Jorge Guinzburg logró construir una importante carrera en el mundo del espectáculo. Con una personalidad multifacética, se destacó como humorista, guionista, conductor, periodista y productor en radio, televisión y teatro.
Estudió la carrera de Derecho, pero luego decidió seguir Arte Dramático. Sus primeros trabajos fueron como guionista en radio y gráfica. Luego, adquirió popularidad cuando condujo exitosos programas como La noticia rebelde, Peor es nada, La biblia y el calefón y Mañanas informales.
Con su humor ácido e irónico, Guinzburg supo ganarse el cariño de la gente y pudo imponer su propio estilo en los medios de comunicación. A los 59 años, murió como consecuencia de una larga afección pulmonar. El talentoso humorista logró dejar como herencia un interesante legado. Al cumplirse diez años de su muerte, sus amigos y seres queridos lo recordaron con cariño.
Joaquín Sabina, quien fue el encargado de hacer la cortina musical para el ciclo La biblia y el calefón, le hizo llegar a los familiares de Guinzburg un emotivo mensaje: "Desde el principio Jorge me apoyó invitándome generosamente a sus variados programas de televisión, abriéndome su casa y haciéndome el incomparable regalo de su humor, su cultura y su inteligencia. Como todos los sabios, empezaba por reírse de sí mismo, para ya luego reírse de todo lo divino y lo humano".
"Era un lujo estar con él. Tanto que desde que se fue, hace ya diez años, falta algo muy importante en mi Buenos Aires querido: su compañía, su hospitalidad y su ejemplo. Porque charlar con él, o ir a alguno de sus programas o cenar en su casa era una auténtica fiesta, una de las mejores maneras porteñas de ser feliz. Para mí el Petiso fue, y sigue siendo hoy, insustituible", agregó el artista español.
Por otra parte, su hija Malena Guinzburg, que sigue los pasos del recordado humorista y está trabajando en el programa Morfi de Telefe, compartió varias imágenes y le dedicó tiernos mensajes en su cuenta oficial de Twitter:
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