El sábado, el Kun Agüero fue junto a todo su grupo de amigos a un famoso boliche de la zona de Costanera, donde celebró sus 31 años en compañía de su nueva novia, Sofía Calzetti. Días antes, el futbolista había compartido una cena con sus flamantes suegros, confirmando de forma definitiva el romance.
La que todavía no está enterada que su hermano tiene novia es la propia hermana del jugador que a la salida del festejo fue consultada por el medio Farandula Show sobre como era la relación con su nueva cuñada. Mayra del Castillo fue contundente con su respuesta y disparó: "No tengo cuñada, mi hermano tiene un montón de novias, las amo a todas". De esta manera, la joven desconoció al retirarse del lugar la flamante relación que acaba de empezar el Kun.
El festejo, que comenzó el sábado a la noche, contó con la ambientación de la exitosa serie Peaky Blinders. Por ese motivo, el delantero lució un look muy formal, que bien podría pasar desapercibido en la Inglaterra de los años 20, momento en el que transcurre la ficción. En tanto, Sofía Calzetti encargada de llevar la torta de cumpleaños, no respetó al pie de la letra el dress code y usó un vestido negro muy corto con botas.
El festejo siguió hasta altas horas y en la tarde del domingo disfrutaron de la compañía de más amigos. Ella aprovechó la ocasión para subir una foto con su amado y le dedicó un tierno mensaje: "Feliz cumpleaños mi amor, ¡mis mejores deseos siempre!" En poco más de una hora, la publicación superó los tres mil "me gusta".
Por otra parte, esa misma noche, el futbolista protagonizó un tenso cruce con la prensa, que estaba esperando su salida en la puerta del boliche. Según se puede ver en las imágenes, la seguridad de la disco se puso muy agresiva con los periodistas.
El futbolista surgido de Independiente ya había compartido fotos con su nueva novia, a quien conoció el 21 de marzo pasado en una disco porteña, en la misma noche que Tini Stoessel festejó sus 22 años. Sofía se habría acercado para saludar al ídolo, y aquel gesto de quien fuera compañera de secundario de Franciso Tinelli derivó en una charla al oído. Y una palabra llevó a la otra, y la afinidad nacida en esa noche dio origen al romance.
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