Gonzalo Costa adelgazó 75 kilos en casi un año: "La vida que llevaba no era vida, y no me quería morir"

La humorista que se luce con Santiago del Moro en radio y televisión contó a Teleshow qué la llevó a tomar la decisión de operarse: "Estaba cansada de estar todos los días mal"

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La humorista mostró el antes y después en las redes sociales
La humorista mostró el antes y después en las redes sociales

"Antes, lo único que quería era levantarme y comer, comer y comer… ¡Comer todo el día! Ahora me levanto y tengo ganas de hacer cosas por mí, mimarme, verme bien. Es todo nuevo: camino y disfruto del aire".

El relato de Gonzalo Costa, la humorista que acompaña todas las mañanas a Santiago del Moro en La 100, es conmovedor y tiene un mensaje de superación. Adelgazó 75 kilos en 11 meses y a casi un año del bypass gástrico al que se sometió —el 1 de diciembre de 2017—, le contó a Teleshow cómo tomó la decisión que le cambió la vida.

Cuando comenzó el tratamiento, la humorista pesaba 170 kilos. Antes de entrar al quirófano había adelgazado el 10% de su peso. Según explica, actualmente está en 95 kilos y "satisfecha" con su cuerpo; también consigo misma. De eso se trata el proceso.

"De la enfermedad de la obesidad no te curás nunca. Es una adicción, como el alcoholismo, o el que juega. Y esa adicción a la comida la tenemos siempre, pero ahora físicamente no podés comer en cantidad", explicó Costa, y agregó: "Antes, comía una docena de medialunas y no las disfrutaba, solo quería comer mucho. Ahora, como una sola y la disfruto".

En casi un año, adelgazó 75 kilos
En casi un año, adelgazó 75 kilos

El mensaje que la artista quiere dejar es que su lucha y el tratamiento no fue a base de una dieta en particular, sino que fue una operación que le cambió la vida. "A mí me hizo el click que no me quería morir… Estaba cansada de estar todos los días mal, de nunca llegar a un objetivo. Estaba insatisfecha", contó quien en las redes sociales comparte con orgullo fotos de su antes y después.

"Lo que había hecho hasta el momento no daba resultado. Ninguna dieta ni ningún tratamiento: la única vía era la operación. Y ahora me quiero cuidar como antes, pero con este bajón de peso, tiene una alegría mayor", sostuvo, y aclaró que no hay un peso al que quiere llegar —antes de la operación, tenía 90 kilos de más—, sino que su única meta es sentirse bien con ella misma. Y lo está.

"Ahora estoy satisfecha. Aunque a veces sí y a veces no… porque la cabeza no me la operaron", advirtió, y destacó que además del tratamiento médico realiza terapia que la ayudó a entender sus conductas: "Había cosas que estaban, y que están, y yo las tapé…".

El 1 de diciembre de 2017 se realizó un bypass gástrico. Antes de la operación, había adelgazado el 10 por ciento de su peso
El 1 de diciembre de 2017 se realizó un bypass gástrico. Antes de la operación, había adelgazado el 10 por ciento de su peso

¿Cómo logra mantener la estabilidad mental? "Es algo de mucha tarea, análisis y pensar en mí, que es algo que a los gordos nos cuesta", se sinceró, y puso como ejemplo los vínculos y las amistades. "Siempre que a alguien le pasa algo, el primero en estar va a ser el amigo gordo, porque esa es la trampa: queremos que el otro nos tenga en cuenta. Pero la bondad no existe porque al gordo lo único que le interesa y le importa es la comida".

Debió achicar el vestido que utiliza para sus shows
Debió achicar el vestido que utiliza para sus shows

"Esto lo hice por mí. Está mal decir esto, pero para la sociedad siempre tenés que ser la más buena, y en realidad, a la gente lo único que le importa es su adicción. Nada de lo que diga un adicto es verdad en cuanto al afecto", agregó la humorista, que el próximo 7 de noviembre estrena Re Chupete en Microteatro.

"Como lo que yo quiero pero en cantidades pequeñas, porque al tener el estómago más chico me lleno más", dijo, y cuenta que sigue visitando el centro del doctor Oscar Brasesco para continuar con su tratamiento. "Ahí me ve un nutricionista, una hepatóloga, me hacen análisis de sangre para controlarme".

Con esta nueva rutina alimenticia, su organismo no absorbe grasa pero tampoco nutrientes. Es por eso que debe tomar vitaminas todos los días y respetar una ingesta de lácteos; también intenta comer proteína una vez por día: "A veces la carne te cae mal, entonces elegís garbanzos".

Acompaña a Santiago del Moro en “Club del Moro” por La 100 y en Intratables por América
Acompaña a Santiago del Moro en “Club del Moro” por La 100 y en Intratables por América

"Hay cosas que son bárbaras y cosas que no, pero nada peor que lo anterior. Eso no era vida. No tenía elección en nada: no elegía la comida, la ropa…. Antes, me ponía lo que me entraba; ahora yo decido qué ponerme y lo que tengo ganas. Tenía el pie tan hinchado que tenía que usar zapatos talle 42 cuando yo calzo 40. Hoy uso esos y disfruto de poder elegir lo que me quiero comprar y cómo vestirme", relató Costa.

"Los gordos no elegimos: nos ponemos lo que hay. Y en relación al afecto del otro, sentís lo que el otro te quiere dar porque vos no pedís, es lo que el otro te quiere dar", continuó, e hizo hincapié en que todo se trata de un proceso que lleva tiempo, pero que la base es disfrutar lo que a uno le hace feliz.

También confesó que en estos once meses sufrió "un atracón" —"que es cuando uno come en cantidades exorbitantes"—. "Todavía me pasa, pero son cosas que provoca uno. Si tomo un café con leche y azúcar o tomo una gaseosa común, que no es light, me va a agarrar una descompostura. Y también a veces se lleva a un vómito involuntario, porque no te operan de la cabeza", reiteró sobre su lucha.

"Hoy me cuido, pero como de todo, incluso harinas… ¡lo que quiero! Pero en pocas cantidades, porque me siento satisfecha y disfruto lo que estoy comiendo", concluyó Gonzalo Costa, a casi un año de la operación que le cambió la vida.

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