Catherine Fulop debutó este lunes con Tardes bellas, el ciclo que ocupa el espacio que tenía Flor de la V con Flor de tarde en la pantalla de Ciudad magazine. La actriz está realizando temporada teatral en Mar del Plata y la venezolana fue convocada para estar al frente del programa que en su primera emisión tuvo de invitados a Osvaldo y Tiziana Sabatini.
El marido y la hija menor de la actriz venezolana fueron parte de un segmento en el cual Pampito -que comparte el panel junto a Majo Martino, Alejandra Stamateas y Mabby Autino- los invitó a jugar al “verdadero o falso”. En el transcurso de la sección, el periodista quiso saber si era cierto que el empresario le elegía “la ropa sexy” a su mujer. Sabatini asintió a medias -"puede ser, sí..."-, mientras que la actriz aclaró: “¡Vos me trajiste el castigador!”, en alusión a una prenda que Fulop reveló que usaba con su marido.
Mientras tanto, Tiziana evitó intervenir y se limitó a expresarse a través de una cara de sorpresa al escuchar las intimidades de sus padres. Sin embargo, quien también es cantante -al igual que su hermana mayor, Oriana- decidió opinar en otra pregunta y terminó haciendo una fuerte revelación. “¿Hubo un antes y un después del chip sexual?”, preguntó Pampito. Ova sostuvo que tanto él como Cathy se lo colocaron hace un tiempo, y entonces, Tiziana levantó su mano y pidió la palabra. “Yo puedo decir que sí”, respondió.
Ante la sorpresa de sus padres, la joven sostuvo: “Y.. a veces se escucha algo”.
“¡Epa!”, reaccionó Sabatini. “¡Qué vergüenza!”, reflexionó Cathy. Luego Tiziana agregó que sus padres “están todo el tiempo dándose besitos, toqueteándose”.
Cuando el resto del panel quiso saber detalles, la joven aclaró que los suele escuchar los sábados a la noche “después de ir a cenar”. “Y eso que cierro todo y pongo música”, indicó su padre haciendo referencia a las precauciones que utiliza para resguardar la intimidad con su pareja. “Quiere decir que los demás días no escucha nada”, bromeó Sabatini.
Intentando dar por terminado el tema, Cathy se dejó llevar por la música que sonaba en el estudio e invitó a bailar a su marido, que le hizo un reproche, entre risas: “Me hacés bailar acá que me da vergüenza”, dijo y se sumó a la coreografía.
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