Residente es uno de los principales referentes latinoamericanos de la música crítica de todos los tiempos. Por eso sorprendió la semana pasada cuando se conoció su último tema de difusión, titulado “René”, donde relata los pesares de su vida en su ciudad natal de Puerto Rico, durante su infancia, su adolescencia y su adultez.
En el video, el ex Calle 13 habla del homicidio de uno de sus mejores amigos, de sus adicciones, de la pobreza de sus primeros años, y presenta por primera vez en público el rostro de su hijo Milo, fruto de su relación con Soledad Fandiño.
En el crudo relato del video autobiográfico, escrito dos años atrás, René habla de su intensa vida: “Cuando caigo en depresión, mis problemas se los cuento a la ventana del avión. El estrés me tiene enfermo, hace diez años que no duermo", afirma el cantante. Repasando en otras estrofas su intención de volver a ser un niño, fuera del éxito y la fama que le dio la música: “Quiero volver, salir de este hotel y desaparecer, quiero decirle que quiero bajar el telón, que a veces me sube la presión, que tengo miedo de que se caiga el telón, que tengo miedo de que se caiga el avión”.
Con más de 49 millones de visualizaciones, el video –publicado el 27 de febrero– generó una fuerte reacción de fanáticos y detractores. Mientras los primeros se mostraron identificados con los sentimientos de angustia y desesperanza que transmite la canción, muchos otros refieren que el tema –con una extensa duración de 7 minutos y 35 segundos– parece más un cortometraje que una canción, porque, además, el músico relata la letra, sin cantarla.
En una entrevista brindada a BBC Mundo, René habló sobre cómo escribió el tema: “Todo lo que aguanté por años me explotó en una noche. Me agarró solo, en medio de una gira y con veinte mil situaciones pasando alrededor. Era una sensación de que aunque miles de personas estén en un concierto tuyo vos sentís que nadie te quiere, que sos un estorbo, que no debés estar ahí, que estás causando problemas. Eso es bien horrible. Estaba agarrando peso de todos lados. Es una locura que no controlaba”, sostuvo el cantante sobre uno de los momentos más dramáticos de su vida, que dio el puntapié para crear este tema.
“Pensé que era bueno ponerlo en una canción, porque sé que es algo que a todos nos pasa y con lo que la gente iba a poder conectar. Pensé que de algún modo podía ayudar a la gente haciéndoles saber que esas cosas pasan, que es normal y que uno tiene que buscar la forma de salir de ese lugar”, señaló.
Entre las historias vividas que relata en la canción, Residente habla de su mejor amigo de la infancia, fallecido hace años: “Esa muerte yo no la había sanado. A él lo mató la brutalidad policial, lo detuvo la policía, parece que él se puso a contestarles y lo encontraron muerto en una celda”, agregó el ex de Fandiño. Y señaló que, a pesar de todos los momentos crueles que vivió, no buscó ayuda profesional para tratar su angustia: “Respetando a los psiquiatras, a mí me da un poco de miedo, porque ellos recetan cosas y yo le tengo miedo a las pastillas. No me gusta meterme nada”, aunque sostuvo que veía a una psicóloga: “Hablaba con ella y veía toda la carga que yo tenía. Se dio cuenta de que yo le decía que sí a todo el mundo. Con ella aprendí a decir que no”.
René asegura que para superar esas situaciones le sirvió conversar con sus seres más cercanos: “Hablar con mi familia fue como reiniciar todo mi sistema. Me ayudó rodearme de gente que me hacía sentir en casa y querido por los que verdaderamente me conocen. A veces necesitás el abrazo de todo el mundo, poder estar en contacto con la gente que me vio desde chiquito. A mí eso me alivia, me centra, me hace sentir que no estoy perdido ni solo en un lugar en el que no quiero estar”.
“Creo que este es un buen mensaje para la gente a la que se le hace difícil sacar sus sentimientos: que empiecen a hablar sobre eso. Y eso fue lo que pasó, todo el mundo comenzó a llorar con el tema; no me lo esperaba”, relató el artista.
En cuanto a las críticas recibidas por su composición, René asegura: "No las escuché. No veo que haya un debate entre un grupo grande que aprueba y uno que no aprueba la canción. Yo no le tengo que decir nada a nadie, ya está todo dicho en la canción. No tengo que defenderme de nuevo ni volver a caer en la misma cosa. Es normal que haya gente que le busque lo negativo al tema, pero si el tema no hubiese crecido como creció, no habría detractores”.
A pesar del cambio de rumbo, el ex Calle 13 asegura que volverá a sus clásicos temas: “Este es un buen momento para pensar mejor las letras, es casi un renacer. Pero no es que ahora vaya a ser un moralista que no entiende la sexualidad”.
El video de René culmina con dos grandes momentos que marcaron su vida: por un lado, se escucha la música de Rubén Blades, cantante que se oía en su casa durante su niñez; y, por el otro, se muestra –por primera vez– la imagen de Milo, su único hijo.
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