Por Nancy Duré
Federico Bal tenía otros planes para este verano. Después de haberse negado a participar del Bailando 2018 dispuesto a terminar con su perfil mediático, el actor había firmado contrato para acompañar a Pepe Cibrián y Nito Artaza en La Jaula de las Locas. Pero con la salida del coreógrafo del proyecto, finalmente, decidió aceptar la propuesta de Guillermo Marín de acompañar a sus padres en Nuevamente juntos, un amor de revista.
Y allí fue Fede, a instalarse en Mar del Plata, donde esta temporada dirigirá y compartirá escenario con Carmen Barbieri y Santiago Bal. ¿Con quiénes? Con los mismos que, hace ocho años, se separaron luego de que ella descubriera que él lo habría engañado con Ayelén Paleo, una de las bailarinas con las que hacían la obra Bravísima. Y los mismos que, desde entonces, le dieron a su hijo más de un dolor de cabeza con sus enfrentamientos televisivos…
Es verdad que corrió mucha agua bajo el puente. Que a los entredichos sentimentales y económicos le siguieron los problemas de salud de Santiago que, una vez más, Carmen se encargó de solventar. Y que, a esta altura de las circunstancias, ninguno de los dos tiene ganas de pelear. El problema es que la supuesta tercera en discordia también estará por La Feliz, ya que forma parte de Calle Corrientes, la revista de Cocodrilo. Así que, en algún momento, todos se van a cruzar. Y Fede tendrá que lidiar para lograr que la sangre no llegue al río.
Pero, además del escándalo latente de sus padres, Fede deberá tratar de sobrellevar la temporada sin que se reflote ninguno de sus entredichos con sus ex parejas. Por un lado, deberá evitar encontrarse con Barbie Vélez, quien está en la misma ciudad integrando el elenco de Derechas. Y de más está decir que, tras la demanda por violencia de género por la que finalmente fue sobreseído, las cosas entre el actor y la hija de Nazarena Vélez no quedaron nada bien…
Por otro lado, Fede no podrá evitar que la prensa le pregunte por Laurita Fernández, quien además de estar protagonizando Sugar estará disfrutando de las playas de Mardel junto a su actual novio, Nicolás Cabré, con quien empezó a salir -según dice ella- "justo después" de haber terminado su relación con Bal.
Y, como si esto fuera poco, Fede deberá evitar que resurjan los rumores de romance con Sol Pérez, su compañera de elenco. Y deberá evitar que, como le habría ocurrido el año pasado con Becky Vázquez, alguien lo descubra in fraganti con una vedette dispuesta a hacer campaña para llegar al Bailando.
¿Algo más? Sí: en temporadas anteriores, el actor fue denunciado por "ruidos molestos" por sus vecinos, debido a las reuniones que suele hacer en su casa. Y, según dicen, sus amigos "de toda la vida" ya estarían instalados en Mar del Plata a la espera de que empiecen los festejos de Bal. Así que deberá ingeniárselas como para seguir siendo un buen anfitrión, pero sin convertirse en "persona no grata" en el barrio.
En definitiva, si es verdad que quiere dejar de lado los "escandaletes mediáticos" para proyectarse como un actor y director serio, en este verano Fede deberá andar con pie de plomo. Y, seguramente, en más de una oportunidad deberá morderse los labios antes de hablar con la prensa.
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