A pocos días de despedir el 2024, Mirtha Legrand y Juana Viale cerraron sus respectivas temporadas televisivas con dos programas cargados de emoción, glamour y una clara apuesta por la alta costura. Ambas conductoras, iconos de estilo en sus generaciones, deslumbraron a su público con looks cuidadosamente seleccionados para la ocasión, que reflejaron tanto su personalidad como el espíritu de las fiestas de fin de año.
El sábado por la noche, Mirtha volvió a ocupar su icónica mesa y lo hizo con una frase que dejó en claro su lugar en la historia de la televisión: “Vamos a comenzar nuestros legendarios sábados porque yo, señores, ya soy una leyenda y esta continúa”. Vestida con un imponente diseño de Claudio Cosano, la diva lució un vestido de gasa limón, bordado con cristales, que resaltaba su elegancia característica. “Miren qué belleza el vestido que tengo hoy”, comentó con orgullo, mientras mostraba los delicados detalles del diseño de color amarillo que la hacía brillar bajo las luces del estudio.
Para complementar su look, Mirtha optó por accesorios que reflejaban su estilo clásico: anillos, aros y una pulsera que combinaron a la perfección con el vestido. Los aplausos y exclamaciones del equipo de producción no tardaron en llegar, a lo que ella respondió con su característico humor: “Qué exagerados que son”. Su presencia magnética, acentuada por el vibrante color de su atuendo, convirtió la velada en un cierre memorable para su temporada.
El domingo, su nieta Juana tomó la posta para despedir su año televisivo con su característico estilo moderno y audaz. “Hola, ¿cómo están? Feliz domingo. Les quiero decir que este es el último del programa, del año, de la vida, del 2024. Se acaba, se termina, finito”, expresó al inicio del programa, con su habitual tono fresco y espontáneo. Para la ocasión, la anfitriona confió en su diseñador de cabecera, Gino Bogani, quien creó para ella un vestido de crepe de seda natural. La prenda destacaba por su escote profundo, una faja que marcaba la cintura y una espalda completamente descubierta, sostenida únicamente por finos breteles de raso.
“Miren qué belleza este vestido del señor Bogani. Cuidadito, cuidadito, que estamos como al mundo nos trajo Dios”, dijo entre risas, mientras giraba para mostrar todos los detalles del diseño. Los destellos de los brillantes añadidos al vestido sumaron un toque de glamour que Juana no dejó de señalar con humor: “Todos los brillitos que le pusimos para llamar la atención acá porque Bogani… ¡en bol...!”, bromeó, fiel a su estilo descontracturado, en alusión a las transparencias de la falda que llegada a sus pies.
El look de Juana se completó con accesorios de madre perla, un peinado recogido que realzó su rostro y un maquillaje audaz que combinó sombras rojizas, delineado negro y un brillo sutil en los labios. Este equilibrio entre sofisticación y naturalidad reflejó su personalidad y dejó claro por qué es una referencia de estilo en cada una de sus apariciones.
Con estos cierres de temporada, la dupla compuesta por la famosa abuela y su destacada nieta reafirmaron su lugar como referentes de los fines de semana en la televisión argentina, dejando a su audiencia con la sensación de que, más allá del contenido, cada programa es también una declaración de estilo.
Mientras Mirtha consolidó su legado con un look clásico y deslumbrante, Juana apostó por la modernidad y el riesgo, demostrando que, pese a sus diferencias y a diferentes contratiempos a lo largo del año como reemplazos por parte de la Chiqui a su nieta por su viaje ecológico y ausencias de invitados, ambas tuvieron la capacidad de marcar tendencia y cerrar el año en lo más alto.