Laura Franco, Panam, y Carolina Pampita Ardohain tuvieron una charla a corazón abierto en la que, entre lágrimas y tomadas de la mano, recordaron a sus hijas Chiara y Blanca, fallecidas en el 2013 y el 2012 respectivamente.
"En el escenario me mostré con todas las tristezas y también con muchas alegrías. Para nosotras que nos atravesó el dolor tan grande, es vital ver el amor de la gente, porque te das cuenta de que mas allá de la violencia, hay más amor. Eso nos puso de pie", comenzó diciendo la animadora infantil en el ciclo Pampita On Line.
Luego, explicó: "Hablo en plural porque… Todas las personas que pasaron lo mismo se sienten cercanas. Fuimos referentes de muchas mamás que pasaron mucho dolor y sienten que no pueden, que no tienen más ganas de hacer nada. Creo que poniéndonos de pie decimos que pueden que levantarse, volver a creer, a confiar, a tener esperanzas".
A pesar del dolor, Panam resaltó que hay motivos para levantarse: "Por nuestros hijos, por la familia que nos quiere, nos ama y nos quiere ver bien, y creo que el angelito que tenemos en el cielo quiere vernos sonreír, quiere vernos enteras, felices. Me siento muy cercana, te admiro como mamá".
Carolina, sensible por las palabras de su invitada, no atinó a decir palabra, más que recordar que el dolor y la difícil situación que pasaron siempre las unió.
"No le podría hacer daño a nadie, y menos a alguien que pasó una tristeza tan grande. Me hace bien estar cerca, me siento muy afín porque no podes explicarle a nadie lo que se vive. Pero es lindo cuando la gente te abraza con amor y ves sinceridad en los ojos de otra persona. Es bueno apostar a la vida y es nuestra humanidad, no dejarnos vencer por la tristeza, por la depresión y ponernos de pie y contagiar nuestra alegría y lo lindo que tenemos dentro", cerró Franco.
Blanca, hija de Pampita y Benjamín Vicuña murió el 8 de septiembre del 2012 en Chile, a los seis años, luego de haber estado internada varios días por un cuadro de neumonía que se complicó por una bacteria.
Chiara falleció en el vientre de su mamá, muy pocos días antes de nacer en mayo del 2013: "Mi hija vino para ensañarme algo, soy muy creyente y me encomiendo a Dios. Si él quiso arrebatarme a mi hija, por algo debe ser. Yo creo que me morí ese día y reencarné", dijo Panam a los pocos meses de despedir a su bebita.
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