Y finalmente… ¡se casó! Llegó al altar acompañada por su mamá, Claudia Villafañe, su hermana Gianinna Maradona y su adorado sobrino Benjamín Agüero. Porque la ausencia de Diego Maradona -como ella misma se había encargado de decir- no iba a opacar la gran fiesta que ofreció en el salón La Herencia, en Pilar. Allí, Dalma Maradona le juró amor eterno a Andrés Caldarelli. Y fue correspondida, claro.
La ceremonia no religiosa -oficiada al aire libre por el psicólogo social Lito Dorfman– fue seguida con atención por unos 350 invitados. Dalma le envió la tarjeta magnética -aquella que permitía el ingreso al salón- a muy pocos integrantes de la familia Maradona; la excepción corrió por cuenta de Lalo Maradona, hermano menor del 10.
También hubo artistas, viejos conocidos del medio (la hija mayor de Diego arrancó su carrera como actriz a los ocho años), como Gastón Pauls, Pablo Echarri, Nancy Dupláa, Mica Vázquez, Gladys Florimonte y Jey Mammon, entre otros. Pero también amigos de su papá, que la han tenido en brazos de beba. Por caso, la familia de Sergio Goychochea, el ex arquero que jugó dos mundiales con Maradona.
Todos ellos estuvieron presentes en una fiesta a la que faltó Diego, pero donde los que brillaron fueron los novios. Esta noche fue de Dalma y Andrés. Y de las 350 personas que sí dieron el presente.
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