Con más de 30 millones de suscriptores en su canal, Rubius es uno de los youtubers más reconocidos del momento.
Sin embargo, seguramente lo que nunca imaginó el joven de 28 años nacido en Málaga es que del otro lado del Atlántico el niño que chateaba con él y decidía donarle nada menos que 60 mil bit (unos 420 dólares) era Felipe, uno de los herederos de Ricardo Fort.
"¿A tu familia le parece bien que me mandes tanto dinero?", preguntó el Youtuber, desconcertado sobre quién tenía del otro lado de la línea.
"La tarjeta de crédito es una extensión, después te puedo explicar", le respondió el niño, quien reconoció estar "súper nervioso".
"Yo sí que estoy nervioso, no sé si es legal todo esto que estamos haciendo", respondió Rubius entre risas.
"Mi papá fue a Estados Unidos, a Los Ángeles, California, a tenernos a nosotros a través de un vientre subrogado. Mi papá era como un famoso, por así decirlo, y hace poco, el 25 de noviembre, se cumplieron cinco años de su muerte", le relató su historia personal.
"La fábrica la crea mi bisabuelo, que también se llamaba Felipe Fort, y a la empresa le puso Fel-Fort. Entonces ahora yo soy dueño con mi hermana de una parte de la empresa", agregó.
"Muy fuerte, en mi vida había escuchado una historia así", se sensibilizó el Youtuber con su relato.
"Una de las cosas que quiero hacer cuando sea más grande, tenía pensado que la gente pueda entrar y mandar cómo querés que sea un chocolate. También tenía ideas como comprar acciones de empresas", expresó sobre lo que le gustaría hacer a futuro y sus planes para la empresa familiar.
Sin embargo, Rubius le aconsejó que no pensara tanto en esas cosas ahora y disfrute de su niñez. "Por lo menos hasta que cumplas los 18", le recomendó en forma casi paternal.
"Bueno Felipe, ha sido un placer conocerte, nos vemos crack y que vaya bien", lo despidió amablemente Rubius al finalizar la partida, todavía conmovido por la historia personal de uno de los herederos del recordado artista.
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