Susana Giménez ha construido una importante carrera y es considerada una de las conductoras más importantes de la Argentina. Aunque ahora disfruta del éxito, no siempre la pasó bien tanto en el plano personal y laboral. En una entrevista con ¡Hola! TV, una señal de televisión que se emite desde Miami para todo el mercado latinoamericano, la diva habló de su vida amorosa y dio detalles de los conflictos que tuvo en su primer matrimonio con Mario Sarrabayrouse, el papá de su hija Mercedes.
“A mi hija la críe sola y tomando decisiones. Mi marido nunca me pasó un peso, como suele ocurrir. Hice todo por ella para darle una buenísima educación. Somos muy compañeras. Yo era muy chica, estuve casada desde los 17 y las 20. Me fui a lo de mamá, me agarré una valija y a mi beba. Lo bien que hice porque no hubiera sido feliz nunca jamás mi vida con ese chico”, señaló.
Además, reconoció que había conflictos familiares en su hogar, pero no quiso profundizar en el tema. “Mis padres no se llevaban bien, había mucho lío. De eso es lo único que no hablo porque mi hermano me pide que no hable mal de papá. Yo tengo tres hermanos más, porque mi papá se volvió a casar”, agregó Susana en una charla con la periodista Natasha Cheij.
La conductora explicó que como tenía necesidades económicas empezó a buscar trabajo y se debatía entre ser modelo o azafata: “El mismo día que me ofrecieron hacer un comercial, tampoco era la protagonista, creo que pasaba por atrás, me llegó el telegrama para ser azafata de Aerolíneas Argentinas. Yo me preguntaba: ‘¿Qué hago?’. Y elegí ser modelo”.
Cuando daba sus primeros pasos en el modelaje, Susana fue elegida para el comercial de jabón Cadum en el que dijo el famoso latiguillo “Shock”. Esa publicidad marcó un antes y un después en su carrera. Luego, se desempeño como actriz y vedette hasta que llegó a tener su propio programa diario de televisión que aún hoy sigue teniendo muy buenos niveles de audiencia.
A lo largo de su trayectoria, reconoció que debió seguir adelante a pesar de que le tocaron vivir momentos difíciles. “Cuando murió mi madre fue terrible para mí y suspendí el programa por una semana. Yo no podía, no quería llorar frente a cámara, pero era un momento desgarrador. Éramos muy compañeras y cuando terminaba el programa la llamaba inmediatamente”, recordó, emocionada.
Además, explicó cómo es la relación con Mecha: “Mi hija es lo mejor que tengo, a veces nos peleamos, pero la amo con toda mi alma y es mi vida”. Cuando le preguntaron si veía algún parecido en sus nietos, contestó: “En Lucía sí, no le gusta ser modelo, ni nada de lo artístico. Le gusta vestirse, los brillos, tiene toallas y sábanas de leopardo... Es muy compañera mía también”.
Tras tener varias decepciones amorosas, Giménez aseguró que prefiere estar soltera y tranquila. “Para que un hombre me conquiste tendría que admirarlo, es muy difícil. Si no lo admiro me parece que no funciona, igual en este momento estoy tan bien sola, tan feliz, tan libre. Yo soy de acuario y la gente de acuario necesita estar libre”, señaló.
Por último, se refirió a sus planes para este 2020: “Ahora cuando llegue (a la Argentina) voy a ver que quiere el canal de mí, qué me ofrece, si hacer el programa como siempre o viajar y entrevistar a grandes personalidades. A mí me gustaría viajar, salís un poquito y conocés a gente divina”.
SEGUÍ LEYENDO