Siempre fueron el uno para el otro, y, más allá de que en los últimos tiempos su relación no había sido la mejor, Alicia Ferreyra (Mercedes Funes) siempre sintió adoración por su hermano, Torcuato (Benjamín Vicuña).
Por eso, la muerte del personaje encarnado por el actor chileno representó uno de los momentos más dramáticos en la historia de Argentina, tierra de amor y venganza, la ficción éxito de El Trece.
Luego de la visita de Samuel Trauman (Fernán Mirás), a pedido de ella, comienza una escena desgarradora cuando llega el momento de que se lleven el cajón rumbo al cementerio.
Es que cuando los cuatro empleados de la funeraria se disponen a transportar el féretro, el personaje de Mercedes Funes se abalanza sobre el mismo en un acto de desesperación.
“No, no se lo lleven, no, quiero irme con él. No, por Dios no, no hay vida sin mi hermano, no hay vida, no puedo vivir sin él. Él es mis ojos, es mi corazón, es mi vida, quiero irme con él. No, Torcuato no, mi hermano no”, se la escucha entre sollozos, mientras Gabriel Morel (Federico Salles) intenta contenerla.
Vale recordar que Torcuato se encontraba internado en un psiquiátrico intentando hacerse pasar por loco para no ir a la cárcel. Sin embargo, luego de que el médico que había hecho el informe avalando su coartada -presionado por Alicia- luego confiesa la verdad y declara que en realidad se encuentra en su sano juicio, se ve obligado a pagar ante la ley.
Sin embargo, encadenado a la cama del hospital, Torcuato recibe la visita de otro interno del psiquiátrico que es incendiario y le propone una alternativa para no tener que ir a la cárcel.
El incendio del lugar desata las dudas de muchos, entre ellos Bruno (Albert Baró), pero luego terminan rindiéndose a las pruebas aparentes de que Torcuato falleció a causa del incendio.
SEGUÍ LEYENDO