Si algo que caracteriza a Mariano Iúdica (47) es su alegría y esa energía positiva que transmite siempre desde la pantalla. Sin embargo, humano al fin, el conductor mostró su costado más triste y melancólico al recordar a Eduardo, su hermano fallecido, quien hubiera cumplido años en el día de la fecha.
"Te extraño y te sueño…Eduardito…En el Cielo con Diamantes!!! Feliz Cumpleaños!!! Querido HERMANO, Sos y serás mi IDOLO…Gracias por esos ACORDES en la guitarra de LOVE ME DO de Los Beatles que me cambiaron la vida…Gracias por ese cachetazo que me diste delante de mis amigos por gritarle "RAJA DE ACÁ" a una NOVIA…Gracias por mostrarme LOS MOCASINES DE GUIDO…Gracias por haber sido y aún ser MI ÁNGEL DE LA GUARDA!!!", escribió en su cuenta de Facebook el conductor de Polémica en el Bar , que acompañó la publicación con distintas fotos homenajeando su figura.
"A mis trece años fallece mi hermano Eduardo en un accidente en la estación de El Palomar. Fue tremendo, nunca vi un velorio así. En el barrio mi hermano era el chabón más lindo, el que mejor jugaba a la pelota, el más bueno, el que tenía la mejor novia, tocaba en una banda y esos pibes diez, que van a diez centímetros del piso, generalmente se los llevan rápido, mi hermano no era una persona normal", lo evocó años atrás Iúdica en Secretos Verdaderos.
"Tuvo un accidente de tren en la estación de El Palomar, yendo para la facultad. Nunca supimos bien, pasaba él rápido y parece que patinó en el estribo, no sé bien cómo fue, mi hermano se puso a investigar. Para mí fue un estigma muy grande que me llevó muchos años de terapia y de contarlo siempre en mis reuniones, donde uno saca el diablo para poder exorcizar, porque esas cosas enferman cuando uno no habla. Mi hermano Fernando, de hacerse cargo de la familia y no sacarlo, tuvo un cáncer que casi se lo lleva a los cuarenta años y con nueve hijos", agregó Iúdica, quien como si fuera poco tuvo que darle a sus padres la trágica noticia.
"Tuve que llamar a mis viejos que estaban afuera los dos, yo tenía trece años y mi hermano veintiuno, ahí me hice grande. Nunca vi llorar a un hombre como lloró mi papá esa muerte, nunca volví a ver un hombre llorar así, fue una desgracia tremenda", describió.
"Cada uno salió para el lado que pudo, mi hermano pasó a ser el mayor, mi madre se enfermó fuerte, después mi padre. Fue un dominó, y todo lo que era familia perfecta fue desapareciendo. Cada uno trató de hacer su vida", concluyó al respecto sobre esa muerte que marcó su vida y la de toda su familia para siempre. Y que, claro está, motivó el emotivo recuerdo de quien él mismo definió como su "ídolo".
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