1992. Oklahoma, Estados Unidos. Tres chicos de aspecto angelical, con melenas rubias y despeinadas a lo Kurt Cobain, ensayan en el garage de su casa los clásicos de artistas reconocidos: canciones de Aretha Franklin, Elvis Presley, Little Richard y Chuck Berry. Allí aplican lo que cada semana aprenden en las lecciones de piano y canto. El mayor, Isaac, tiene apenas 11 años; toca la guitarra. Le lleva dos a Taylor, que ocupa los teclados. Por su parte, Zac tiene apenas seis años: habrá aprendido a andar en bicicleta poco tiempo atrás, pero ya toca la batería con toda naturalidad. Tres hermanos de un total de siete en la familia Hanson, tan tradicional como cualquier otra en la zona.
Se prueban en vivo en un festival artístico local en Tulsa, su tierra natal. Les sobra carisma sobre el escenario, empatía con el público, virtuosismo. Es tan solo el primer paso. En un puñado de años graban dos discos, editados de manera independiente: Boomerang salió en 1995, y MMMBop un año después.
Pero todo cambió en 1997. Con el apoyo de la discográfica Mercury / Polygram Records, los hermanos Hanson lanzaron el álbum Middle Of Nowhere que incluía “MMMBop”, el pegadizo single que les dio una enorme fama y popularidad. Vendieron 10 millones de copias a nivel mundial, obtuvieron tres nominaciones a los premios Grammy y se convirtieron en una de las boy band más populares del momento.
Por entonces, Isaac tenía 16 años, Taylor 14 y Zac, 10; demasiado jóvenes para semejante éxito. Ahora bien, ¿qué significa la palabra mmmbop? Una onomatopeya que -justamente- algo tiene que ver con eso... “Representa el tiempo. Representa el hecho de que el tiempo pasa muy rápido... -explicó Zac en una entrevista con E! News-. Y así, en una historia sobre cómo alcanzar lo que es importante y la conducción hacia el sueño imposible, ‘mmmbop’ te dice que vayas ahora, ve ahora, ve ahora, porque en un momento, en un mmmbop, la vida habrá terminado y te habrá pasado".
Muchos artistas aseguran que alcanzar el éxito no es difícil, el verdadero reto es conservarlo con el paso del tiempo. Mientras hacían giras y seguían lanzando discos como This Time Around, buscando avanzar en el mundo del entretenimiento sin perder su identidad musical, los intérpretes de “Where’s The Love", "I Will Come To You” y “Weird” disfrutaban de la fama. Esos tres niños simpáticos ya habían crecido, sus voces habían cambiado. Y debían dar su primera batalla.
¿Hay vida después de “MMMBop"?
Desde 2000 hasta 2004 los Hanson no sacaron ningún disco. En ese lapso llegaron a escribir 80 temas, pero sin suerte con la discográfica. “La razón por la que pasaron cinco años entre los últimos dos discos fue porque el sello anterior no nos entendía -lamentó Isaac en una entrevista con Página 12-. Sacamos ‘This Time Around’ justo cuando se fusionaron Polygram y Universal, y terminaron mandándonos a un subsello de rap, Def Jam, que nunca entendió quiénes eramos”.
En el documental Strong Enough to Break, los hermanos muestran el gran esfuerzo que hicieron por lanzar su álbum Underneath (2005). Largas horas de composición y grabación. Discusiones entre ellos e interminables charlas telefónicas con Jeff Fenster, ejecutivo de Def Jam, para ponerse de acuerdo en una encrucijada: qué tipo de canciones debían componer. Finalmente decidieron empezar de cero, volviendo a sus inicios como músicos independientes. Así fue como crearon su propio sello discográfico, 3CG Records, el acrónimo de 3 Car Garage, en referencia al lugar que usaban como estudio de grabación antes de que se hicieran famosos.
Isaac, Taylor y Zac saltaron al precipicio, sin contar con el apoyo económico de un sello discográfico. Sabían que debían esforzarse mucho más para lograr que sus temas sonaran en las radios, y lanzaron una campaña de promoción por su cuenta. Era a todo, o nada. Sí, un mmmbop: era momento de apostar, antes de que fuera demasiado tarde.
“Sentimos que el único modo saludable de continuar con nuestra carrera era hacernos independientes, porque las compañías discográficas se han hecho tan grandes que se han olvidado de cómo desarrollar carreras -decía Isaac en una gira por la Argentina, en marzo de 2005-. Tienen demasiados artistas y carecen del personal suficiente como para mantener el foco en el largo plazo”.
En el primer mes del lanzamiento, Underneath vendió 37.500 copias en los Estados Unidos, alcanzando el puesto número 1 el ranking Billboard como álbum independiente. ¿Las críticas? Excelentes. Y propiciaron nuevos discos con su sello discográfico: The Walk (2007), Shout It Out (2010), Anthem (2013), Finally It’s Christmas (2017), Middle Of Everywhere (2017) y String Theory (2018).
El futuro ya llegó
“Nuestra relación está más basada en lo que tenemos en común en términos musicales y en la pasión mutua que tenemos por mejorar. Y eso va más allá de que seamos parte de la misma sangre: primero somos una banda, y en segundo lugar somos hermanos. Casi nunca pensamos en el hecho de que somos hermanos; no es por eso que funciona nuestra relación”, advierte Isaac. "Nos seguimos peleando todo el tiempo. Discutimos tres veces al día: en el desayuno, el almuerzo y la cena. Pero así es la vida”, sostiene Zaac.
Ya no son unos niños: promedian los 30 años, formaron sus propias familias y, en total, suman... ¡13 hijos! Casado en 2006 con Nicole Dufresne, Isaac (hoy de 38 años) tiene tres hijos. Taylor (36) celebró su boda con Natalie Bryant en 2002: son papás de seis hijos. Y Zac (33), que dio el sí con Kate Tucker 14 años atrás, y tiene cuatro hijos.
“Tenemos una base de admiradores a nivel mundial con las que seguimos haciendo giras año tras año -dice Taylor-. Fundamos una compañía porque pudimos ver que no había futuro en una gran discográfica que se centrara en las ganancias trimestrales y en coleccionar bandas como si fueran activos con los que comercializar. Nuestra decisión tenía que ver con invertir en nuestro futuro o convertirnos en una mercancía”.
Con dieciséis millones de discos vendidos a lo largo de sus 28 años de carrera, van a contramano de la mayoría de los grupos: no tienen una gran presencia en los medios masivos ni en las redes sociales (sus 179 mil seguidores de Instagram saben a poco), y así como brillan en el escenario, lo hacen por su ausencia en las portadas de las revistas, ya sean de música como de actualidad. Ningún tabloide sensacionalista escribió jamás una crónica, ni siquiera un rumor, asociando a uno de los hermanos Hanson con sexo, drogas y rock & roll.
En cada recital, ellos tocan la música creativa que sienten que los representa, aunque también apostaron a otro emprendimiento: una compañía cervecera a la que llamaron Hanson Brothers Beer. Incluso, a una de sus cervezas artesanales la bautizaron Mmmhops.
Las cabelleras se oscurecieron, las melenas fueron reemplazadas por cortes modernos. Las barbas, incipientes o tupidas, cubren sus caras del mismo modo el acné lo hacía en pleno suceso de “MMMBop”. Los rasgos angelados desaparecieron, bueno, no tanto, y ya no queda tan claro quién es el menor de los tres. Porque Isaac, Taylor y Zac han crecido. Y lo hicieron a su manera, a espaldas del mandato de la industria musical, con sus imposiciones musicales, su marketing y su publicidad.
Esa es la clave del éxito de los Hanson.
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