"Hablamos claramente de Mariano". Lali Espósito (25) lo dice sin que se lo pregunten, por si alguien tenía alguna duda sobre a quién está criticando. Porque hasta ahí, su definición parecía abstracta: "Venía muy golpeada. Había estado en una nube negra", le contaba a la revista Gente sobre cómo se encontraba al iniciar su relación con su actual novio, Santiago Mocorrea (32). Y entonces, lo dicho: se refería "claramente" a Mariano Martínez (38), su anterior pareja.
Estuve en una nube negra. Había perdido la risa
"No creo que sea un mal tipo, pero su manera de amar no es la mía –se explayó la cantante–. Mis afectos me decían: 'Ya no sos vos; perdiste la risa'. Todo el tiempo estaba tensa, asegurándome de que él estuviese bien. Porque yo, que siempre fui muy segura, me sentía mucho más fuerte que él en muchas circunstancias".
La extensa respuesta concedida a la revista, cuya portada de esta semana le pertenece, continúa. "Soy una mina con armonía. Soy sencilla: te amo o no te amo, pero no voy a hacerte daño por eso", afirma, dejando entrever que Martínez la lastimó con su manera de querer. "Fue una relación tormentosa. Hay gente que no sabe amar 'simple', tal vez por tener problemas con ellos mismos para amarse. Por eso le escapo a lo rebuscado y doloroso. Esta vez escapé tarde… Me fui como cuando te patean la pierna en un partido, resentida".
Todo el tiempo estaba tensa, asegurándome de que él estuviese bien
En otra respuesta Espósito vuelve a reparar en su ex compañero de la novela Esperanza mía: se pusieron de novios la primera vez que trabajaron juntos (incluso varios sospechan sobre el inicio preciso de esta relación: ¿ella todavía estaba con Benjamín Amadeo?). "Con Mariano, por un lado aprendí a priorizarme; y por otro, a acompañar", explica la actriz.
Y justo cuando por fin parece acercar un elogio hacia el actor, en realidad aporta una nueva crítica. "Estuvo bueno correr el ego. Y él lo valoraba. Fui una gran compañera", subraya Lali, destacándose a ella misma.
Hoy, su presente sentimental está ligado a Mocorrea. Pero su pasado todavía se aferra a Mariano Martínez.
Claramente.
LEA MÁS: