Seis años pasaron del final de una de las mejores series de los últimos años: Breaking Bad. La historia de Walter White (interpretado por Bryan Cranston), un profesor de química de secundario al que le informaban que le quedaba poco tiempo de vida por padecer un cáncer de pulmón y que casi accidentalmente se convierte en un narcotraficante, y de la de su socio Jesse Pinkman (Aaron Paul), ex alumno de White y adicto a la metanfetamina, recorrieron los episodios de las cinco temporadas que duró esta ficción.
Para muchos Breaking Bad fue un antes y un después en el universo de las series. Incluso creen que cuando finalizó, septiembre de 2013, las ficciones no volvieron a ser las mismas.
La creación de Vince Gilligan -que comenzó a emitirse en 2008- se convirtió en paradigma de las nuevas producciones que llegaron a la televisión. Sin dudas quedará como una de las joyas de la nueva edad dorada de las series junto a Los Sopranos o Mad Men, entre otras.
Pero como sucede con muchos finales, los seguidores y fanáticos se quedaron con ganas de más. Y si la historia de Walter White y su alter ego Heisenberg había encontrado un final cerrado, la de Jesse Pinkman dejaba mucha tela para cortar. ¿A dónde iba manejando y huyendo? ¿Por qué lloraba con angustia y alivio? ¿Iba a encontrar su destino?
Así fue, como en total secreto, decidieron contar la historia del ex alumno reconvertido en narcotraficante en una película. Y nació El Camino, filmada en México, sin que ningún medio periodístico supiera qué se estaba grabando. La película que se estrena hoy en Netflix recorre justamente el camino que debe recorrer Jesse para alcanzar su paz interior y su libertad.
En una charla exclusiva con Teleshow -único medio argentino al que le otorgó una entrevista-, Aaron Paul recordó el momento de la filmación de la película de Breaking Bad.
“Yo nunca había formado parte de un proyecto tan secreto, pero para mí fui increíblemente fácil, solamente decidí no contarle a nadie lo que estaba haciendo y cuando la gente me preguntaba solo les decía que estaba haciendo un proyecto “indie” en México”, dijo Paul, en Los Ángeles, a Teleshow.
Aaron Paul disfruta de este estreno que lo trae de vuelta al rol más importante de su carrera mientras aguardamos verlo en la nueva temporada de Westworld. Pero, ¿encontrará finalmente su rumbo Jesse? “Fue definitivamente la gran pregunta sin respuesta: ¿qué pasó con Jesse? Y yo amé la manera en que terminó la serie, pero personalmente quería saber dónde estaba Jesse, a dónde iría en la próxima temporada. Entonces creo que esa fue realmente la razón por la que debería continuar la historia”, reflexiona Aaron Paul.
—¿Qué consejo le daría Aaron Paul a Jesse Pinkman?
—¡No uses drogas amigo! ¡Y mantente fuerte!
El Camino trae de vuelta a varios “conocidos de la casa” y todas las intervenciones se vinculan directamente al destino final de Pinkman.
La pregunta quedará en el aire flotando: ¿Es necesario seguir contando una historia que ya tenía un final? Para muchos sí y seguramente para otros no. Lo cierto es que El Camino nos transporta al mundo Breaking Bad, al desierto, a la aridez de los escenarios, a la soledad de los personajes que buscan sobrevivir, y a las ganas de comenzar nuevamente .
Una nueva vida sin el torbellino del dinero manchado por sangre donde el anonimato se convierte en la clave de la felicidad. Como dice Jesse Pinkman, “Yeah, Bitch”.
Mirá una de las promociones de la película que hizo Aaron paul, esta vez dedicada a los argentinos.
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