, porque a la tarde tomo un buen té, con frutas y algunas cositas ricas también. El dulce hace bien al organismo. Soy de buen comer. Me encanta comer. Me levanto a la mañana y me pregunto: ‘¿Qué voy a comer de rico?’”.
También realiza dos sesiones de kinesiología semanales junto a un profesional que la asiste en todos los ejercicios que realiza en su hogar. “No me resulta cómodo caminar por la calle pero lo hago en mi casa, que tengo un departamento grande. Camino para estar más activa", avisa.
En sus últimas entrevistas, Legrand aclaró con insistencia que no quería hablar de política. “Si hablo de Macri se enojan los macristas; si digo algo del kirchnerismo, se enojan los otros...”, se explica. Sin embargo, deja su impresión sobre el presente político y social de la Argentina: “El único tema es la falta de dinero. La verdad es que el país no tiene dinero para cumplir con las promesas a los jubilados, a los maestros. A la gente no le alcanza la plata”.
Pero además, Mirtha revela que le envió un mensaje a Alberto Fernández para invitarlo a su ciclo. “Me respondió de manera muy cordial", confía sobre su chat con el Presidente, en el cual se habló de una eventual visita a su programa: "Me dijo que ahora no está yendo a ningún programa porque está muy abocado a sus funciones, y que más adelante es posible que vaya”.
Este domingo, Chiquita recibirá a Moria Casán, Marcelo Polino, Adrián Suar, Marcos Carnevale, Agustina Cherri y el doctor Daniel López Rosetti, para hablar del coronavarius, epidemia que tiene en vilo a varios países en el mundo. “Yo estoy muy preocupada... -se sincera-. Mi médico me dijo que tenga cuidado y evite el contacto con la gente que haya estado en Europa”.
Ya con la prueba de vestuario, peinado y maquillaje realizado y habiendo leído al menos tres diarios, Mirtha Legrand vuelve a la pantalla un año más (de la mano de la productora StoryLab), para disfrutar y celebrar que puede hacerlo. “Si bien me interesa saber los números, no estoy pendiente del rating -afirma-. Lo que me gusta es que el programa salga bien, que yo termine contenta y que la gente lo disfrute”.
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