Queridísimo por todos, intachable, con los éxitos más grandes en su espalda pero con la humildad de los grandes, sumando la carrera como director de teatro, Arturo Puig disfruta la vida sin que jamás se haya movido el piso debajo de sus pies.
Hace pocos días bajó de cartel la obra El vestidor con la que regaló otra gran actuación, esta vez compartiendo cartel con Jorge Marrale. Tras el año intenso de trabajo, el protagonista de uno de los mayores sucesos de la tele, Grande pá -superó los 60 puntos de rating en los años 90- se fue a tomar un merecido descanso en familia a las Cataratas del Iguazú.
Junto con su inseparable compañera, nuestra gran actriz Selva Alemán, el actor y director también aprovecha para disfrutar a sus nietos, que lo tienen embobado. Se trata de los hijos adoptivos de su hija, que nacieron en Rusia. "Mi hija hizo una tarea titánica, un ejemplo", había contado Puig.
"Adoptar acá le resultó muy difícil a mi hija. Se contactó con un matrimonio, realizó trámites muy estrictos de manera impresionante, con un juicio en Rusia. Por suerte los chicos están acá, son divinos, van al colegio y hablan en español", relató en una entrevista hace un tiempo con Catalina Dlugi.
Ahora Puig regala la foto más tierna: la de abuelo, con sus nietos y disfrutando las vacaciones. Grande, abu!
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