La historia de la mujer que le puso su voz a “el número solicitado no corresponde a un abonado en servicio”

“El número solicitado no corresponde a un abonado en servicio"

Probablemente alguna vez todos hayamos maldecido al escuchar dicha frase del otro lado del teléfono. Pasaron casi 33 años desde que se grabó por primera vez y hasta el día de hoy la seguimos escuchando.

Corría un caluroso día de febrero de 1988 cuando a Marita Monteleone la convocaron para que fuera la voz de la frase que inmortalizó y que todavía está vigente. Así como también fue la locutora de otras populares oraciones que se solían escuchar en aquella época.

“La característica marcada se encuentra temporalmente congestionada. Por favor, corte e intente nuevamente dentro de unos minutos. Muchas gracias”

“El destino que usted quiere alcanzar se encuentra temporalmente congestionado”.

¿Quién es la mujer detrás de dicha voz?

Marita Monteleone se encontraba haciendo un show de tango en la bodega del mítico Café Tortoni cuando un ingeniero de Entel pidió su contacto y le ofreció trabajar para la empresa. “Eso marcó un comienzo de mi voz dentro de los hogares argentinos, que se extiende hasta el día de hoy”, recuerda la locutora en una entrevista exclusiva con Teleshow.

“¡Bien que algunos me insultan!”, bromea sobre la reacción de quienes se sorprenden al escucharla en la vía pública y la reconocen. ¿Y cuando es ella la que intenta comunicarse y se encuentra con su voz indicándole que el número solicitado no corresponde a un abonado en servicio? “Me da risa, pero al mismo tiempo me gusta porque yo le puse una impronta con el tono en que lo dije. Dejás la firma. Si podés marcar la diferencia, no se paga con nada”.

Desde que su voz ingresó a los hogares de los argentinos, cada vez que un usuario la reconoce le solicita que grabe el contestador de sus teléfonos particulares. Durante una visita en Chapadmalal, por ejemplo, se sentó en un escritorio mientras los fanáticos hacían cola y esperaban su turno. También le ha pasado en una institución a la que se dirigió para realizar un trámite personal. Acostumbrada a eso, Marita ya tiene preestablecida una frase: “Hola, este es el teléfono de ... En estos momentos no lo puede atender. Por favor, deje su mensaje luego de esta señal. Muchas gracias”.

Sin embargo, y contra todos los pronósticos de los que esperaban encontrarse con un mensaje de ella al llamarla a su casa, Marita explica que cambió el aparato “hace poco” y que aún no logró configurarlo para poder ponerle su voz.

Una hazaña inolvidable

—Marita, tenés que grabar la guía de teléfonos de la Argentina.

—¿Cómo de la Argentina?

—Sí, de todo el país. ¿Cuánto pedís?

—No tengo idea porque nadie ha sentado un precedente.

En 2001, cuando todavía eran algunos pocos los privilegiados que habían accedido a un celular, Marita estaba dentro de un auto cuando recibió un llamado en el cual le solicitaban un presupuesto para realizar un trabajo puntual sobre la guía telefónica. Entonces, decidió consultar en la Sociedad Argentina de Locutores y le sugirieron que sea “un peso por dato”.

“Lo que yo no sabía es que eran 214 mil archivos de Word”, advierte quien finalmente aceptó el trabajo que le marcó un antes y un después en su carrera. Le llevó un año y nueve meses grabar todo lo que le habían requerido para que los usuarios tuvieran los datos que solicitaban en el servicio de información 110 por reconocimiento de voz: nombres, apellidos, números de teléfono, ríos, cabañas, localidades, establecimientos educativos, comercios, barrios, estancias, rotondas, rutas. “Todo lo que se te ocurra que estuviera adentro de la guía", enumera quien actualmente es la voz del contestador del Club Atlético Boca Juniors: “Me siento la embajadora de los contestadores porque poner la voz no es broma. Es la cara de la empresa”.

Durante ese tiempo, Marita le dedicó ocho horas diarias al trabajo que describió como “titánico” y a través del cual llegó a hacer los trámites para entrar dentro del Libro Guinness de récords mundiales. “Grababa sin parar durante siete minutos y dejando un silencio de tres segundos entre dato y dato. Luego tenía cuatro minutos para descansar, que era el tiempo que tardaba en bajar la información y cargarse al disco rígido, y retomábamos...".

Monteleone cuenta que desde que comenzó a grabar la información de la letra A hasta el último dato de la Z, adelgazó más de 20 kilos. “No podía comer porque necesitaba estar despierta y muy atenta, si no me daba sueño. Tomaba muchísimo té”.

“Llegó un momento en que soñaba con los números. Salía de trabajar de Radio El Mundo y me iba directo al estudio hasta las ocho o nueve de la noche. Apenas tenía tiempo para llegar a dormir a mi hija Malena, que la cuidaba mi mamá. Le daba un beso y al día siguiente me levantaba temprano porque a las siete entraba otra vez a la radio. Cuando llegó el último dato, no lo podía creer. Recorrí el país a través de un archivo", celebra quien hace más de 10 años también es la voz del contestador de una reconocida empresa internacional.

“Soy muy obsesiva de mi trabajo y hasta que no termino algo es mi firme objetivo. Todo trabajo, para mí, tiene su vericueto y me resulta muy interesante”, sostiene quien compartió micrófono con profesionales como Héctor Larrea, Juan Carlos Mareco, Juan Carlos Mesa, Juan Carlos Altavista, Juan Alberto Mateyko, Berugo Carámbula, Julio Ernesto Vila, Roberto González Rivero, y Leonel Godoy, entre otros.

De visita en los estudios de Teleshow, la locutora luce en su cuello un pañuelo blanco con destellos de brillos. Indica que es un regalo de su madre -"a quien no tengo tan cerca porque vive en Zárate"- y que la ayuda a cuidarse su garganta. “No tomo nada frío, todo a temperatura ambiente. No hay que levantar la voz, hablar fuerte ni gritar o enojarse. Hay que tomar mucho líquido para mantener hidratadas las cuerdas vocales. Tampoco esforzarse y cantar en el tono justo”, sugiere quien está al frente del show Maritango -jugando con su nombre y el ritmo que canta- desde el 2000.

Su gran historia de amor

“Él decía que fue en Radio Del Plata, pero para mí fue en Radio El Mundo”, recuerda Marita sobre su marido, Roberto de los Ríos, un operador de radio y televisión con quien trabajó en ambas emisoras. “Fue en 1987 y a primera vista. Nos enamoramos perdidamente”, destaca la locutora que se casó después de dos años de pareja. Fernando Niembro y Santo Biasatti se destacaron entre los invitados. Cuando años después, fruto de su relación nació Malena, locutora nacional y futura politóloga.

El 11 de septiembre de 2004, Roberto murió mientras jugaba un partido de fútbol junto a sus compañeros de trabajo. “Dios me lo llevó”, lamenta Monteleone, que en ese momento estaba separada del padre de su hija. “Fue el día de la comunión de Malena y el anterior a mi cumpleaños... Ella, mi familia y mis amistades me ayudaron a salir adelante", concluye Marita Monteleone.

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