Quienes pensaban que la "guerra de los ex CQC" había llegado a su fin, se equivocaron. Luego del ida y vuelta los ex integrantes del ciclo y de que se conociera cómo surgió el formato, en el que mucho tuvo que ver Andy Kusnetzoff y por lo cual reclamó públicamente "su parte" en las regalías por su venta al exterior, aparece un nuevo capítulo que va aún más atrás en el tiempo y está directamente ligado a otro emblemático programa de la televisión argentina, que habría sido la influencia de Caiga quien Caiga: La noticia rebelde.
Algunos de los creadores de aquel ciclo de ATC (hoy TV Pública) están indignados por las batallas públicas acerca de la originalidad del programa que condujo Mario Pergolini durante más de una década, porque consideran que su formato no fue tan audaz, sino una versión moderna del clásico noticiero que en la década del 80 condujeron un grupo de cinco periodistas que hicieron historia.
Jorge Guinzburg, Adolfo Castelo, Nicolás Repetto, Carlos Abrevaya y Raúl Becerra llegaron al canal estatal post advenimiento de la democracia en la Argentina, en un momento en el que en dicha emisora se producía contenido sin cesar y con grandes éxitos. Argentina Televisora Color fue el primero en transmitir justamente en colores en nuestro país, tras aquella ceremonia histórica en la que Lidia Satragno, Pinky, inauguraba a principios de la década del 80.
Pero para contar la historia completa de los noticieros humorísticos de la televisión nacional, en los que se basó CQC, habría que ir todavía más atrás; a Semanario insólito, programa que se emitió en dos temporadas, en 1982 y 1983, y era conducido por Raúl Becerra, Adolfo Castelo, Raúl Portal y Virginia Hanglin. Ella fue la creadora de la frase que popularizó al ciclo: "Llegó Semanario insólito; llegó la televisión".
El programa empezó a emitirse los domingos por la noche durante la Guerra de Malvinas, en el tiempo en que Canal 7 era el más visto del país. El cronista-notero del ciclo fue Nicolás Repetto, y fue en ese ciclo en el que nació la sección "Pasando revista", que al día de hoy se sigue multiplicando en programas de radio y televisión.
Pero La noticia rebelde llegaría finalmente a la pantalla el 1 de enero de 1986 y se extendería en la pantalla hasta mediados de 1989, tras un éxito singular. Fue un programa que marcaría un antes y un después en el periodismo humorístico de la Argentina.
La importancia del ciclo residía en su manera innovadora de hacer humor. La Argentina venía de un período de dictadura, con censura férrea y sin apertura política, y este programa, estrenado apenas dos años después del regreso de la democracia, inauguraba un estilo irreverente que rompía con los códigos humorísticos más conservadores y tradicionales que había hasta el momento. Se exploraban otros temas, se discutía todo aquello que estaba vedado hasta hacía poco tiempo y se expresaban opiniones que algunos años antes habrían sido impensadas.
(Video: Presentación de "La noticia rebelde" / ATC / Youtube)
Luego del levantamiento del ciclo, sus conductores se embarcaron en otros proyectos que, sin la trascendencia de La noticia rebelde, siguieron por la misma línea de humor. Pero a su vez, abrieron la puerta a que otros llevaran adelante sus propios programas dentro de los mismos códigos. De hecho el propio Mario Pergolini reconoció en varios reportajes la influencia que CQC recibió de aquel mítico programa.
Lamentablemente, tres de sus creadores murieron: Guinzburg, Abrevaya y Castelo. Pero es una ex productora del programa, quien también hizo secciones al aire y se destacó como editora gráfica en las revistas como Gente y Para tí, Teresita Ferarri -también escritora-, quien hoy reclama al ver los cruces televisivos de los ex integrantes de Caiga quien caiga: "A todos estos chicos que se pelean por originalidades y derechos de autor hay que recordarles que se robaron todo de La Noticia Rebelde", dijo en una entrevista con Teleshow. "¡Qué atrevidos! La falta de memoria… se niega todo en este país. Y lo digo porque yo fui la productora de ese programa", agregó.
Lo que la ex productora reprocha es que se evita recordar que el estilo de "noticiero humorístico" que marcó a CQC no haga suficiente justicia con La noticia rebelde, pese a la reivindicación pública que Pergolini hiciera años atrás: "Fundamentalmente lo que hizo La Noticia… fue la desestructuración del esquema clásico del programa periodístico. Hasta entonces había noticieros y los programas políticos del estilo Neustadt/Grondona. Nosotros, con este ciclo fuimos al quiebre del punto de vista y en vez de preguntar 'por qué subían los precios', llevábamos a los entrevistados a comprar con la cámara abierta", evoca Ferrari. "Me parece justo reclamar justicia porque muchos de mis compañeros están muertos", concluyó.
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