Se vivió un momento de alta tensión esta tarde en Gran Hermano (Telefe) luego de que la participante Martina Pereyra se desmayara de manera súbita. Cuando muchos de los “hermanitos” se encontraban en la cocina hablando, de pronto la joven modelo oriunda de la ciudad de La Plata se desvaneció y fue rápidamente asistida por sus compañeros de convivencia.
La escena no tardó en viralizarse y generó preocupación tanto en sus fans como en el resto de los televidentes del reality show. En un primer momento, se especuló con que esto tenía que ver con un tema de alimentación, ya que un rato antes de desmayarse, la propia Martina había estado hablando con Keila y Lourdes de que estaba con hambre, mientras hablaban del kiosco que es parte de esta temporada.
Desde la producción del programa aclararon qué fue lo que sucedió y llevaron tranquilidad a los seguidores, como a los seres queridos de la jugadora. “Tuvo un golpe de calor. Fue asistida por los médicos. Ya esta bien, controlada”, dijeron desde el reality en diálogo con Teleshow. Y desmintieron otras versiones que circularon.
“No tiene nada que ver con la alimentación que, de todos modos, vale aclarar que los chicos sí tienen comida dentro de la casa. En ningún momento se va a poner en juego la salud de los participantes”, aseguraron. “Incluso ayer se les adelantó parte de la compra semanal de hoy para que no estén sin comida”, afirmaron.
En paralelo, desde la cuenta de Instagram de Martina, la cual está siendo administrada por su familia y amigos durante su tiempo de juego en el programa, emitieron un comunicado para despejar las dudas sobre su salud. “Queríamos informarles que Martu ya se encuentra bien, tuvo una baja de presión pero ya está recuperándose. Gracias a todos por preocuparse”, expresaron.
“Tengo 24 años, soy modelo y soy contadora. Grito, puteo, pero no pego. Eso no”, se había autodefinido Martina, entre risas, en su video de presentación emitido en la primera emisión de esta actual temporada de Gran Hermano. “Pero levanto mucho la voz. No sé cocinar, odio limpiar. Creo que como jugadora sería muy competitiva, más por el lado de los hombres porque me gusta manipularlos. No me gusta que crean que soy una tonta porque no soy ninguna tonta”, agregó acerca de su personalidad antes de ingresar al concurso.
El último domingo se produjo una nueva eliminación en GH. Unos minutos después de la medianoche de este lunes, Santiago del Moro dio el nombre de la tercera persona a la que le tocaba abandonar la casa en una temporada que comenzó hace menos de un mes. Uno a uno fueron saliendo de placa por decisión del público y al final quedaron frente a frente Jenifer y Luz. Al final, la promotora y expareja de Ricardo Centurión la tocó decir adiós.
Luego de besarse con Giuliano, su novio, y de recibir expresiones de deseo para que tenga una segunda oportunidad en el reality show, la jugadora mostró su lado más filoso antes de decir adiós. “Un mensaje. A los que están durmiendo, despiértense que están en Gran Hermano. Y a los caretas, lo mismo”, arremetió, antes de cruzar la puerta con su valija.
La gala había comenzado con una placa multitudinaria con perfiles muy diferentes en el juego conformada por Brian, Santiago, Andrea, Chiara, Sandra, Luciana y las otras dos jugadoras. La sorpresa de la noche la dio la profesora de musculación que fue la menos votada por la gente y tuvo el privilegio de ser la primera en abandonar una placa de nominados en la que nadie quería estar. “Sos lo más, era obvio”, le dijo Tato, su aliado en la competencia, mientras ella no salía de su asombro.