"Habló con César (Carozza, su abogado) porque quería poner los días de visita. Yo estoy seguro de lo que soy como padre. Me preocupa que ella tome un odio hacia mí y que se lo inculque a las nenas", decía Matías Defederico sobre el temor de que su ex mujer, Cinthia Fernández, influya sobre sus tres hijas: las mellizas Charis y Bella (cuatro) y Francesca (tres).
Después de siete años y medio juntos, el futbolista y la modelo se separaron hace un mes y los últimos días, según detallaron ambos -en distintos medios- las peleas terminaron con ella bloqueándolo de WhatsApp.
Si bien la bailarina -que está en Villa Carlos Paz junto a sus hijas porque está haciendo temporada teatral con Mahatma– aseguró que jamás dejaría a las pequeñas sin la posibilidad de ver a su padre, Defederico publicó un descargo en su cuenta de Instagram en el que da a entender que no tiene comunicación con Charis, Bella y Francesca.
"Las amo y extraño cada día que pasa. Siento la necesidad de decirlo y gritarlo y que me escuchen, pero la realidad no me deja, hasta a veces no me creen. Sé muy bien lo que somos, la conexión y el sentimiento que tenemos cada una de una forma particular hacia mí. Y yo elijo amarlas libremente. No escudándome de su amor genuino. Papá siempre estuvo, está y estará", escribió el futbolista en su cuenta de Instagram este miércoles.
La noche anterior, Cinthia también había posteado una foto de sus tres hijas junto a una frase en referencia al dolor que está atravesando por la separación con Defederico. "Las necesito para vivir. Repárenme el alma, hermosas", le pidió.
"Dijo que tenía miedo de que no le deje ver a las nenas. Yo soy una persona bastante lógica. Voy a poner días para que vea a las nenas. Yo a ellas no les dije nada de la separación. Las nenas siempre están conmigo, salvo cuando me voy a trabajar. Trato de que no sientan la falta. Dentro de todo, siempre vivimos en un contexto así, que él estaba trabajando afuera para darles lo mejor a sus hijas. Quizá es más normal para ellas no verlo en casa. Cuando vuelva, no sé si va a ser normal, porque él va a entrar a la casa", había explicado la bailarina después de los dichos del futbolista.
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