Luis Miguel revela por primera vez detalles sobre su vida íntima en la serie de Netflix. En el capítulo ocho se muestra cómo fue su debut sexual cuando tenía 14 años. Su padre y mánager Luis Rey fue quien contrató a una prostituta para que el adolescente tuviera relaciones.
En 1984, el Sol estaba pasando por una difícil etapa porque su voz comenzó a cambiar y tenía dificultades a la hora de interpretar los temas. A pesar de que un fonoaudiólogo le recomendó que dejara de cantar por un año para cuidar sus cuerdas vocales, Luisito insistió en que el joven debía seguir con los shows.
Durante una gira, su padre invitó a una trabajadora sexual a la habitación del hotel, sin avisarle qué pensaba o si tenía ganas de pasar por esta experiencia. Micky estaba muy sorprendido y asustado. Su padre lo dejó a solas con la mujer. Luego de tener relaciones, Luis Miguel se encontró con Luis Rey en el bar del hotel y tomaron una copa de vino. "Celebremos el primer polvo de mi campeón", le dijo el mánager.
De esta manera quedó demostrado que el artista le mintió a su primera novia, Mariana Yazbeck, cuando le confesó que había perdido la virginidad con ella. En los primeros capítulos mostraron el romance que vivió con la fotógrafa cuando tenía 17 años. Pero por diversos motivos, la relación se fue desgastando.
En la serie de Netflix dan cuenta de cómo Luisito Rey manipulaba a su hijo, le decía mentiras, lo explotaba y hasta le robaba. Poco a poco, el cantante fue descubriendo la verdadera personalidad de su padre.
El actor Luis de la Rosa interpreta a Luis Miguel entre los 14 y los 16 años, y fue el encargado de protagonizar esta escena tan polémica. Según explicó De la Rosa, debieron grabar cuatro o cinco tomas para que quedara bien.
"Ella rápido se quitaba la ropa y se la ponía, había mucha gente para que no se sintiera incómoda. Fue muy profesional, pero en términos de actuación fue una escena muy fuerte tanto para mí como para ella, porque pues yo (en el rol de Micky) estoy muy asustado, es mi primera vez porque yo apenas tenía 14 años ahí, y por eso la cara de susto", declaró De la Rosa a la revista Quién.
"La verdad es que no me puse nervioso… Bueno, tal vez un poquito. Como cualquier escena de un beso… Pero no fue nada especial por lo mismo. Todo fue muy profesional", señaló.
Además, manifestó que la adolescencia del cantante fue muy complicada: "Es una etapa muy fuerte la que le tocó a Luis Miguel en esta edad porque empieza a 'pegar' bien, a crecer, a ser muy exitoso, a vender muchos discos, y empieza a tener uno que otro sacrificio en su adolescencia. Al papá, obviamente, ya lo conocen bien: es alguien muy ambicioso, que nunca va a estar muy satisfecho".
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