La Navidad suele ser una ocasión donde afloran los más nobles sentimientos, una época donde la magia y la celebración toman protagonismo y los más grandes suelen disfrutar de una cierta vuelta a su infancia.
Pero para algunas personas, no es la etapa más esperada del año. En el imaginario común, el Grinch es el personaje que representa para todos el ícono “anti navidad”. El villano, representado por Jim Carrey en la película del año 2000, basada en el cuento navideño del Dr. Seuss, de 1957, se transformó en un éxito de todos los tiempos, cuyo protagonista -un ser verde, peludo y con un corazón pequeño- vive en un pueblo en el que nadie lo quiere y que intenta destruir la Navidad de todas las maneras posibles. El pequeño logra generarle miedo a todos sus vecinos, menos a una niña que logra llegar a su corazón y ver en él toda la bondad que nadie se atreve a mirar.
En el mundo real, existen varios famosos que se asemejan a la figura del Grinch, aunque -por suerte- sin intencionalidad de destruir el festejo de sus seres queridos.
El actor mexicano Diego Luna nació el 29 de diciembre de 1979. Su cercanía con el festejo navideño le generó un trauma desde muy chiquito. Su cumpleaños quedaba desapercibido y de niño solo recibía un solo regalo por ambas fechas. “Me tomó un rato entender que había otro niño que había nacido el 25 de diciembre y era más celebrado que yo”, dijo tiempo atrás en una entrevista, donde aseguró que cumplir años en esa fecha “es traumático”. El tiempo y la paternidad lograron hacerle cambiar su fastidio por la Navidad. “Ahora todo es distinto”, señaló, y afirmó que a su hijo le regaló un carro que él siempre quiso para esta fecha y que no logró conseguir que “Papá Noel” se lo regalara de pequeño.
Hugh Grant viene de una tradición familiar antinavideña. El actor reveló que en su familia no eran asiduos festivos de esta fecha. Incluso, el actor viajó en varias oportunidades a diversas partes del mundo donde no se festeja Navidad para evitar los compromisos relacionados a este festejo. Incluso, el actor sorprendió confesando que la peor escena que le tocó en toda su carrera fue la del baile en el film Love actually, una de las películas navideñas de todos los tiempos, donde el actor interpreta al primer ministro británico y, en una de las escenas, su personaje comienza a bailar y a hacer el ridículo: “No fue nada fácil para un inglés de unos cuarenta años, hacer eso a las siete de la mañana, congelado y sobrio”, señaló.
Polémica sin límites, Lady Gaga fue por mucho más. Y hasta rozó el mal gusto cuando, en un concierto brindado en Londres en el 2010, la cantante decapitó un muñeco de Papá Noel frente a todo el público, y finalmente lo pisó con sus tacos. “Hay algo que debo hacer para ser justa, así que esto va por todos aquellos que se sienten solos en estas fechas”, señaló.
Ozzy Osbourne no es afecto a estas fiestas, y trata de no participar de su celebración. “Siempre le he dicho a Sharon (su esposa) ‘Que se pudra la Navidad. La odio’. Es para consumistas y niños. Así que siempre he intentado evitarla”, señaló el ex líder de Black Sabbath. El cantante llegó a sostener que lo mejor que le pasó de un accidente que tuvo con su moto fue haber quedado inconsciente y no tener que celebrar la Navidad.
La actriz francesa Marion Cotillard integra la lista de celebridades que tampoco se alegran de recibir esta fecha del año. Según contó ella misma, “no soy una persona navideña”. La artista confesó que de niña no le gustaba esta fecha, motivo que le generaba varios conflictos familiares: “Recuerdo que peleaba con mi mamá porque no me gustaba recibir regalos”, sostuvo en una entrevista.
A pesar de haber actuado en películas con temáticas navideñas, Colin Firth no es adepto a celebrar estas fechas. En una conferencia de prensa del film, el actor dijo que en cada navidad suele salir el Scrooge que todos llevamos dentro, haciendo referencia al nombre del protagonista de la novela Cuentos de Navidad, de 1843, de Charles Dickens, un hombre de corazón duro y egoísta, que detesta la Navidad, los niños o cualquier cosa que produzca felicidad. El actor asegura que detesta los villancico, la imagen de Santa Claus y las galletas referidas a la celebración.
Noel Gallagher se fastidia con esta etapa, especialmente por padecerla desde chico por la similitud de su nombre con el de Papá Noel y por su expresión en francés, ya que Noël significa Navidad en ese idioma. El cantante asegura que la Navidad no tiene ningún sentido para él. "Lo detesto, esa es la verdad, y lo más gracioso de todo es que dos personas irlandesas decidieron ponerme un nombre en honor a estas fiestas. Los anuncios de esta época me ponen nervioso”, asegura el guitarrista de Oasis.
Lo cierto es que la Navidad es una fecha que escapa de los adeptos o retractores. Una fiesta que para muchos es religiosa, y para otros es significativa por la llegada de Papá Noel y sus regalos. Una celebración de la que es difícil mantenerse aislado, excepto que -como bien elige Grant- el “Grinch” se tome un avión y pase las fiestas en un lugar bien lejano.
SEGUÍ LEYENDO