Whitney Houston y el éxito post mortem: la vuelta al top 5 de los rankings, una comedia musical con sus canciones y una futura gira con su holograma

La muerte no es un impedimento para que la obra de un artista pueda seguir generando dividendos. Aunque el fallecimiento del astro o la estrella haya sido triste, por sobre toda dosis extraordinaria de drogas, alcohol, tristeza y desasosiego, está el siempre fulgurante mundo del espectáculo. En el siglo XXI todo heredero que muestre las credenciales correspondientes podrá seguir facturando, a costa de lo que sea.

El show debe continuar y el business sabe que ni los muertos descansan en paz. "The Estate of Whitney E. Houston y nuestro nuevo socio Primary Wave están encantados con la colaboración entre Kygo y Whitney. Sabíamos que Kygo sería el productor adecuado para mejorar el potente rendimiento vocal de Whitney en 'Higher Love', a los estándares y expectativas que los fanáticos de Whitney reconocen durante ya más de tres décadas", dijo Pat Houston, según un comunicado que dio a conocer el sello discográfico Sony Music. "Potente rendimiento vocal" y "colaboración" no parecen ser palabras que acompañen a una mujer que lleva muerta siete años, pero la cuñada de la cantante lo hace sonar muy natural.

Pat llevó adelante las negociaciones en nombre de los dos hermanos de Whitney, Gary Garland y Michael Houston, y de su madre, Cissy. De esta manera, la cantante nacida en Nueva Jersey volvió al top 5 de los rankings en el verano europeo de la mano de Kygo, el Dj y productor noruego que revivió esa canción hermosa y la convirtió en un nuevo hit apto para centennials que ni siquiera deben saber que Whitney Houston está muerta. Pat fue todo optimismo: "El resurgimiento de esta preciosa presentación de archivo llevará el legado musical de Whitney a una generación más joven durante los próximos años. ¡Todos deberían estar listos para bailar con este track inspirador, un testimonio del increíble talento de Kygo y un recordatorio de por qué nos enamoramos de Whitney desde el principio!".

Las palabras de Kygo fueron elocuentes al momento de preguntarse a quién se le ocurrió este negocio: "Me sentí honrado cuando el Estate de Whitney Houston se acercó y me ofreció la oportunidad de trabajar con una de las mejores vocalistas femeninas de todos los tiempos. ¡Reelaboré la canción desde cero y estoy realmente feliz con la forma en que resultó!". "Higher Love" es una versión del clásico de Steve Winwood de 1986 y los herederos de Houston le presentaron a Kygo la grabación de archivo con la interpretación de la cantante, que se había editado como una canción adicional solo para Japón en el disco I'm Your Baby Tonight, de 1990. Como se dice en el mundo de los negocios, "win win".

(Video: "Higher Love", de Kygo & Whitney Houston / Youtube)

El arte no tiene moral

Entre consolas y software inteligentes, en el estudio, cualquier ausencia parece tener solución, pero el escenario es otra cosa. O quizás ya no lo es. La compañía Base Entertainment, pionera en giras de hologramas con gente muerta como Buddy Holly y Roy Orbison se interesó por "revivir" a Whitney Houston. Tener a una súper estrella de la canción y convertirla en holograma para seguir cortando tickets es una tentación a la que sucumbió hasta el padre de Amy Winehouse, aunque ese proyecto quedó en stand by. ¿El motivo? Aparentemente se detuvo gracias a la catarata de comentarios negativos que recibió en redes Mitch Winehouse, después de anunciar este novedoso plan. Es que la exposición y las giras sin descanso fueron parte del deceso de la británica. El caso de Whitney no es tan diferente, pero el anuncio sigue en pie y las nuevas generaciones tendrían el placer no solo de oírla, sino de verla en vivo a partir del año que viene.

Whitney Houston murió el 11 de febrero de 2012, en Beverly Hills, California, tenía 48 años y estaba devastada. "A veces siento que estoy yo sola contra el mundo" canturrea en "Whitney", el documental de 2018, que retrató su vida y echó luz sobre los rincones más oscuros de su existencia. "Antes de su fallecimiento, había tanta negatividad en torno al nombre; ya no se trataba de la música. La gente había olvidado lo genial que era. Dejaron que todas las cosas personales de su vida superaran por qué se enamoraron de ella en primer lugar", dijo esta vez Pat Houston, también detrás de la gira holográfica y en planes de realizar un espectáculo estilo Las Vegas.

(Video: "Whitney", el documental de Whitney Houston / Youtube)

El final de Whitney fue triste: la encontraron ahogada en la bañera del cuarto de hotel en el que se hospedaba, con el cuerpo colapsado por las drogas. Iba a actuar en la entrega de los premios Grammy y decidió anestesiarse horas antes, estaba claro que ya no podía o no quería seguir. Estaba divorciada del rapero y productor Bobby Brown, padre de su hija Bobbi Kristina Brown (Krissy) y alejada de su mejor amiga y asistente desde el comienzo, Robyn Crawford. De Robyn también se dijo que había sido su amante, motivo por el cual chocaba con los miembros de la familia que no querían admitir una posible bisexualidad. Fue Cissy Houston la que peor habló de Crawford: "No la quería en la vida de mi hija". No así Bobby Brown que llegó a confesar, en su libro de memorias, que si Robyn hubiera seguido a su lado, la artista aún estaría viva.

Un fantasma multiplataforma

Whitney brilló desde pequeña con una voz impresionante y apoyada e impulsada por sus padres se forjó una carrera ascendente. Bobby Brown la acompañó en la caída, ambos consumían drogas, pero el infierno, Whitney, ya lo tenía adentro. La cantante Dee Dee Warwick (que murió en el 2008) fue niñera suya y de sus hermanos cuando eran pequeños y según se supo más tarde, abusaba sexualmente de los tres. El dolor de la vejación la acompañó hasta la muerte, en ese hotel de Los Ángeles. La autopsia dijo que fue por "intoxicación de drogas y ahogamiento". Esa fue la misma causa por la que en 2015, falleció a su única hija de 19 años.

Bobbi Kristina fue encontrada por su pareja, sumergida en una bañera de la casa donde vivía, en Atlanta. Estaba inconsciente y murió casi seis meses después. Su novio, Nick Gordon, fue acusado por el padre de Krissy, que quería encontrar un responsable sea como sea. Gordon había llegado a la familia muy pequeño y fue adoptado por Whitney Houston cuando tenía 12 años. Desde entonces había compartido la vida con Krissy, en cuyo cuerpo se hallaron restos de cocaína, alcohol, ansiolíticos y marihuana. Gordon contó después que la joven se había enganchado con las drogas después de la muerte de su madre y así acabó con su vida.

Whitney Houston había sido la amorosa madre de Krissy y una de las cantantes más importantes de su generación, rompió barreras raciales y desplegó un talento fuera de serie. Así logró siete éxitos consecutivos en el Hot 100 de Billboard, además de ganar 6 Grammys y tantos otros premios que le valieron la certificación Guinness por ser la artista femenina más galardonada de todos tiempos con 400 reconocimientos. También fue la estrella de El Guardaespaldas, la película que protagonizó junto a Kevin Costner y con la que se consagró como sex symbol, además de dejar en el recuerdo la canción más romántica de los 90, "I will always love you".

(Video: "I will always love you", de Whitney Houston / Youtube)

Pero muchas cosas eran mentira en esa vida ideal y hasta el póster de El Guardaespaldas resultó falaz. La foto clásica de Costner sosteniendo a la protagonista en brazos, como salvándola, solo tiene a una de las dos estrellas. En una entrevista para Entertainment Weekly, el actor confesó: "Esa ni siquiera era Whitney". Al parecer, la estrella se había marchado ya del set cuando llegó el momento de hacer la sesión de fotos y resolvieron poner a una doble. A favor de la teoría de Kevin vale decir que en la imagen no se ve la cara de la chica. Y sí, pudo haber sido cualquiera.

Los duetos con músicos fallecidos, las cintas encontradas que se remasterizan hasta lo imposible y el resto de estas producciones después de la muerte siembran, por lo menos, la semilla de la duda: ¿Él o ella hubieran querido hacer esto? La respuesta es siempre la misma, nadie lo sabe. Basta con ver el capítulo "Rachel, Jack y Ashley Too" (protagonizado por Miley Cyrus) de la serie Black Mirror en Netflix, para entender que solo una persona consciente es capaz de decidir sobre su obra, aunque los vericuetos legales digan lo contrario.

Y si no es así, que tire la primera piedra el que haya visto ese episodio y no haya pensado ¡qué bien estuvo la venganza de Hanna Montana! No es que sea exactamente su biografía, pero Cyrus fue una chica Disney exprimida en forma de todo el merchandising posible. En la ficción de la serie encarna a una cantante cuya tía y manager la deja, a la fuerza, en estado vegetativo para seguir lucrando con la voz de su sobrina postrada. ¿De qué manera? Creando un holograma de la joven estrella que puede dar shows en varios escenarios de manera simultánea, el negocio perfecto que supera toda capacidad humana.

Ya no alcanzan las remeras, los pósters ni los viejos discos, la industria del entretenimiento va por más. Por un lado, está la tecnología trabajando para saciar del hambre de curiosos y fanáticos y, por el otro, están los herederos siempre dispuestos a celebrar el baby shower de estos muertos que no paran de nacer. "Win win".

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