Por Nancy Duré
Esta semana se definirá a los ganadores del Bailando 2018 y todos los participantes que siguen en carrera luchan por consagrarse campeones. Sin embargo, no todos los que lograron vencer en la pista, en las 13 ediciones del certamen de baile de ShowMatch, han podido sacarle luego mucho rédito en sus respectivas carreras. Incluso algunos, que quedaron en el camino mucho antes de la final, supieron conseguir mucho más que los triunfadores.
El primer Bailando por un sueño tuvo lugar en la segunda mitad del 2006, fue breve y la ganadora fue Carmen Barbieri, quien junto a Cristian Ponce superó en la final a la pareja conformada por Dady Brieva y Mirtha Lima por el
59 % de los votos. En ese momento, la capocómica reconoció que "gracias a Marcelo Tinelli" había podido pagar su casa. Pero, además, su paso por el certamen le permitió volver a posicionarse en el teatro de revista y marcó un antes y un después en su carrera.
Ese mismo año se hizo la segunda edición del concurso, en el que Flor de la V junto a Manuel Rodríguez lograron ganarle a la dupla de Emilia Attias y Lucas Tortorici por el 60% de los votos. A nivel laboral, el triunfo no cambió demasiado la carrera que la actual conductora venía haciendo en teatro, pero sí le permitió seguir vinculada a la productora Ideas del Sur –hoy LaFlia- durante los años siguientes, para continuar en ShowMatch ya sea como participante o como jurado.
La tercera edición también fue en 2006 y tuvo como ganadora a Carla Conte quien, junto a Guillermo Conforte,
dejaron en segundo lugar a la pareja de María Vázquez y Diego Bogado por el 56 % de los votos. Aunque ya venía trabajando como conductora desde hacía tiempo, gracias a su triunfo fue elegida para estar al frente de Este es el show junto a José María Listorti. Pero, con el tiempo, renunciaría del programa para dedicarse a su familia y terminaría criticando seriamente al ciclo de Tinelli en el que se consagró.
En 2007 tuvo lugar la cuarta temporada del certamen que, con un formato ya probado, se extendió todo el año. La ganadora fue Celina Rucci quien, junto a Matías Sayago, terminó eliminado a la pareja de Paula Robles –por entonces esposa del conductor- y Franco Tabernero por el 53,40% de los votos. Aunque volvió a participar de otros proyectos de la productora, la carrera de la vedette no se modificó demasiado con su triunfo en el Bailando por un sueño.
La quinta edición del concurso tuvo como ganadora a Carolina "Pampita" Ardohain, quien junto Nicolás Armengol eliminó a Laura Fidalgo y Miguel Brandán por el 56,24 % de los votos. Para la modelo, que ya venía de bailar en un certamen similar de Chile, fue el comienzo de una larga relación que hasta el día de hoy la mantiene ligada al programa de Tinelli ya sea como participante, invitada o jurado.
En tanto, en el 2009 el concurso que se puso al aire en ShowMatch fue El musical de tus sueños. Y la ganadora fue Silvina Escudero, quien eliminó a Ricardo Fort por el 56,43% de los votos. Para la bailarina, fue la puerta de entrada al Bailando por un sueño, del que participó años posteriores, como así también de otros programas de la productora. Y esto le permitió, además, aumentar su popularidad como para ir ganando terreno en las marquesinas de teatro.
La sexta temporada del certamen de baile tuvo lugar recién en 2010 y, para sorpresa de todos, el ganador fue Fabio "La Mole" Moli, quien junto a Mariana Conci y Julia Cejas derrotaron a Paula Chaves que bailó con Franco Tabernero y Alejandro Gallegos, por el 50,24 % de los votos. Para el ex boxeador, ShowMatch fue la puerta de entrada al mundo del espectáculo y, tras su triunfo, comenzó a trabajar en teatro como comediante.
En 2011 y 2012, para la séptima y octava temporada del Bailando, se coronaron campeones Hernán Piquín y Noelia Pompa, quienes vencieron a Tito Speranza y Nadia Hair y a Magui Bravi y Jorgito Moliniers por el 52,59 y el 50,53 % de los votos, respectivamente. Para el bailarín, ya consagrado en el mundo de la danza, el certamen fue un baldazo de popularidad que le permitió llegar a un público mucho más amplio. En tanto, para su compañera, fue la vidriera que le permitió romper con los prejuicios y dar a conocer su talento, para comenzar a ser considerada una verdadera artista.
Después de un año "sabático", Tinelli volvió con la novena edición del certamen de baile en 2014. La pareja ganadora fue la de Anita Martínez y Marcos "el Bicho" Gómez, quienes vencieron a los virtuosos Hernán Piquín y Cecilia Figaredo por el 59, 42 % de los votos. Con sendas carreras ligadas al humor, a ninguno de los dos ganadores se le modificó la balanza profesional tras el concurso, pero ambos terminaron distanciados después de alzarse con el triunfo.
En 2015 se realizo la décima temporada del Bailando por un sueño y los ganadores fueron Fede Bal y Laurita Fernández, quienes vencieron a Ailén Bechara y Fernando Bertona por el 51,82 % de los votos. Para el hijo de Carmen Barbieri y Santiago Bal, el certamen fue una escuela de aprendizaje que luego aplicó en sus trabajos en teatro. Y, para la actual jurado el certamen fue un punto de inflexión, que marcó su paso de "bailarina" a "figura".
La décimo primera edición del concurso de baile, que tuvo lugar en 2016, sirvió para que Pedro Alfonso se diera el gusto de ganar junto a Flor Vigna, venciendo a la pareja de Ezequiel "El Polaco" Cwirkaluk y Barby Silenzi por el 51,97 % de los votos. Para el ex productor, ya consagrado popularmente en el certamen, fue como llegar a una meta.
Para su compañera, en tanto, fue la posibilidad de darse a conocer más allá del público juvenil que ya la seguía y lograr, finalmente, ser tenida en cuenta para la actuación.
La campeona de 2017, décima segunda temporada del Bailando, fue nuevamente Flor Vigna, quien luego de que Pedro decidiera abandonar el certamen bailó con Agustín Casanova y Gonzalo Gerber, para terminar derrotando a la pareja de Fede Bal y Laurita Fernández por el 50,09 % de los votos. Con esto, Flor se mostró como una verdadera imbatible y fue convocada para su primer protagónico en televisión.
Así las cosas, a días de la gran final del Bailando 2018, muchos de los participantes sueñan con el triunfo. Pero habrá que ver si, más allá del cumplimiento del sueño que está en juego, la consagración se plasmará también en la carrera profesional del que resulte ganador.
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