(Video: El Trece)
"Nada cambiará, no habrá que volver a empezar
Si nada va a cambiar
Juntos para siempre la historia no ha de terminar
Vivimos una historia sin final
El mismo sentimiento y así estaremos juntos
Soñando un nuevo mundo un juego compartido y singular"
El tema suena en cada fiesta de egresados y en cada reencuentro de amigos. Cada vez que se escucha entonar "Juntos para siempre" a Alejandro Lerner, es inevitable no pensar en unos jóvenes Adrián Suar, Diego Torres, Fabián Vena, Marisa Mondino, Araceli González y Gloria Carrá en La banda del Golden Rocket.
Pasaron poco más de 26 años desde el último capítulo de la novela que todos los martes se emitía por Canal Trece. Sin embargo, la historia de los tres primos que se reencontraron tras la muerte de su abuelo que les dejó como herencia un Oldsmobile Golden Rocket, sigue tan presente en el corazón del público como el primer día.
Un auto averiado que dio nombre al éxito
Jorge Maestro y Sergio Vainman, autores de La banda, contaron en su libro Maestro & Vainman, 36 años de historias en la televisión que todos vimos, intimidades sobre cómo se gestó la novela, que surgió a partir de divisar la imagen de un Kaiser Carabela, un auto fabricado en la Argentina entre 1958 y 1962.
(Diego Maradona en La banda del Golden Rocket – Crédito: El Trece)
Sin embargo, desde el canal no pudieron conseguir el automóvil. En su reemplazo, compraron un Oldsmobile Golden Rocket blanco y amarillo. Los creadores del ciclo querían ponerle Juntos para siempre a la historia, pero Hugo Di Guglielmo, gerente de programación de la emisora les propuso La banda del Golden Rocket, título que ellos no querían pero que aceptaron, a cambio de que los dejara contratar a una joven y poco conocida hasta ese entonces modelo, Araceli González.
"El auto fue un símbolo. Aunque nunca funcionó. Un problema en su motor hizo que gran parte de las tomas debieran hacerse con el auto detenido, y cuando había que verlo en movimiento, lo arrastraba un remolque. Los repuestos jamás llegaron de Estados Unidos y recién cuando el programa salió al aire se consiguió el kit para repararlo, pero la magia existió igual", contaron los autores.
El misterio de Pablo, el cuarto primo
Desde la primera temporada, los personajes de Adrián (Adrián Suar), Fabián (Fabián Vena) y Diego (Diego Torres), hablaban de un cuarto primo, de nombre Pablo. El familiar que faltaba apareció recién en la segunda temporada y estuvo a cargo de Germán Palacios.
¿Por qué todos se llamaban igual en la vida real y en la ficción menos el cuarto primo? La idea de La banda del Golden Rocket surgió tras buscar un producto que pudiera competir con la ficción de Telefe protagonizada por Pablo Rago y Carlín Calvo, Amigos son los amigos.
"Queríamos traernos de allí a Pablo Rago y desarmar la dulpla protagónica que hacía con Carlín. Anunciamos que había un cuarto primo, lejos, se llamaba Pablo. Los personajes se llamaron con el nombre de los actores. Rago nunca dejó Telefe, pero el personaje Pablo apareció en la segunda temporada, interpretado por Palacios", explicaron en su libro Maestro y Vainman.
Rago ya había trabajado con Adrián Suar en Menudo y con Diego Torres había hecho la obra El Zorro, en el Maipo, donde mantuvieron una estrecha relación. Sin embargo, su cercanía con los protagonistas no alcanzó para que dejara su papel de Pablo en la novela con Carlín.
Araceli González sí/Araceli González no"
"Hay que llevar a Araceli", le dijo Fernando Espinosa, director del ciclo, a los autores. En ese entonces, la joven morocha de pelo corto aún no era actriz: "No nos parecía que fuera a funcionar, pero él estaba seguro", dijeron los guionistas y le dieron el beneficio de la duda.
Tuvieron que negociar con Di Guglielmo para que la aceptara en el elenco. "Él propuso La banda del Golden Rocket como nombre, no lo aceptamos, no aceptaba a Araceli. Negociamos, cedimos y ganamos todos", recordó en su libro la dupla Maestro y Vainman. De inmediato, aquella morocha de pelo corto se convirtió en una revelación y Espinosa en un visionario.
Una canción "para siempre"
Actores, directores, productores y guionistas fueron cruciales para que el ciclo fuera un éxito. Y la música no fue la excepción. Lejos de ser algo accesorio, la banda de sonido fue esencial para conducir la historia, a tal punto que cada vez que suena "Juntos para siempre", hecha por Alejandro Lerner y Carlos Mellino, es inevitable no recordar a aquellos jóvenes que se unieron por el auto de su abuelo.
Justamente por no contar con música, el primer capítulo de la novela tuvo que ser reeditado en menos de un día, ya que cuando la gente del canal lo visualizó, lo rechazó. "La falta de clima y emoción que nos reclamaban residía en que estaba sin musicalizar. Fue una corrida, un estresazo desde las cero hasta las veintiuna, momento de su salida al aire. Editábamos cada parte en rollos de videotape separados por miedo a no llegar a terminar", recordaron.
Las corridas valieron la pena. La convocatoria a Araceli que no era actriz fue un suceso. El rechazo de Pablo Rago quedó en el pasado rápidamente. En su debut el programa hizo picos de 35 puntos, número que siguió durante las dos temporadas que duró. Si en el elenco había un "hervidero de egos" como dijo Julián Weich o no, solo los protagonistas lo saben, lo cierto es que las rivalidades (si es que las hubo) no traspasaron la pantalla y La banda del Golden Rocket ya es un clásico en la televisión, así como el auto lo es para los fanáticos de los coches.
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