Hace dos semanas, Cinthia Fernández fue noticia por haber abandonado repentinamete la grabación de Pasapalabra, el ciclo que conduce Iván de Pineda por El Trece y al que ella había ido como invitada. En ese momento, trascendió que la bailarina habría recibido un mensaje cuando se encontraba en la sala de maquillaje y que, en medio de una crisis de llanto, se había retirado del estudio sin que los productores pudieran retenerla. Entonces, muchos de los que presenciaron ese momento creyeron que lo que había tenido la bailarina había sido, en realidad, un ataque de pánico.
El episodio dio lugar a todo tipo de especulaciones. Algunos, lo vincularon con Martin Baclini, el ex novio de Cinthia y por quien ella sigue llorando en cada programa de televisión que visita. Y otros hicieron referencia a los conflictos que la bailarina mantiene con Matías Defederico, padre de sus hijas Charis, Bella y Francesca, a quien apuntaron asegurando que quería sacar a las niñas de la obra social.
Finalmente, este lunes Cinthia estuvo como invitada al piso de Intrusos, por América, y explicó qué fue exactamente lo que le pasó ese día. “Lo relacionaron algunos con Martín y otros con Matías, pero no tenía nada que ver con ninguno de los dos. Era un problema personal y, como venía muy expuesta, elegí irme porque estaba mal. En realidad, yo no sé lo que es un ataque de pánico. Pero me estaba quedando sin aire, me estaba sintiendo muy mal y sentía me tenía que ir de ese lugar porque no podía ni respirar”, empezó diciendo la bailarina.
Cinthia reconoció que sí fue verdad que lo que detonó su crisis fue un mensaje que recibió en su teléfono, del que sin embargo no quiso dar detalles. “Se lo dije a una de las productoras, a las que les pido perdón también públicamente porque trabajan muchísimo y con los invitados en vivo”, reconoció. Pero se ocupó de aclarar que nada tenía que ver con Defederico, quien al ser consultado por la prensa respondió difundiendo el comprobante de pago de la cobertura médica de la bailarina y de sus hijas.
“Eso lo quiero aclarar: Matías paga la prepaga. Lo mostró. Pero eso no salió de mí, sino de los periodistas y del entorno de él”, aseguró explicando que, en su nuevo rol de panelista, se había encargado de averiguar cómo surgió el rumor que en su momento difundió Karina Iavícoli en LAM, por El Trece. “Eso existió, pero no fue que había dejando de pagar. Hace bastante tiempo él me dijo que no daba más con los gastos y que quería ver si podíamos pasar la obra social a la de su club. Eso fue lo que pasó. Jamás me dijo: ‘Voy a dejar de pagar’”, explicó.
¿Por qué habló Defederico si estaba todo al día? “Es entendible, si a mi me acusan de dejar sin cobertura salgo a defenderme. Igual, una cosa que quiero aclarar de su aclaración, es que no es que me paga mi parte porque es un buen pibe, lo hace porque está firmado. Si no yo quedo como el traste, haciéndome la viva para que me pague mi obra social. Y eso es lo que acordaron los abogados. A él le corresponde pagar la de las nenas, pero se acordó la mía también porque hay un montón de otras cosas que él no paga y así se contrarresta”, dijo Cinthia.
No obstante, la bailarina aclaró que no aceptó la propuesta de cambiar de obra social de Matías, porque aún tiene conflictos económicos con él en la Justicia por los alimentos de sus hijas y no quiere sumar uno nuevo en el caso de que él deje de jugar en Agropecuario, el club en el que se desempeña actualmente. Y contó que ella tiene la tenencia completa de sus hijas, pese a lo cual acordó pagar el cincuenta por ciento de la manuntención de las niñas aunque lo que le correspondería sería un porcentaje menor.
Finalmente, Cinthia aclaró cuál es el vínculo que tienen sus hijas con Matías. “Yo tengo la tenencia completa porque él está trabajando fuera de Capital Federal. Pero las nenas ya están acostumbradas. En mi casa somos todas mujeres. Él viene una vez por mes. Y ellas ya no preguntan ni dicen: ‘Extaño a mi papá’. Hablan por teléfono, que es el medio de comunicación de ahora”, dijo. Pero reconoció que las chicas sí preguntan por Baclini, su última pareja: “Como no hay una figura masculina en mi casa, cuando llegaba él era como un superhéroe”.
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