Veinte años pasaron del fatal accidente en el cual murió una de las máximas estrellas de la cumbia, Gilda. Pese al paso de los años, su música nunca perdió vigencia. "No me arrepiento de este amor", "Fuiste", "Paisaje", "Corazón valiente", algunos de sus hits, siguen sonando y haciendo bailar al público.
Su pareja, Juan Carlos "Toti" Giménez, su representante, Reynaldo Lio, y su biógrafo, Alejandro Margulis, contaron a Teleshow quién fue Míriam Alejandra Bianchi, más conocida por su nombre artístico Gilda. Además, explicaron cómo logró alcanzar tanta popularidad, recordaron cómo fue el día trágico en el cual perdieron la vida siete personas y hablaron de los milagros que le atribuyen a la cantante.
¿Quién fue Gilda?
A los 29 años, Gilda se interesó por un aviso clasificado en el que convocaban vocalistas para un grupo musical. Se presentó y fue ahí donde conoció a Juan Carlos "Toti" Giménez, un compositor y tecladista de conservatorio que se enamoró de ella a primera vista.
"A Gil la conocí el 20 de septiembre de 1990. Tenía un aura, un carisma muy especial, fue en un casting que hicimos con un amigo. En realidad el casting lo hacía un amigo, yo más que nada le prestaba el lugar porque tenía instrumentos. Para mí fue una persona espectacular", expresó el músico al definir a la artista de la movida tropical.
"Era una persona muy querible. A todos los que la conocieron les pasó lo mismo, terminaban haciéndose amigos de ella. No sé si era el carisma o la forma de ser, pero era una persona muy querible", añadió.
En 1995, Gilda lanzó Corazón Valiente, su disco más vendido de su carrera. El álbum fue editado por la discográfica Leader Music de Reynaldo Lio.
"Empezamos a trabajar juntos luego de una reunión que tuve con ella y con Toti Giménez. Yo a él ya lo conocía. Él era el director de la banda de Ricky Maravilla y yo el manager de Ricky Maravilla. Me la presentó y me dijo que estaba interesado en que yo manejara su carrera. A partir de ese momento empezamos a trabajar juntos y unidos. Así logramos el gran disco que fue Corazón Valiente", recordó Lío de cómo nació su lazo con la estrella de la cumbia.
Gilda fue única e irrepetible, la mejor cantante de música tropical que hubo en Argentina
"Gilda fue única. Única e irrepetible. Yo la puedo describir como la mejor cantante de música tropical que hubo en Argentina y como una de las mejores plumas al escribir las letras de sus temas. Como ser humano, bueno, trabajamos de igual a igual mucho tiempo y nunca tuvimos un inconveniente o un problema", manifestó al describir en pocas palabras a la artista.
El periodista Alejandro Margulis, un escéptico de la cumbia, se convirtió en un devoto de Gilda cuando escribió Santa Gilda, una investigación sobre la vida, la muerte y los milagros de "la abanderada de la bailanta".
"Escribí un libro sobre Gilda. La música de Gilda entró por la ventana de mi casa. Yo, que no soy fanático de la cumbia, primero me enojé y les fui a pedir a los vecinos que bajaran la música. Volví y la música seguía sonando. Era Gilda. Afortunadamente, era Gilda que entró por mi ventana. A partir de ese momento me puse a investigar sobre ella", precisó Margulis.
"Gilda era una persona bella, buena, piadosa. Una hermosa mujer y una artista brillante. Una chica de clase media que quería ser cantante y trascender en la música, que empezó un camino muy difícil hasta que de a poco empezó a ser reconocida", afirmó al sintetizar sobre la ídola.
Gilda cantante, distinta a todas
Cantantes tropicales hay muchas. Gilda, una sola. Más allá de su talento para el canto, fue dueña de un carisma especial, que la diferenció del resto de las mujeres que se dedicaban a la cumbia.
"Si supiera qué tenía, seguiría haciendo la misma música, pero no", dijo Toti Giménez, y al ser consultado sobre si podría haber una sucesora, agregó: "Es como hacer café con leche. Necesitás café, ahora quedó solo el café. Reproducir el mismo tipo de música, lograr esa química, es imposible. Es irrepetible como Gardel".
No hay una fábrica de ídolos, se dio así. Es una combinación de muchos factores, la época, el ánimo al hacer un show, buscar un sonido
"No hay una fábrica de ídolos, se dio así. Es una combinación de muchos factores, la época, el ánimo al hacer un show, buscar un sonido", agregó. Lio, por su parte destacó que uno de los primeros logros de Gilda fue ganarse la admiración de las mujeres, algo poco usual. Hecho que seguramente se debiera a su simpleza y espontaneidad.
Para su representante, otro de los factores de la cantante fue su "incansable trabajo por mejorar, siempre pensando en la gente". A pesar de que murió joven, él cree que ella llegó a disfrutar de su éxito.
La trágica noche del accidente
El 7 de septiembre de 1996 un camión embistió el micro en el que ella y sus músicos viajaban, en el kilómetro 129 de la Ruta Nacional 12, cuando se dirigía a Chajarí, Entre Ríos, para dar un show. El saldo de aquel accidente fue fatal; además de la cantante murieron su hija Mariel y su madre, tres músicos de su banda y el chofer.
"'Dormí un rato y después tomamos mate', fue lo último que me dijo; me dormí y cuando abrí los ojos tenía un techo amarillo sobre mí y se escuchaban gritos", recordó Toti sobre aquella trágica noche. Debido a las heridas que sufrió, estuvo varios meses internado sin saber qué había pasado con Gilda.
"Nunca pensé que ella pudiera morir, jamás se me cruzó por la cabeza. Murieron amigos, compañeros, éramos realmente una familia", recordó casi entre lágrimas su ex pareja.
Gilda, santa milagrera
Luego de su muerte, sus fanáticos montaron un santuario en el lugar del accidente. Allí dejan flores y rosarios y acuden para rezarle a su santa. "Se le dio una atribución masiva de santa milagrera, algo que pasaba desde antes de su partida, que ella no creía pero aceptaba", analizó Alejandro Margulis.
Se le dio una atribución masiva de santa milagrera, algo que pasaba desde antes de su partida, que ella no creía pero aceptaba
Al respecto, Toti dijo que por un tema de religión él cree que el único que puede hacer milagros es Dios, o Cristo a través de Dios. Sin embargo, celebra las cosas que le hacen bien a la gente: "Hay una necesidad muy grande de atribuirle ciertos poderes a personas que ya no están; si eso ayuda, me parece bárbaro".
Sobre lo que pensaba ella, aseguró que si vieran los poderes místicos que se le atribuyen estaría enojada ya que incluso se molestaba con quienes le pedían que le pusiera su mano en la cabeza para curarlos y les sugería que fueran al médico.
En un sentido parecido, su representante opinó: "Yo creo en Dios, pero hay mucha gente que cree en Gilda, y si les hace bien, bienvenido sea. Para mí era una persona normal; si era santa como dicen, no lo sé".
Un caso concreto, relatado por su biógrafo: "Jésica tenia quince años cuando en el 97 la atropelló un camión y sanó con la música de Gilda. El camión la había aplastado completamente y sobrevivió. Su historia me impactó porque al revisar los papeles judiciales de Gilda, vi que la causa de muerte había sido traumatismo de tórax. Se me pone la piel de gallina".
Su música, le mejor forma de recordarla
"Yo quisiera que la recuerden cantando, porque ese era su arte, lo que hacía, lo que amaba y por lo que trascendió. Ella le transmitió a la gente alegría", cerró Reynaldo Lio.
Yo quisiera que la recuerden cantando, porque ese era su arte
Su ex pareja prefiere no quedarse en los recuerdos de aquella época de oro: "Fueron unos años bárbaros; había trabajo, estuvimos en lugares que nunca habíamos imaginado. Su música suena. En una calesita, en un evento, en una propaganda", se alegró.