Mujer, hija, acuariana, azuleña, esposa modelo, diseñadora, conductora, panelista, surfista. Con cualquiera de estas palabras se puede definir a Luli Fernández (29), quien tiene una larga carrera en el ambiente artístico y que en los últimos seis años comenzó a surfear, animada por su marido, Cristian Cúneo Libarona (47).
Con un gran presente personal y profesional, demuestra que es una mujer todoterreno y que las 24 horas del día parecieran no alcanzarle para todas las actividades que realiza. La modelo y conductora es panelista en Pamela a la tarde (lunes a viernes a las 15:30 por América), tiene su propia marca de carteras, entrena tres veces por semana para mantener su figura y tampoco le gusta descuidar el orden de su casa.
Soy bastante obsesiva con el orden de mi casa y tengo varios TOC
En una entrevista exclusiva para Teleshow, Luli habla de sus ganas de ser mamá junto a su marido, con quien está en pareja hace casi seis años. "Aunque ya formamos una familia ensamblada, queremos tener nuestros hijos", confiesa la modelo que mantiene una excelente relación con los cuatro hijos de Cúneo Libarona: Santos (19), María (17), Vicente (7) y Jacinto (6), de las relaciones anteriores del abogado.
"Recién ahora los más chicos están un poquito más grandes y no demandan tanto tiempo. Además, está bueno que las cosas lleguen cuando tengan que llegar. Yo tengo 29 años y nadie me apura ni me corre. Cristian quiere tener más de un hijo conmigo. Si fuese por él, tendría tres más. Es un loco", cuenta la modelo que sueña con ser madre de dos hijos, "pero si vienen tres, serán bienvenidos".
Los fines de semana somos una familia ensamblada: nos vamos al country con los cuatro hijos de Cristian y mis cuatro perros
"Yo me siento en un buen momento para ser mamá pero no es algo que tengamos en mente para ahora. Quizás el año que viene, o cuando Dios lo decida. Somos bastante relajados. Estamos juntos hace casi seis años. Disfrutamos mucho la vida así. Vamos viviendo cada etapa y cada paso y siempre nos manejamos de esa manera. Por eso creo que el vínculo con sus hijos es tan fluido y tenemos todos buena relación. Nunca apuramos las cosas y siempre supimos que lo nuestro era a largo plazo", asegura Luli sobre el amor que siente por su marido y su familia.
No fumo y prácticamente no tomo alcohol
El secreto para mantener su figura
"Hace cuatro años que hago tres veces por semana gimnasia funcional, un entrenamiento con ejercicios aeróbicos y sin peso. Se trabajan todos los músculos del cuerpo con el objetivo de estilizar y no de ensanchar. Está bueno porque tonifica, pero sobre todo porque a las chicas nos gusta vernos más estilizadas que musculosas", explica Luli, que comparte con sus más de 520 mil seguidores de Instagram videos de las diferentes rutinas que hace.
"También trato de comer sano, prácticamente no tomo alcohol y no fumo", aclara la modelo que cuida su cara al no exponerse al sol. "Soy muy cuidadosa con eso, salvo cuando vamos a surfear porque estoy adentro del mar. Pero, durante la temporada de verano y primavera, me pongo siempre protección en la cara porque el sol es acumulativo y mancha la piel, así que trato de evitarlo", detalla quien todos los días se maquilla ella misma para salir al aire en el programa que conduce Pamela David por la pantalla de América.
Me gustaría tener dos hijos pero si vienen tres, serán bienvenidos
El surf, una pasión que descubrió gracias a su marido
La modelo comenzó a hacer surf en las primeras vacaciones que compartió con Cristian Cúneo Libarona, quien practica el deporte desde su infancia. "¿Por qué no te animás? Te va a encantar", fueron las palabras del abogado a la modelo. "Soy muy miedosa así que empecé de a poco y hoy me encanta. Todos los años tratamos de viajar y conocer destinos exóticos y con playa para surfear", cuenta.
"Cada aventura es un viaje totalmente nuevo. Disfruto surfeando pero trato de no asumir ningún tipo de riesgo porque no me gusta golpearme", dice Luli que este verano se lastimó la cola y las piernas en un incidente en el mar durante unas vacaciones en Indonesia. "Me corté con las quillas de la tabla y no la pasé tan bien. Ni siquiera era una ola difícil o muy grande, pero son cosas que pasan y, gracias a Dios, no me he dado grandes golpes. Por suerte no me atemorizó para continuar", destacó.
Me siento en un buen momento para ser mamá
Su rol como ama de casa
"Soy bastante obsesiva con el orden y la limpieza de mi casa y tengo varios TOC. Como tengo cuatro perros, por otro lado, me relajo con el tema de los pelos pero sí trato de que el jardín siempre esté en buen estado porque ellos entran y salen y sino, mi casa sería intransitable o estaría llena de barro".
Luli y Cristian viven en un departamento en el barrio porteño de Palermo: "Mi casa es mi lugar en el mundo, por eso me gusta ver todo prolijo y ordenado".
A la hora de cocinar, la modelo reconoce que no es la tarea del hogar en la que más se defiende pero que su marido tampoco se lo exige: "Antes no hacía nada, mejoré en los últimos años. De a poco me he ido arreglando. Hay días que tengo ganas de cocinar y soy más elaborada y hay otros que lo resuelvo con unas pastas o unas milanesas. Por suerte, Cristian no me reclama porque no es muy gourmet a la hora de elegir qué comer y nos hemos ido amalgamando con lo que uno sabe sin exigirle tanto al otro".
Familia ensamblada: los hijos de Cúneo Libarona y los perros de Luli
"Los fines de semana nos vamos a una casa que tenemos en el Club CUBA en Villa de Mayo porque los hijos de Cristian juegan ahí al rugby. Nos instalamos todo el fin de semana allá, con los chicos y nuestros perros. También solemos irnos de vacaciones juntos. Estamos todos muy fusionados. Somos una familia enorme y disfrutamos de ello", cuenta Luli y agrega que los miércoles el abogado se va con sus hjos a la casa: "Cuando el trabajo me lo permite, lo acompaño".
Comprometida socialmente, y con un gran cariño que tiene por los perros, la modelo tiene cuatro con los que convive en su departamento de Capital Federal así como también los fines de semana en Villa de Mayo: "Manchi tiene ocho años y lo adopté de la calle, Indiana es una Bulldog francés que también tiene ocho años, Zimba tiene seis y es Golden, y acabamos de adoptar de la calle a Trébol, de un mes y medio y una discapacidad motriz en una de sus patas de adelante".
By Luli Fernández, la pasión por las carteras que convirtió en su propia marca
Hace dos años, la conductora lanzó su propia marca de carteras que, según destaca, tiene ítems cruelty free, que son hechos con cuero ecológico: "El 90 por ciento de la colección es de cuero y enaltezco la idea de los cueros ergónomos y trabajar con mano de obra local ya que todo se produce en talleres argentinos"
La forma de comercialización es con venta on line a través de su sitio oficial: "Nos subimos a esta nueva forma de venta y nos está dando muy buenos resultados", cuenta Luli que en la colección de carteras se encontrarán modelos clásicos "para cualquier estación".
"Era difícil encontrar en el mercado local un producto de calidad premium que sea clásico y que no caiga en la tendencia en exceso. Quería diseñar algo que sirva para cualquier estación, por eso la premisa es que es un producto clásico, que no pasa de moda, que es de buena calidad que te acompaña en muchas temporadas", explica sobre sus carteras.
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