En medio del mediático enfrentamiento entre Wanda Nara y Mauro Icardi, una de las protagonistas inesperadas de la historia fue Cookie, la perrita salchicha que se unió a la familia meses atrás y rápidamente conquistó la atención de los seguidores de la pareja. Sin embargo, a medida que el conflicto escalaba, la ubicación y el destino de la cachorra se convirtieron en un misterio que recién se resolvió en los últimos días.
Así fue como Wanda decidió calmar la incertidumbre de sus seguidores al compartir una historia en Instagram donde se reveló que Cookie está al cuidado de alguien de su círculo íntimo. “Cuida mi salchichita”, escribió la modelo junto a una imagen de su mascota de perfil. La cuidadora mostró a la perrita disfrutando de un paseo al aire libre, mientras Wanda se encuentra en Punta del Este junto a su estilista y confidente Kennys Palacios, ocupándose de compromisos laborales.
Esta confirmación trajo tranquilidad a los fanáticos, quienes se habían preguntado qué había pasado con Cookie tras el desalojo de Icardi de la casa en Santa Bárbara y el inicio de las fiestas de fin de año. La perrita, que en un principio fue una compañía inseparable para Wanda, parecía haber quedado relegada en medio de la vorágine de acusaciones y tensiones que rodean a la mediática separación.
Cookie llegó a la vida de Wanda y Mauro durante este año, en un momento en que los rumores de crisis y separación ya estaban en boca de todos. En aquel entonces, la perrita protagonizó varias publicaciones en las redes sociales de ambos. A poco tiempo de su regreso al país y las emisiones de Bake Off Famosos (Telefe), Icardi compartió una foto de la salchicha, acompañada de un mensaje que generó especulación: “Los perros detectan el amor en el corazón, no en las palabras”.
Desde su llegada, se convirtió en la compañera inseparable de la animadora. Esto quedó demostrado cuando la llevó consigo a su primera entrevista con Susana Giménez, un episodio que regaló uno de los momentos televisivos más recordados del año. Durante el programa, la invitada ingresó al estudio con su flamante compañía en brazos, explicando que no podía dejarla sola porque lloraba mucho.
La interacción con Susana estuvo llena de humor y un incidente inesperado. “Mirá que no es para vos”, le dijo Wanda a la diva de los teléfonos al entregarle a la perrita, mientras la conductora le respondía: “Está temblando, ¿por qué me hacés esto?”. Poco después, la cachorra se hizo pis en el sillón del programa, provocando gritos y risas en el estudio. Por su parte, la anfitriona, divertida, recordó un momento similar en el que otro perro había tenido un accidente en vivo: “Trae buena suerte”, bromeó, mientras asistían a limpiar el desliz que ocurrió en plena emisión.
Más allá de las risas, la pequeña perrita representó un refugio emocional para Wanda en medio de su separación de Mauro. La modelo la llevó consigo en múltiples ocasiones y compartió momentos de complicidad con la cachorra, fortaleciendo su lugar como una integrante más de la familia. Incluso, formó un estrecho lazo con Francesca e Isabella, fruto de su relación con el deportista.
Además, la pequeña canina llegó en un momento clave de la batalla legal entre la presentadora y el delantero del Galatasaray, ya que otras de sus mascotas habían quedado retenidas en Estambul, Turquía. En un comunicado que publicó durante las primeras etapas de su separación, Wanda reveló que estaba luchando por recuperarlas, describiéndolas como “rehenes” en medio de las tensiones con Mauro. Pero, afortunadamente, la situación mejoró cuando su chihuahua y pomerania regresaron a Buenos Aires y trajeron no solo alegría para sus hijas, sino también para ella.