Ya pasaron tres días de la consagración de Racing Club en la Copa Sudamericana 2024, título que obtuvo tras vencer al Cruzeiro de Brasil en la gran final disputada en Asunción, Paraguay, pero los hinchas académicos continúan inmersos en una mezcla de sensaciones: felicidad absoluta y desahogo, luego de cortar una sequía de 36 años sin éxitos internacionales. Ese es el caso de Guillermo Francella, uno de los hinchas más reconocidos del equipo de Avellaneda y quien tuvo el privilegio de celebrar (y sufrir) en el estadio La Nueva Olla junto a su hijo Nicolás, también fanático de la Academia.
“Fue una sensación indescriptible”, reconoció el afamado actor este martes, al brindar la primera entrevista después de gritar “campeón” en tierras guaraníes.
“Experimenté todas las sensaciones habidas y por haber. Es tan lindo ser de Racing... Hay algo con Racing... Vos veías a miles de hinchas, todos llorando... Fue una sensación indescriptible, hermosa”, admitió hoy Francella, en diálogo con el periodista Alfredo Leuco, durante una entrevista para radio Mitre.
Desbordado de felicidad, uno de los protagonistas de “El Secreto de sus ojos” -que en 2009 ganó el premio Oscar a la mejor película de habla no inglesa- llenó de elogios a Gustavo Costas, entrenador que volvió a poner a Racing en el primer plano internacional, y a sus jugadores. “Se lo merecían absolutamente. Lo que formó Gustavo Costas con este grupo es tal cual, porque son todos chicos que trajo él. Les generó un sentido de pertenencia tan fuerte que nos llenó el alma, nos contagiaba”, subrayó.
Pero para llegar a este momento de gloria, el pueblo racinguista debió atravesar situaciones desesperantes, a punto tal que a fines de los ‘90 el club estaba en quiebra y a nada de desaparecer. Y todas las malas, ahora, para Francella cobraron un sentido especial. “Vivimos en la adversidad desde que yo tengo uso de razón. Yo me levantaba a la mañana, abría el diario y el título era ‘El club del caos’. Todo era malo, desaparecíamos, financieramente no existíamos, jamás tuvimos peso en la AFA, los fallos arbitrales siempre para atrás, siempre en mitad de tabla, siempre peligrando el descenso… Todo esto, en un club tan grande y con tanta hinchada, y de golpe desapareció del mapa… Fue muy fuerte…”, lamentó durante el reportaje radial.
Sin embargo, desde hace unos años la realidad de Racing comenzó a cambiar paulatinamente. “Hay como una energía distinta ahora. Hay algo con el Racing positivo… Nosotros teníamos tanto miedo en el 2-1 porque conocemos a Racing, que nos ha pasado muchas veces… Ahora nos empatan y nos dan vuelta el partido… Pero hay una energía diferente. En este caso puntual, Gustavo Costas, que fue ninguneado muchas veces, hoy se merece todo lo que tiene. Y él le dio esta energía positiva a Racing, como en su momento fue Gago, Coudet, Cocca, en su momento Merlo. Es la gente que ha pasado por Racing que cambió la mentalidad”, puntualizó Francella.
“Esta Copa me la guardo entre los grandes resultados, como cuando uno recuerda los goles. Como el del chileno (Marcelo Díaz) cuando nosotros ganamos con 9 jugadores a Independiente, que fue uno de los goles que más grité en la vida, el gol de Bedoya a River, en la época de Merlo”, recordó.
Consultado por las elecciones presidenciales del club de sus amores, que se llevarán a cabo el próximo 15 de diciembre y tienen como principales candidatos al actual presidente de la institución, Víctor Blanco, y a Diego Milito, uno de los grandes ídolos del club, Francella fue sincero y aseguró que él “hubiera preferido la unidad”.
“Parece que no llegaron a un acuerdo. Son dos personas muy queridas. Blanco ha sido un brillante presidente de esta etapa, y Diego es amado, viene con una mentalidad y ganas de hacer cambios”, valoró.
Por último, Francella tuvo tiempo para bromear a los hinchas de otros clubes que hoy en día pujan por uno de los boletos que aún quedan disponibles para disputar la Copa Libertadores 2025. “Mucha gente está feliz, algunos porque les quedó el cupo para la Libertadores. Tanto amor, tanto amor, pero están contentos porque por lo menos dos más pueden entrar”, concluyó entre risas.