Después de rumores y especulaciones, Adabel Guerrero confirmó que vivió una crisis con Martín Lamela tras la llegada de Lola, a quien buscaron durante cuatro años. Un mes después del nacimiento de la beba, la bailarina había contado en su cuenta de Instagram que no estaba pasando por un buen momento y que se alejaría de las redes sociales.
El lunes mostró por primera vez la carita de su hija, y más tarde realizó una transmisión en vivo en la red social en la que explicó los motivos que la llevaron a pelear con su pareja, con quien está hace 10 años.
"Necesité aislarme un poco en todo sentido, hasta con mi marido. Estuve todo un día en mi habitación llorando; pensando… necesitaba pensar y organizar mi cabeza, que la tenía muy desorganizada", aseguró la bailarina que tiene medio millón de seguidores.
Martín se enojó conmigo porque no dejé que sus amigos fueran a ver a Lola al hospital
"El tema de no dormir hace también que no pienses bien y en esos momentos es mejor no decir nada. Porque si decís cosas en momentos de confusión, puede ser que te arrepientas. Hay que analizar lo que está pasando antes de hablar", agregó Adabel sobre la crisis postparto que atravesó las primeras semanas después de la llegada de su hija Lola.
Por otro lado, contó el malestar que sintió Lamela cuando comenzaron a surgir los primeros rumores de separación: "Que salgan por todos lados a decir que nos separamos no estuvo bueno, él se molesta y tiene razón, más allá de que tuvimos nuestra charla. Quiero contarles que no estoy separada de Martín, que ahora estamos mejor. Tuvimos que ponernos de acuerdo en algunas cosas, pero normal, como cualquier otra pareja. Hablamos y llegamos a acuerdos, estamos hace 10 años juntos".
"Por suerte, siempre salimos adelante y luchamos por nuestros sueños que hoy es Lolita nuestro mayor sueño. Por lo menos el mío, él tiene otros hijos que son sus sueños también", continuó.
Su obsesión por los gérmenes
Adabel también reconoció que se obesionó con los gérmenes y extremos cuidados de su hija, incluso del propio Martín Lamela, que iba dos veces por día a visitar a su madre al hospital. Motivo por el que la bailarina le pedía a su pareja que se bañara antes de acercarse a Lola.
Me obsesioné con el tema de los gérmenes, no quería que nadie se acerque, que nadie me la toque
"Pasé una crisis muy fuerte con la llegada Lolita. Sabía que iba a pasar, que me iba a obsesionar en cuidarla, los primeros días sobre todo. Yo ya lo esperaba. Porque cuando yo amo mucho a una persona me obsesiono con cuidarla porque me da miedo que le pase algo o perderla, como ya perdí a un montón de seres queridos… Imagínense lo que es un hijo… ¡La sensación! Para mí que era tan nuevo, no tengo idea de un bebé… no sabía qué se hacía, cómo se cuidaba", explicó.
"Me obsesioné con el tema de los gérmenes, no quería que nadie se acerque, que nadie me la toque, es cierto todo lo que se dijo, no quería que nadie la toque. Y me la banco porque eso fue así, y me la re banqué porque mi marido se enojó conmigo y me la recontra banqué de que nadie se acerque a mi bebé hasta que cumpla el mes", siguió.
"Mi vida depende de este bebé en este momento. Pasó algo que no se sabía, que por suerte ya no es tan grave. Tres semanas antes de que nazca Lola, la mamá de Martín quedó internada y en coma inducido por un problema pulmonar. Imagínense lo que fue, el ambiente no fue el ideal. Había mucha tensión, Martín venía muy bajoneado. Lo veía destrozado y yo a punto de dar a luz. La bronca que nos daba que la Mimi, mi suegra, quizá no llegara a conocer a Lola. Nos dio bronca, tristeza, angustia, tensión. Fue todo muy fuerte", agregó.
"Cuando nace Lola, yo le sumo mi obsesión con los gérmenes y Martín venía de ver a su mamá, de un hospital, al que iba dos veces por día. Lo imaginaba repleto de gérmenes por todos lados, entonces, lo obligaba pobre a sacarse la ropa y bañarse; si no, no podía acercarse a la bebé. Eso dos veces por día durante todos los días. Fue muy agobiante, pero yo no podía conmigo misma. No podía soportar que se acercara al bebé después de haber estado en un hospital. Tenía que cuidar a mi bebé como una leona", aseguró.
"Para mí era el enemigo el que llegaba a casa. Fue todo muy feo, muy feo… Ya estamos mejor. Martín se enojó conmigo porque no dejé que sus amigos fueran a ver a Lola al hospital, yo prefiero que se enoje y cuidar a mi bebé. Ya cumplió un mes y de a poquito estamos invitando a que la conozcan", concluyó Adabel Guerrero en la transmisión que duró 20 minutos.
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